La resolución de la CMA (Autoridad de la Competencia y el Mercado de Reino Unido) en el día de ayer aún sigue coleando. El organismo británico bloqueó la compra de Activision Blizzard King por parte de Microsoft alegando que la compañía de Redmond se haría demasiado fuerte en el terreno de la nube, por lo que decidió no dar la luz verde a la fusión.
Durante los últimos meses, Sony ha sido la principal fuerza opositora al acuerdo de cara a la CMA, con múltiples informes y documentos en los que mostraban su preocupación. Sin embargo, no ha sido la única. Y es que ahora hemos sabido que algunas compañías dijeron a la CMA que la compra de Activision dañaría la competencia. Así lo reconoce el propio organismo regulador en sus conclusiones finales.
Sony y Google, los mayores opositores
En las conclusiones, la CMA señaló qué es lo que le dijeron desde diversas fuentes. Microsoft y Activision, por su parte, no consideraban que la fusión condujera a preocupaciones sobre la competencia ni en el mercado de las consolas ni en el del juego en la nube. Sin embargo, el organismo apunta a que “los puntos de vista de los terceros eran diversos”.
“Algunos grandes negocios del gaming consideraban que la fusión dañaría seriamente la competencia y que el remedio conductual propuesto por Microsoft era inefectivo, inadecuado y/o distorsionaría el mercado. Otros apoyaron más el acuerdo señalando que la fusión no dañaría significativamente la competencia”.
Aunque la CMA no explicita el nombre de las compañías, múltiples fuentes y el propio conocimiento del proceso dejan entrever que se trata de Sony (bien sabido públicamente porque así lo ha querido hacer ver la empresa japonesa) y Google, especialmente molesta por la competencia que supondría en el mercado del juego en la nube, aspecto que finalmente ha acabado por bloquear el acuerdo.
En busca de alternativas
La compra de Activision Blizzard King es un movimiento vital para Microsoft y es por ello que la compañía norteamericana no se va a dar por vencida incluso tras el bloqueo de la CMA. Ambas empresas ya trabajan codo con codo en el recurso que presentarán ante la justicia y también se habla de otras posibles vías por las que Xbox podría acabar saliéndose con la suya. Una de las que se está hablando en las últimas horas es la de que Microsoft pida directamente al gobierno británico que revoque la decisión de la CMA. El propio presidente Brad Smith ya ha dejado caer que salir del Reino Unido sería una posibilidad.