Una de las compañías más respetadas de la industria del videojuego es Rockstar Games. En los últimos años se ha limitado a desarrollar juegos de licencias muy concretas, dejando atrás aquella época en la que lanzaba al mercado un mayor número de títulos. A día de hoy, tras el lanzamiento de Red Dead Redemption 2 siguen habiendo muchas especulaciones sobre la identidad de su nuevo trabajo, pero no hay nada en firme. Y no solo es la comunidad quien quiere más juegos. Según parece, Take Two estaría presionando a Rockstar para que publique juegos con más frecuencia.
Esta situación habría sido expuesta por un insider, dedicado a Rockstar Games, que presuntamente habría hablado con algún miembro de este estudio y se lo habría confirmado. Según indica, Take Two estaría presionando a Rockstar para que publique juegos con más frecuencia. Para ello, les invitan a que tomen las riendas de proyectos más pequeños.
Take-Two is reportedly pressuring Rockstar Games to return to their more frequent game release schedule.
Although this probably would be bad for bigger franchises like GTA and Red Dead, it could incentivize them to continue focusing on much smaller titles like Bully and Manhunt.
— SWEGTA (@SWEGTA) January 17, 2020
Y es que si se trata de hacer juegos de la talla y la profundidad de Grand Theft Auto o Red Dead Redemption, el tiempo que se requiere para llegar al nivel de complejidad que se ofrece es muy elevado. Se podría pensar que, dado lo lucrativo que han sido sus juegos, bien podrían ampliar su plantilla para poder abordar cualquier otra licencia. Se ha especulado con el regreso de Bully, se ha especulado con el regreso de Midnight Club, pero en su haber tienen juegos como Manhunt, como L.A. Noire, como The Warriors. No tiene por qué ser un juego creado, no tiene por qué ser una secuela. Take Two quiere poder seguir publicando juegos de Rockstar Games, porque parecen éxitos asegurados.
Como insinúa el insider, esto sería negativo para las grandes licencias, principalmente las dos que viene haciendo en los últimos años. Negativo porque, si no amplían su infraestructura, implica que tardarán más en ver la luz. Y se puede observar que hay muchas ganas de ver un nuevo Grand Theft Auto VI, habiendo ya una gran teoría sobre lo que ofrecería la próxima entrega de la saga. Pero pensar en que Rockstar Games pueda ofrecer otro tipo de juegos, más pequeños, más sencillos, y con la misma calidad, también es una idea que apetece mucho.
Veremos si esto se traduce en más proyectos, o siguen en su línea actual que se limita a alternar Grand Theft Auto con Red Dead Redemption en futuras nuevas entregas.