Realizar este análisis de Hell Pie ha sido divertido. Se trata de uno de esos juegos que te ofrecen una jugabilidad que cumple y que además en la mitad está repleto de humor. Hell Pie es un juego de plataformas 3D en el que te embarcas en una aventura bastante excéntrica buscando los ingredientes para hacer una tarta de cumpleaños para Satán. Cada uno de los niveles que te encontrarás desborda de creatividad y llegan a ser bastante encantadores, a su manera.
Uno de sus principales encantos es su humor negro, que desborda y muchas veces te sorprende con chistes que se exceden bastante por su crueldad. Por lo demás es un juego de plataformas en 3D entretenido y que será una opción interesante para aquellos que disfrutan del género. Como es un indie, no estará exento de problemas, bugs que a veces pueden molestar un poco o mecánicas que no llegan a funcionar tan bien. Pero en general el juego funciona muy bien.
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Una aventura por el infierno y algo más
Nuestro Avatar se llama Nate y es el demonio encargado del mal gusto. Es un personaje caricaturesco bastante curioso: «trabaja» en Sin Inc. sin ocuparse mucho, hasta que Satanás le pide personalmente que se encargue de hacer una tarta para su próxima fiesta de cumpleaños. Luego de una corta fase de introducción en donde te introducen a tu compañero de aventura, un querubín bastante malogrado, emprendes tu aventura sabiendo que tu fracaso significará una muerte horrorosa.
Se trata de un juego de plataformas, y eso significa que tu avatar puede saltar, dar un doble salto y hacer pequeñas zancadas. Adicional a esto tienes a un compañero que te dará más opciones de movilidad. Con la ayuda de tu pequeño compañero puedes ampliar esos movimientos. Se trata básicamente de un punto de anclaje en el aire que sirve para columpiarse de un lado o otro y alcanzar zonas de difícil acceso.
Tendrás mucho más para hacer. Cada nivel del juego te dará una lista de objetos coleccionables que encontrar, que no serán pocos, y que además tendrán una buena recompensa. Esto estimula la exploración de los niveles además del esfuerzo que se pone en mejorar la habilidad para manejar las poderes del personaje, ya que a veces llega a ser bastante retador.
Habilidades y coleccionables
Los coleccionables que ofrece el juego son muchos y van desde latas de carne hasta gatos dorados, y mucho más. Estos coleccionables están por lo general escondidos en lugares a los que no llegarías simplemente caminando. De hecho, deberás aprender a utilizar todas las opciones de movilidad que ofrece tu avatar para lograr conseguirlos. La recompensa de esto será todo tipo de nuevos poderes. Aunque no con todos los coleccionables.
Las latas deberán ser tu objetivo porque la acumulación de estas es lo que te ayudará a avanzar en el árbol de habilidades de Nate y Nugget, el querubín. Por ejemplo, inicialmente solo podrás balancearte desde tu querubín una vez. Pero podrás mejorar esto para balancearte cinco veces. A lo que puedes sumar tus otras habilidades que te permitirán avanzar por parte del escenario sin tocar tierra firme en un buen rato. Lo que en definitiva facilitará mucho el juego.
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Otro coleccionable que deberás buscar son las ovejas unicornios que aparecen por el terreno. Este coleccionable está relacionado con un ritual que hace parte del humor negro del juego y que puede tocar susceptibilidades por lo cruel que es. Cada oveja deberá ser sacrificada en un altar y luego de sumar una buena cantidad de cuernos recibirás nuevos poderes que incluyen guía a lugares de interés, los niveles centrales, esprintar a supervelocidad, derribar paredes y brillo en lugares oscuros.
El humor y diseño de niveles
Como ya lo he dicho a lo largo del análisis de Hell Pie, un elemento clave del juego es su humor. Mientras el diseño del juego en niveles y demás sería para todo público, el humor no lo es. Hell Pie es un juego muy crudo. El humor de este título está lleno de referencias a cosas asquerosas y mucho gore. Y esto puede ser una barrera para quienes realmente lleguen a disfrutar del juego. A mí me pareció bastante divertido porque no encuentras esto normalmente en los videojuegos.
Casi que podría decir que es refrescante como experiencia. Pero de nuevo, si no te gusta esta clase de humor, Hell Pie podría no ser tu juego. Además, el juego está lleno de creatividad que explota el humor, un poco más moderado ya, en el diseño de niveles. Cada subnivel más lineal tiene un tema, y ninguno decepciona. Desde drogas psicodélicas hasta el interior de una ballena llena de cosas desagradables. No hay dos niveles iguales.
Conclusión del análisis de Hell Pie
La mejor manera de terminar este análisis de Hell Pie, es profundizando en sus faltas. Podemos empezar porque si te esfuerzas demasiado buscando coleccionables, por la mitad del juego ya te será más fácil cumplir los retos, pues habrás desbloqueado la mayoría de tus poderes. Además, aunque la mayoría de estas habilidades son bastante útiles, al final del juego, cuando puedes agarrarte a casi cualquier sitio sin sudar, las nuevas habilidades que desbloqueas llegan a ser bastante decepcionantes.
Por otro lado están los errores. Uno de los bugs que me encontré y me molestó bastante fue en uno de los niveles iniciales, al interior de la ballena, en una zona en la que debía escalar por un tubo, el avatar se atascaba. Tuve que reiniciar el nivel para eliminar ese bug. Y en la misma zona encontré una mecánica bastante molesta y es que en cierto sector, al morir se volvían a rehacer los obstáculos. Pero el punto de control estaba en la mitad de esos obstáculos, entonces debía devolverme para eliminarlos de nuevo y volver a avanzar, fatal.
Con todo, Hell Pie es una gran experiencia para quienes disfrutan de los juegos de plataformas en 3D. Tiene algunas cosas que no son para todos como su humor crudo o que gran parte del diseño del juego esté basado en obtener coleccionables para hacerte mejor y más poderoso, pero en sus 8-12 horas de juego, Hell Pie logra ser un juego bastante decente y en algunos aspectos bastante especial. Sus errores le pasan factura, pero la experiencia final es bastante buena.
