No son pocos los usuarios que han notado que The Crew es un juego de conducción arcade que ofrece ciertas sensaciones poco predecibles, si bien, el título de Ubisoft puede llegar a marcar ciertas diferencias frente a otros que explotan la conducción arcade, resulta evidente que la exigencia de esta con respecto a la magnitud del mapa y las diferentes superficies que abordamos es harto complicado.
Obviamente, resulta interesante considerar el tipo de firme en el que conducimos, no obstante, las carreteras no están pensadas para conducir de una forma precisa y controlada, como sería en un circuito, y en la mayoría de ocasiones, es precisamente un bordillo, un resalto, otro coche, quien no nos deja realizar una trazada limpia y eso conlleva, generalmente, problemas. Aún así, conseguir que el vehículo sea gobernable es cuestión de unos minutos, atender una serie de aspectos de configuración y disfrutar de más de 10.000 km de carreteras y caminos.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que The Crew cuenta configuraciones básicas, a las cuales se accederá desde el movil, también conocido como menú de pausa que no pausa el juego, así que aparcad el coche y atended a nuestra pequeña guía para configurar la conducción. Abriendo el menú, en la sección de configuración, nos desplazaremos hacia la ventana de configuración de mando, en esta, veremos una serie de opciones, como son las ayudas a la conducción, el cambio manual o automático, y una serie de parámetros regulables que implican sensibilidad de dirección, zona muerta, velocidad de dirección, que abordaremos posteriormente.
En un principio, el juego comienza como todos, con la configuración básica que ofrece asistencia completa a la conducción, aunque en otros juegos esto incluye frenado automático, lo que realmente significa es que tendremos conectadas las ayudas conocidas como asistencia a la conducción, ABS, ESP o TCS, vamos, que no se bloqueen las ruedas al frenar, que el coche no se vaya cuando giramos y que la aceleración no implique el patinaje de las ruedas por exceso de potencia. Esto ofrece una experiencia bastante pobre, si bien, las frenadas serán muy falsas y controladas, el coche tiende al subviraje tanto en frenada como en aceleración. Todo bajo control, si, pero deberemos ir más despacio si queremos dar una curva.
Posteriormente encontramos otra opción, la conducción deportiva, la cual reduce el efecto de estas ayudas haciendo más probable que el coche bloqueé las ruedas o derrape si apuramos el acelerador. Ciertamente, este efecto no se deja notar demasiado a la hora de jugar, estando todo demasiado controlado, aunque en superficies resbaladizas, podamos notar algo su efecto. El coche sigue subvirando, algo menos, y en algunos casos, coches concretos como los muscle car, podemos notar que el coche quiere irse, pero todo bajo control, hacer un trompo por exceso de potencia y giro es muy muy dificil.
Por último, tenemos la configuración denominada experto, la cual, a priori, desconectaría toda ayuda activa a la conducción, sin ABS, ESP o TCS, resulta mucho más fácil bloquear las ruedas, que el coche se vaya por giros bruscos o que comience a derrapar de forma indiscriminada si no gestionamos bien el gas. Aún y todo, la sensación que ofrece el juego con esta configuración es algo impredecible, si bien, no podemos negar que en estas circunstancias se requerirá de una precisión mayor en un juego en el que gusta apretar a fondo el pedal, bueno, mejor dicho, el gatillo. Pero el coche sigue teniendo un comportamiento que tiende al subviraje y que cuando le da por sobrevirar, es decir, que la parte trasera del vehículo se escapa, recuperar el coche es demasiado dificil.
Tal como hemos comentado, existen una serie de parámetros que se usarán para afinar la configuración de nuestro mando y la respuesta sobre la conducción. Cabe reseñar, que estos parámetros son muy personales, cada uno puede modificarlo a su gusto para adaptarlo a su nivel de exigencia y estilo de conducción, ya que, sin ser un reglaje para el coche, si determina cambios de importancia en el manejo de todos los vehículos por igual. Vayamos por partes,
- La sensibilidad de dirección hace referencia a la relación que hay entre el movimiento del stick y el volante, cuanto más sensible, un menor movimiento en el stick implicará un cambio mayor en la dirección, ofreciendo de este modo, una mayor resistencia al giro. Cuanto menos sensible sea, más se tendrá que actuar sobre el mando para ejercer un giro menor, mientras que si aumentamos la sensibilidad, apenas tocando un poco el mando, girará mucho. En The Crew puede ser interesante que esta sensibilidad sea algo elevada, pues el vehículo tiende a sobrevirar y da la sensación de que se debe a una respuesta escasa del mando sobre el volante.
- El alineamiento de la dirección puede resultar muy útil para aquellos que jueguen con volante, ya que lo que implica, es la relación existente entre el giro del volante que nosotros tenemos con el giro del volante del juego, de modo que, un giro de 45º por nuestra parte, implique un giro de 45º en el juego. Con el mando, apenas tiene efecto, aunque si hemos configurado una sensibilidad elevada, esto podría tener un efecto, haciéndola todavía más sensible.
- La velocidad de dirección hace referencia a la representación que hacemos nosotros del giro en pantalla, por ejemplo, para girar de izquierda a derecha, con un stick, se hace casi instantáneamente, mientras que con un volante se tarda más. Este parámetro nos permite controlar dicha velocidad en el juego, que sin llegar a ser instantánea, permite que la animación y, por tanto, el cambio de dirección, se haga más rápidamente. Es un parámetro importante, pues con continuos giros esquivando obstáculos, que tarde en exceso va a provocar que el coche no varíe tan rápidamente su dirección y con ello, se requerirán más metros para hacer un mismo slalom si no se baja la velocidad
- El angulo muerto de la dirección hace referencia a esa porción del movimiento central del stick y su efecto sobre el juego. Cuanto menor sea el angulo muerto, más probable es que cualquier movimiento del stick, incluso involuntario, pueda suponer un giro del vehículo. Reducir este angulo muerto al mínimo ofrece una respuesta inmediata a cualquier movimiento, pero también, problemas varios. Tampoco interesa ampliarlo demasiado, porque entonces tardaremos mucho en conseguir un giro y reduciremos el rango de movimiento para poder trazar curvas abiertas.
- El alineamiento del acelerador y el freno son dos parámetros que miden el grado de sensibilidad de ambos gatillos en su efecto al conducir, que sea muy sensible permite que cualquier mínimo cambio se vea reflejado y permitirá un mayor grado de control, no obstante, no excederse en este aspecto resulta vital, ya que en determinadas ocasiones el control puede ser impredecible. En cambio, si nos vamos al otro extremo, se reducirá mucho la probabilidad de bloqueo o derrape, si no hay ayudas, ya que estamos limitando hasta el final, que considere que hemos acelerado a tope y obviará los pequeños cambios que hagamos para controlar un bloqueo en la frenada o derrape.
Con esto, la experiencia que propone The Crew puede llegar a mejorar significativamente, pues, con tantos kilómetros de carretera, y áreas sin asfalto, el placer de conducir por este extenso mapa será más llevadera. Esperemos que os haya servido de ayuda y que podáis disfrutar de este juego como merece.