Gateway Interactive nos trae un juego arcade de carreras con un marcado estilo retro cuyas pistas están generadas por procedimientos (el contenido se crea sobre la marcha en lugar de crearse antes de su distribución). Con una estética parecida a la de Tron, el juego nos obligará a evitar los peligros que van surgiendo dependiendo de la velocidad y el ritmo de la música. Este es el Análisis de Spectra.
Píxeles y neones se dan la mano en este genial juego de carreras espaciales. Spectra es uno de esos títulos en los que está terminantemente prohibido pestañear si no queremos empotrarnos contra obstáculos poligonales de un electrizante color fucsia o salirnos de la pista para perdernos en el vasto espacio con nuestra nave/GameBoy de carreras. La premisa de Spectra es sencilla, acaba el circuito, si puedes.
Insert Coin
Transforma tu Xbox One en una recreativa con Spectra. «Insert Coin» es lo que reza en la pantalla principal del título de Gateway Interactive, pero no os preocupéis, no tendremos que introducir monedas de cinco duros en nuestra Xbox. Obviamente, Spectra se trata de un juego totalmente arcade, que perfectamente podría haber estado al lado de Metal Slug o Super Pang en aquellos salones recreativos de finales de los 80′.
En Spectra solo necesitaremos el stick izquierdo, la cruceta o los gatillos para virar nuestra nave, no necesitaremos más controles. Básicamente, sumaremos puntos recogiendo una serie de cubos amarillos repartidos por la pista, rozando obstáculos para conseguir amplificadores que nos ayuden a multiplicar nuestra puntuación, pillar rampas para sumar «aéreos» y pasar por encima de boosters para aumentar nuestra velocidad, y por ende, las probabilidades de meternos más de un castañazo, perdiendo así varios puntos por el camino o acabando directamente fuera de la pista, por lo que tendremos que empezar de nuevo el nivel.
Chipzel
Los tempos nos los marca Niamh «Chipzel» Houston, una joven compositora y productora de origen norirlandés afincada en Londres, que irrumpió en el mundo de los juegos en 2013 componiendo la música del juego de Terry Cavanagh, Super Hexagon. Inmediatamente, Chipzel se hizo con un nombre en la escena por sí misma, gracias a su estilo chiptune. Con solo una GameBoy y varios programas de música, Chipzel es capaz de producir enérgicos temas electro/dance, con los que se consigue una máxima inmersión en Spectra. El ritmo de la música será lo que marque la aleatoriedad de las pistas, poniendo en nuestro camino más o menos obstáculos, bifurcaciones y aumentando la velocidad en determinadas ocasiones. Es más, la duración de las canciones de Chipzel en Spectra, determinarán el tiempo para finalizar cada una de las carreras.
Play Hardcore
Spectra se divide en 10 pistas o niveles, en los que tendremos que llegar al final de cada una sanos y salvos para sumar tres estrellas como máxima puntuación, aparte de los puntos que hayamos logrado por el camino. Me llevó un par de horas completar todo el recorrido, pero fue en el modo Hardcore donde Spectra me llevó a dar lo máximo, ya que se multiplicaban los obstáculos en pista hasta niveles ridículos, e incluso creo que la velocidad también aumentaba de manera significativa. Un verdadero reto que me costó varias horas y la misma vida completar, pero que finalmente pude conseguir sin que se me engarrotaran los pies de la tensión o se me secaran los ojos en el intento.
Off Course
¿Alguna vez habéis jugado a AudioSurf, F-Zero o Wipeout bajo los efectos del LSD? Esto es Spectra. Una rave 8bitera, una carrera epiléptica de la que podréis disfrutar por poca pasta –7,49€– y viciareis todas las horas que queráis, ya que las pistas no serán nunca iguales y su nivel de dificultad Hardcore os propondrá un serio reto. Tanto como conseguir sus 1000G, con logros como no chocarse ninguna vez en una carrera o llegar a los 100.000 puntos.
Por contra, he de decir que falta variedad, como modos de juego extra y algo de «creatividad» ya que el modelado de pistas, colores y formas son siempre las mismas en cada uno de los 10 circuitos. Hubiera molado poder tener naves diferentes y por supuesto un modo online o multijugador local a pantalla partida. No entiendo muy bien como al hacer ports desde PC o móviles a consola, los desarrolladores no se toman la molestia de incluir verdaderos añadidos a sus juegos. Podrían haber incorporado más pistas, modos de juego y diferentes elementos para hacerlo más longevo y/o curioso. Pero bueno, para echar el rato, encontramos en Spectra un sencillo pero buen arcade de carreras que nos pondrá a prueba y nos hará pasar un rato divertido. El típico titulo independiente para descansar entre triples A, pero que se queda algo corto en la mayoría de sus facetas. Exceptuando su música, por supuesto.