Están siendo días muy movidos como consecuencia de la intencionada relación de la violencia con los videojuegos. Incluso, esta semana, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se ha reunido con los responsables de empresas como Bethesda y Take Two, para abordar esta problemática. Todo esto está suponiendo una asociación indebida de los videojuegos con los acontecimientos violentos que tienen lugar en el mundo, si bien, los que realmente desatan este tipo de debate, son los acontecimientos que suceden en territorio norteamericano.
Pero ante estas severas acusaciones, bien vengan del presidente de Estados Unidos o de los medios de comunicación a través de sus telediarios, existen múltiples estudios que aseguran que esta relación no tiene ningún sentido. Aprovechando este tirón mediático derivado en un conflicto de intereses, con esa tendencia a tener que acusar a algo de las cosas malas que suceden, un estudio afirma que el 80% de los asesinos, no están interesados en los videojuegos.
THE REAL LINKS BETWEEN VIDEO GAMES AND VIOLENCE ✅As games have become more popular violence has decreased. ✅Times when people are playing games violence decreases. ✅Countries that consume games among the safest. ✅School shooters play games 3x LESS than average student. pic.twitter.com/rhhinAsZp8
— Patrick Markey (@patmarkey) March 9, 2018
Este tweet ha permitido conocer datos realmente interesantes sobre la relación que existe entre la violencia y la presunta implicación de los videojuegos en este tipo de actitudes. Por un lado, se puede observar, en un estudio realizado en diferentes asesinos, solo el 20% de los encuestados muestra interés por los videojuegos de caracter violento.
Este estudio ha estado dirigido por el psicoanalista Patrick Markey, que es profesor en la universidad de Villanova. Un informe que saca conclusiones realmente llamativas, donde incluso se podría aludir que los videojuegos han ofrecido un elemento disuasorio de la violencia real. Según este informe, sus conclusiones indican que,
Contrariamente a las afirmaciones de que los videojuegos violentos están vinculados a conductas agresivas y homicidios, no se han encontrado pruebas que sugieran que este medio fue una de las principales (o menores) causas de violencia en los Estados Unidos.
Las tendencias anuales en la venta de videojuegos durante los últimos 33 años no guardan relación con los delitos violentos, tanto de manera concurrente como hasta 4 años después.
Inesperadamente, las ventas mensuales de videojuegos se relacionaron con disminuciones concurrentes de asaltos graves y no estaban relacionadas con homicidios. Las búsquedas de tutoriales y guías de videojuegos violentos también se relacionan con disminuciones en el índice de asaltos y homicidios 2 meses después.
Finalmente, los homicidios tendieron a disminuir en los meses posteriores al lanzamiento de videojuegos violentos con calificación M.
De hecho, según expone, es más probable que estas conductas estén asociadas con otro tipo de entretenimiento, donde se adiverte que una cuarta parte de los encuestados ha mostrado interés por películas violentas o libros con contenidos violento. Esto depara una diferencia importante con respecto a la proporción que se relacionaría con los videojuegos, establecida en una octava parte de los encuestados, que mostraban interés por los videojuegos violentos.
En cierto modo, la tendencia de acusar a los videojuegos, sobre todo los de caracter violento, con este tipo de sucesos sigue siendo, por desgracia, algo demasiado normal. Intentar explicar el comportamiento humano en base a uno o dos elementos, es buscar culpables de la forma más sencilla. No suele ser demasiado productivo asociar un origen a una consecuencia, más sin pruebas contrastadas. Estos estudios pretenden ofrecer una visión contrastada de la realidad, donde los videojuegos violentos no tienen esa asociación directa con la violencia de hoy día.