Uno de los debates más recientes en torno a la industria del videojuego ha sido el de los NFT (non fungible tokens), activos digitales permanentes. Compañías relevantes como Ubisoft o GSC Game World (aunque el estudio ucraniano reculó tras las críticas de los fans) ya se han sumergido en esta tendencia tecnológica, pero los NFTs tienen mucho más peso en el mercado móvil. En ese sentido, ahora Corea se pone seria contra los juegos con NFTs, los llamados play-to-earn (juega para ganar). Así lo ha hecho saber el portal GameRant, que se ha hecho eco de la solicitud recientemente emitida por el Comité de Administración de Juegos de Corea del Sur.
Según esta información, el mencionado ente surcoreano ha pedido a Google Play y la App Store que bloqueen cualquier juego móvil que pida como requisito para acceder al mismo adquirir NFTs. Igualmente, Corea del Sur parece estar bloqueando los juegos ya existentes y los futuros que incluyan esta tecnología. ¿Cómo lo van a hacer? Negándoles la calificación por edades, paso indispensable para poder formar parte de una tienda digital en el país asiático. Corea ha dado estos pasos para restringir el acceso de unos juegos que consideran cercanos a las apuestas (lo que ya ocurrió con las cajas de botín) y que denominan “esquemas especulativos para hacer dinero”.
De hecho, en Corea del Sur hay un límite establecido para los micropagos dentro de los videojuegos de 10.000 wones (poco más de siete euros), según explica GameRant. Este es un nuevo paso en la limitación de los juegos NFT, que parecen estar ganando popularidad en los últimos tiempos ante las dudas y preocupación de pesos pesados de la industria del videojuego. El propio Phil Spencer, jefe de Xbox, se sentía intranquilo con la llegada de esta tecnología que “fomenta la especulación” al mundo del ocio electrónico.