En el mundo de los videojuegos existen infinidad de shooters. No obstante, no todos se prestan a dar una experiencia que difiera de los juegos que hay actualmente en este momento. Sin embargo, sí que hay excepciones de juegos que prefieren saltarse la regla e ir más allá. Este es el caso de Severed Steel, un shooter frenético que si bien no me ha dejado indiferente, podría haber sido distinto. Quédate, que te voy a contar todo sobre Severed Steel, una apuesta prometedora.
Un gameplay… ¿frenético?
No os voy a mentir. Al principio me costó un poco acostumbrarme a los controles un tanto extraños que tiene Severed Steel, y aunque se pueden configurar sin problema, en realidad no hay demasiadas opciones para personalizar dichos controles. Da igual en qué botones pongamos cada acción, ya que cuando juguemos se seguirá sintiendo diferente. Desconozco si la intención era justamente esa, pero esto no cambia que me haga sentir incómodo a la hora de jugar.
El juego se va poniendo más interesante a medida que avanzamos por las salas, llegando a un punto donde recibiremos un cañón como el que tiene Samus Aran en su traje gravitatorio. Este traje nos servirá para avanzar por las distintas salas abriéndonos paso a disparo puro, dejando agujeros por todas las salas por los que podremos avanzar para llegar a nuestros objetivos, tal y como indica el propio nombre del juego. Otra cosa que no me ha gustado es la falta de optimización que tiene el juego. Al ser un juego tan frenético y veloz, es importante que vaya muy fluido, pero este no es el caso.
Falta de optimización
Como he dicho en el apartado anterior, la optimización es algo que perjudica al gameplay, ya que el juego no va a 60 fotogramas estables y si sumamos que es un juego en primera persona, que nos estaremos moviendo muy rápido por todos los sitios y girando constantemente la cámara sin tener mínimo 60 fotogramas por segundo… Tendremos un viaje al baño asegurado, o en el mejor de los casos, simplemente un mareo por el que deberemos apagar la consola (sí, me ha pasado). Desconozco en su totalidad la opinión de otro analista o jugador, pero en mi caso, no he podido aguantar más de unos cuántos minutos sin empezar a marearme y tener que soltar el mando.
No voy a ponerle muchas más pegas o puntos negativos en esta sección, ya que aunque hay mucho que mejorar en el rendimiento y los 60 fotogramas inexistentes deben ser obligatorios, estoy seguro de que en algún momento escucharán y actualizarán el juego para consolas. Entonces, y solo entonces, es cuando retomaré de nuevo esta aventura.
Gráficamente aceptable
Este juego no pretende ser un portento gráfico ni mucho menos, pues lo que nos quiere brindar es una experiencia jugable fluida, que como hemos dicho en los anteriores apartados, lo intenta, pero lográndolo a medias. Aun así, hay que destacar que ya hemos visto otros juegos indies como Bright Memory: Infinite, que por tener, tiene hasta raytracing y una tasa de fotogramas muy fluida que en el caso de que Severed Steel también lo tuviese, nos daría una experiencia mucho más gratificante y diferenciadora de lo que nos puede llegar a dar actualmente.
Desconozco su versión de PC u otras consolas, pero dudo mucho que haya mucha diferencia entre versiones, ya que si a día de hoy no han actualizado el juego para arreglar el rendimiento en Xbox Series, dudo que lo hagan en otras versiones del mismo.
Diseño de niveles confuso
A veces (y solo a veces) me he podido llegar a sentir un poco perdido y desorientado en ciertos niveles, ya que quedas »atrapado» y debes usar el cañón cargado para romper paredes metálicas para avanzar por dichos niveles. Estos se componen únicamente de objetivos a cumplir como por ejemplo, activar unos pocos generadores o destruirlos y posteriormente avanzar al siguiente nivel. Todos los objetivos que van variando son muy sencillos de completar, pero actualmente es complicado jugar en modo difícil sin una buena optimización.
Por otra parte, si bien no es un juego desafiante, sí que se pueden llegar a complicar algunos niveles al ser laberínticos o al principio no saber muy bien hacia dónde ir, ya que en este juego no nos darán la comida con cuchara, sino que tendremos que buscar a los objetivos para poder localizarlos y no tendremos una sombra roja todo el rato que podremos ver tras las paredes, no. El juego quiere que exploremos el entorno y explotemos al máximo las mecánicas que nos ofrece a la hora de jugar, un punto muy a favor del mismo.
Análisis de Severed Steel – Conclusión
La premisa del juego y lo que nos plantea no es una mala idea. De hecho, esta idea de ser un Superhot sin necesidad de gafas VR es una muy buena idea, pero la falta de optimización y algunas trabas que os hemos mencionado, es algo que quizá no termine de hacer que esta idea cuaje bien en la fórmula. Por todo esto es por lo que considero que Severed Steel no debería ser jugado hasta recibir una mejor optimización.