Xbox puso ayer fin a una etapa con el cierre de la store de Xbox 360. Esta no ha sido una muy buena noticia para los jugadores de Xbox, como tampoco lo ha sido el descubrimiento de que algunas Xbox One no se pueden actualizar. Todo comienza cuando algunos jugadores afirman en el foro de NeoGaF que no pueden descargar las actualizaciones de la consola Xbox One Fat. Digital Foundry realizó una investigación y publicó en Eurogamer los resultados. Al parecer, el origen del problema está en las versiones del firmware (tipo de software) más antiguas, que dan error cuando intentas conectarte en Xbox Live.
El equipo hizo la prueba utilizando tres consolas Xbox One: dos con un panel de 2017 y una con un panel de 2018. Ninguna se pudo actualizar. Por lo visto, el panel de control de las unidades que se han visto afectadas funciona si no las actualizas, y los juegos en formato disco tampoco parecen verse afectados, pero cualquier cosa que requiera conectarse en línea no funcionará. «Sin acceso a la última revisión del software del sistema, es imposible acceder a Xbox Live o cualquiera de sus funciones». Según el equipo de Digital Foundry, las consolas Xbox One X y One S no parecen verse afectadas.
¿Se puede actualizar la consola a través de un USB? ¿Y si se restablece de fábrica?
Algunos usuarios se han preguntado si la actualización del software se podría realizar mediante un USB. Según Digital Foundry, la respuesta es que no. «Ninguna de ellas se puede actualizar, ni desde Internet ni desde USB a través del instalador sin conexión descargable». Si has pensado en restablecer de fábrica tu consola sentimos decirte que tampoco funcionará. De esa manera conseguirás «bloquearla», porque no podrás descargar el firmware más reciente.
«Hemos informado a Microsoft y confiamos en que el problema se solucionará, pero la situación plantea preguntas incómodas sobre las perspectivas futuras del hardware de consola que depende de una conexión a Internet para funcionar por completo».