Parece que pese a que algunos juegos siguen rindiendo correctamente, Activision está sufriendo mucho con otras inversiones que no están dando los resultados requeridos. Algunas habladurías apuntaban a que la situación en las empresas de Activision era muy tensa a lo largo de estos pasados días, ya que los rumores de despidos se habían extendido. Ahora, llega el momento de la confirmación de los malos augurios, donde se habrían concretado recortes y despidos para la semana que viene.
Todo surge a raiz de una publicación de Bloomberg, un medio especializado en temas de economía y empresa, que habría dado a conocer la situación. Un informe anticipado de la situación económica de Activision-Blizzard habría establecido la necesidad de realizar despidos, que se contabilizarían en cientos, el próximo martes. Estos despidos se justifican como «parte de una reestructuración destinada a centralizar esfuerzos y maximizar ganancias». Los malos resultados de juegos como Destiny 2 o la bajada de ingresos por parte de otros juegos, como es el caso de Hearthstone, habrían empujado a la empresa a tomar esta drástica decisión.
El valor de sus ingresos sigue decreciendo y las noticias sobre la marcha de sus directivos, como ha sido el caso de Eric Hirshberg, CEO de Activision Publishing, Mike Morhaime, co-fundador de Blizzard, o los CFO Spencer Neumann y Amirta Ahuja. La escisión de Bungie tampoco ha ayudado a la imagen de la empresa y los resultados que están obteniendo a duras penas se sostienen. La reestructuración parece ser el camino más oportuno y con esto, los recortes que van a sufrir serán el medio para intentar corregir la situación.
Por ahora no se ha determinado el cierre de ningún estudio ni cancelación de ningún proyecto. Al menos en este aspecto, parece que podemos seguir confiando en que los juegos planteados para llegar a Xbox One, siguen en marcha. Estaremos atentos al martes, día en el que podrían darse a conocer con más detalle las decisiones tomadas por Activision.