Prey, el reboot de la serie de acción espacial de manos de Arkane Studios, se convirtió en uno de los juegos más destacados del pasado 2017 gracias a su propuesta de ciencia ficción de estilo art decó en la que tenemos que sobrevivir a una invasión alienígena en una estación espacial y descubrir los oscuros secretos que rodean a la Talos 1 y la especie Tifón. La tensión jugable y la retorcida trama de esta propuesta consiguieron ganarse el favor del público y la crítica.
«No podemos exigir a Prey o Wolfenstein que vendan como Fallout», dice Bethesda
Tras el lanzamiento de Mooncrash, la primera expansión de Prey, que nos proponía escapar de la Luna con diferentes personajes y decenas de variables, llega Typhon Hunter, un modo multijugador asimétrico donde tendremos que acabar con cinco miméticos en una propuesta donde nada es lo que parece. Al estilo de otras propuestas del género, un jugador tendrá que hacer frente a otros cinco oponentes y salir con vida, solo que aquí los enemigos son miméticos, una variante de la especie tifón que tiene la habilidad de adoptar la forma de objetos cotidianos del entorno, por lo que la amenaza podría aguardar en cada rincón sin ni siquiera saberlo.
«Prey es un juego muy grande. Difícil de catalogar pese a todas sus influencias. Repleto de posibilidades, con una ambientación de ciencia-ficción sublime y, sobre todo, con mucha personalidad. Si queréis una excelente aventura hay muchas razones por las que no os lo deberíais de perder». Echa un visto a nuestro análisis de Prey para conocer todos los detalles que envuelven esta misteriosa historia.
Typhon Hunter llega a a Prey de manera gratuita el próximo 11 de diciembre para todos los poseedores de Mooncrash, su primer DLC.