La compra de Twitch por parte de Amazon fue uno de los grandes bombazos del año 2014, cuando la corporación norteamericana adquirió la plataforma de streaming especializada en videojuegos por casi mil millones de dólares con el objetivo de competir con el gran gigante del sector, YouTube. El caso es que lo ha conseguido, pues Twitch lidera la parcela de los streamings en directo con un 73% de cuota de mercado, lo que sin embargo no se traduce en unos ingresos publicitarios lo suficientemente grandes para las previsiones de Amazon, que no deja de expandir su negocio a nuevos lugares inexplorados.
Tal y como apunta el portal The Information, Twitch consiguió generar en 2018 unos 230 millones de dólares en concepto de publicidad, mientras que esa cifra se ha visto aumentada en 2019. A mediados de año la plataforma de streaming ya había alcanzado los 300 millones de ingresos publicitarios, aunque el objetivo de Amazon era llegar a los 1.000 a lo largo de todo el año. Teniendo en cuenta que, en concepto de streamings de videojuegos, Twitch se encuentra muy por delante de YouTube, Mixer o Facebook muchos se preguntan por qué Amazon no obtiene el rédito publicitario que espera.
La respuesta se encuentra en que Twitch genera ingresos de otro modo; de hecho, el mayoritario. Se trata de las suscripciones, cuyo precio se reparte entre el streamer y la plataforma. Así las cosas, el objetivo de Amazon para el recién comenzado 2020 es atraer a más audiencia para poder alcanzar, al fin, esa meta de mil millones de dólares que aún se quedó lejos en el pasado 2019 para acercarse a las estratosféricas cifras de YouTube, que sigue siendo un coloso inalcanzable para cualquier otra plataforma similar.