A lo largo del último lustro, Los Sims 4 ha viajado por cualquier rincón que puedas imaginar, incluso llevándonos a entornos paradisíacos o a mundos mágicos repletos de hechizos y criaturas. Ahora la obra de Maxis ha logrado una colaboración que tarde o temprano tenía que llegar. La asociación entre Electronic Arts y Star Wars en el mundo de los videojuegos ha permitido que la franquicia espacial aterrice en Los Sims 4: Viaje a Batuu, una nueva expansión del simulador de vida que opta por un enfoque diferente al habitual y que incluso se atreve a coquetear con el RPG. En pequeñas dosis, claro. Nosotros ya hemos podido probarlo en Xbox One y ahora te contamos qué nos ha parecido y si merece la pena, seas o no fan de Los Sims o Star Wars.
Conviértete en alien
Aunque el plato principal de Viaje a Batuu es el mundo creado específicamente para la ocasión, la nueva expansión de Los Sims 4 también incorpora nuevos elementos de personalización para tus sims y objetos para tus creaciones inmobiliarias. Sin embargo, estos ítems adicionales son la parte menos importante del contenido, pues son menores en número de lo que nos hubiera gustado. Más allá de unos cuantos atuendos para meterte de lleno en el mundo de Star Wars (e incluso emular directamente a Rey o Kylo Ren), tan solo encontrarás disfraces que te permiten “convertirte” en diferentes razas alienígenas, pero no crear un personaje alienígena como tal.
Viaje a Batuu también ha incluido dos nuevas aspiraciones vitales relacionadas exclusivamente con el contenido de Star Wars. Una de ellas consiste en alcanzar el éxito en tu carrera de ascenso por una de las dos ramas de la expansión, la Resistencia o la Primera Orden. La otra potencia que tu sim desee relajarse en Batuu y desentenderse de las responsabilidades sociales. No obstante, no encontramos nuevos rasgos específicamente enfocados al DLC de Star Wars, por lo que tendrás que seguir eligiendo entre los clásicos que modifican el carácter y el modo de entender la vida de tu sim.
Los Sims versión Westworld
El precio de la expansión (de 19,99 euros) ya nos advertía que no encontraríamos un mundo nuevo en Viaje a Batuu, pero teníamos la esperanza de que así fuera. Finalmente tenemos un nuevo minimundo en el que no podemos instalarnos y al que para poder llegar debemos trasladar a una familia ya existente o a una recién creada a un solar o casa y, desde nuestro teléfono móvil, pedir unas vacaciones. Será entonces cuando se nos despliegue la lista con posibles destinos y uno de ellos será Batuu. Es precisamente por ello que nuestra primera impresión al escoger este destino vacacional se nos vino a la mente Westworld, donde personas del mundo real se lanzan a una aventura formato western. De un modo similar funciona Viaje a Batuu, al que deberemos viajar como sim corriente y, ya dentro del mundo, mimetizarnos con el entorno.
De hecho, una de las primeras misiones de la expansión consiste en escoger nuestro atuendo para Batuu, donde podremos elegir entre algunas de las nuevas prendas (otras muchas estarán bloqueadas hasta que vayamos ascendiendo en el escalafón ya sea de la Resistencia como de la Primera Orden. Sea como fuere, la primera impresión del mundo creado por Maxis es muy buena, con una alta dosis de fidelidad a la obra original. Entrar en la cantina, escuchar la música e interactuar con los diferentes personajes es todo un soplo de aire fresco para la fórmula habitual de Los Sims 4. Por las calles encontramos todo tipo de elementos que no dejan de recordarnos la franquicia creada por George Lucas, como soldados imperiales, sables láser o el mismísimo Halcón Milenario.
Batuu está dividida en tres zonas. Una de ellas, de la que hemos hablado hasta el momento, es una suerte de territorio neutral en la que podemos encontrar la mencionada cantina y también diversos edificios madriguera en los que podemos cambiar nuestro vestuario, asear a nuestro sim sin necesidad de salir de las “vacaciones” o adquirir comida. Las otras dos, como imaginarás, son las destinadas a cada uno de los bandos. Por un lado tenemos un bosque en el que se refugia la Resistencia y que básicamente consiste en un campamento no muy extenso. Por el otro, la zona de la Primera Orden, más a modo de ciudad pequeña.
El sim recadero
Los Sims 4 ya había coqueteado con los elementos RPG en pasadas expansiones y ahora lo vuelve a hacer con Viaje a Batuu con el encanto adicional de estar metidos de lleno en un mundo de Star Wars. Sin embargo, las misiones de este DLC no son tan interesantes como nos hubiera gustado. El contenido ha heredado esa sensación de recadero tan típica de los juegos de rol en lo que prácticamente la totalidad de las cosas que tenemos que hacer son desplazarnos de un lugar para otro haciendo tareas que al principio son simpáticas pero que se acaban haciendo tediosas y repetitivas. Hablamos de charlar con diferentes personajes u observar al enemigo. ¿Lo mejor de todo? Poder luchar con espadas láser, jugar al juego de cartas Sabacc o hacer uso de nuestro droide (que podemos comprar y personalizar a nuestro gusto) para distraer al enemigo para poder infiltrarnos en sus instalaciones.
Resulta interesante que los simoleons del mundo exterior no valgan para Batuu y que en esta zona tengas que conseguir créditos para poder subsistir. Los podrás ir adquiriendo completando misiones y aunque al principio es complicado hacerlo, pronto te verás con un colchón suficiente como para ir comprando todo aquello que te interesa. El progreso dentro de las facciones desbloquea nuevos atuendos y nuevas acciones, por lo que siempre hay algo novedoso que hacer dentro de Batuu. De igual, manera otro de los aspectos destacables del contenido es la música, que emplea temas conocidos de la banda sonora de la saga Star Wars y les aporta el toque particular de Los Sims. Todo un acierto que acompaña a las mil maravillas a la aventura.
No cabe duda de que juntar Los Sims y Star Wars era una gran idea y lo cierto es que Viaje a Batuu tiene suficientes detalles interesantes como para atraer a los fans de una u otra saga (o las dos). Sin embargo, como expansión de Los Sims 4 no aporta grandes novedades, al contrario que casi cualquier otro DLC del juego de Maxis. Los elementos RPG, si bien tienen su interés en los primeros compases, pronto se vuelven repetitivos, algo a lo que no ayuda no tener una línea argumental mejor definida y más interesante.