En SomosXbox os hemos hablado largo y tendido sobre el disipador de Xbox One X. La potencia implica calor y un chip tan grande como el de Xbox One X, además de la ingente cantidad de memoria GDDR5 que tiene la consola (y que también se calienta lo suyo), necesita un disipador a la altura. Y Xbox One X lo tiene.
Todo lo que debéis saber sobre el supersampling de Xbox One X
Famosa es la cámara de vapor que utiliza Xbox One X (al igual que las tarjetas gráficas de PC de gama alta) y de la que ya os hemos hablado, pero en el vídeo que os dejamos a continuación podréis ver no sólo el tamaño, sino la turbina, la pasta térmica de las memorias y los diferentes condensadores, el gigantesco chip Scorpio de Xbox One X y, sobre todo, la placa de cobre para conducir mejor el calor.
El funcionamiento de este disipador es muy simple. El calor del chip se transmite a las láminas de aluminio y la cámara de vapor para, después, salir fuera de la consola debido al aire frío que empuja la turbina desde la parte frontal de la consola hasta la trasera. Algo muy curioso es que, cuando se desmonta la turbina, vemos que la fuente de alimentación está unida a ella y, por tanto, también se beneficia del aire fresco del disipador.
Además, podemos ver el tamaño de la placa base de la consola, así como la disposición de otros elementos, como el disco duro interno de 1TB que, aunque escaso e irremplazable sin anular la garantía, sabéis que podéis añadir un disco duro externo sin problemas tanto para hacer capturas como para guardar vuestros juegos.