Hace un par de días veíamos como se actualizaba Dragon Age: Inquisition, un parche para corregir temas de estabilidad general, bugs en el multijugador, algunos problemas con el sonido, etcétera. Lo que no imaginábamos es que le haría una completa remodelación facial a nuestros Inquisidores, haciendo que ganen unos 40 años, más o menos, de la noche a la mañana.
Como leemos en HobbyConsolas, hay jugadores que están experimentando este curioso error que otorga un grado de experiencia facial que nos toca las narices cuando nos hemos pasado un buen rato editando el aspecto de nuestro protagonista. Sólo hay que ver la imagen a continuación:
Además, el parche parece que causa cierta inestabilidad con algunos bajones de frame-rate y pequeños glitches. Es algo que afecta, sobre todo, a PC, ya que era la plataforma a la que más se le metía mano con el parche, pero se han reportado problemas también en la versión de consola. Bioware ha afirmado que ya está enterada de los problemas y que se pondrá manos a la obra para solucionarlos.
¿Os ha pasado a vosotros este curioso error? Por desgracia ya no es raro que un parche que se supone se lanza para corregir errores acabe provocando otros nuevos. Aunque, claro, podría ser peor. Si queréis conocer a fondo Dragon Age: Inquisition no os perdáis su análisis.