El año pasado tuve la oportunidad de poder analizar el Razer Basilisk V3 Pro, uno de los mejores ratones gaming que Razer tenía en el mercado, especialmente para aquellos que buscan una experiencia completa tanto en prestaciones como en versatilidad de cara a su uso, gracias a la cantidad de botones programables. Parece que la marca era totalmente consciente que estábamos ante un periférico de altísima calidad, y en lugar de lanzar un modelo totalmente nuevo, este año ha llegado una revisión que viene a mejorar un producto ya de por sí sobresaliente.
Se trata del Razer Basilisk V3 Pro 35K, un nuevo modelo que, como podréis deducir por su nombre, cambia por introducir un nuevo sensor con un mayor DPI, pensando así en aquellos jugadores que buscan obtener el mejor rendimiento posible durante sus partidas. ¿Será suficiente para justificar su compra? Te lo cuento todo en este análisis del Razer Basilisk V3 Pro 35K.
Análisis del Razer Basilisk V3 Pro 35K
Un diseño que no cambia en absoluto
Al recibir esta primera unidad, lo primero que hice al abrir la caja en la que viene, que de nuevo vuelve a apostar por un packaging minimalista, poniendo en primera plana el dispositivo y debajo de él sus respectivos «accesorios», fue comprarlo con el modelo que tuve la ocasión de probar el año pasado.
A nivel estético, tanto el Razer Basilisk V3 Pro 35K como el modelo anterior son exactamente idénticos. Tenemos la misma disposición de los botones, el mismo corte y todo exactamente igual al modelo anterior, incluso la iluminación RGB del mismo. Y la verdad es que tiene todo el sentido del mundo, porque ya comenté que el agarre del ratón es uno de los mejores que he tenido la ocasión de probar nunca, hasta el punto de que ha sido mi ratón principal durante todo este tiempo.
Un aspecto que quizás tenía margen de mejora, especialmente por los que buscan un dispositivo ligero, era su peso. De nuevo, al contar con un chasis similar, parece que Razer no ha pensado en recortar este aspecto, encontrándonos con un total de 112 gramos. No es algo crítico ni mucho menos, aunque habrá jugadores que prefieran una opción más ligera. No obstante, en mi caso en concreto he jugado y usado el ratón sin que esto me supusiera ningún tipo de problema.
Un rendimiento exquisito
La primera gran diferencia que existe con el Razer Basilisk V3 Pro 35K respecto al modelo anterior se encuentra en su sensor. Para esta ocasión, Razer ha apostado por el sensor óptico Focus Pro de 2ª generación, que es capaz de ofrecer una sensibilidad de 35.000 DPI. Pero además, a eso hay que sumarle una precisión de resolución de 99,8%, una velocidad máxima de 750 IPS y una aceleración máxima de 70 G. Por tanto, en rendimiento es muy similar al anterior modelo, pero con una sensibilidad todavía mejor. Además, permite ajustar los incrementos de PPP de 1 en 1, mientras que el anterior sensor lo hacía de 50 en 50, dando una mayor opción de personalización.
Traducido al uso, el ratón es una gozada tanto para jugar como para cualquier otra tarea que realizo en mi PC. La capacidad de configurar sus diferentes botones como atajos de teclado me facilitan mucho ciertas tareas automáticas de trabajo, y como es lógico, a la hora de jugar también es mucho más sencillo tener ciertas acciones configuradas de serie en el ratón. Además, al contar con diferentes perfiles, poder cambiar rápidamente entre estos facilita mucho el tener una experiencia optimizada, independientemente del juego que vayas a jugar.
Una vez más, también es digno de elogio lo bien que funciona el dispositivo de manera inalámbrica. La sensación es que la latencia es apenas inexistente, y probablemente se deba también a la tasa de sondeo del dispositivo. Además, este modelo incorpora dos tecnologías que no estaban en el anterior modelo, como el modo de carrete inteligente, que cambia automáticamente el desplazamiento de nuestra ruleta sin base a nuestra velocidad de desplazamiento, así como la aceleración virtual de desplazamiento, que a medida que más rápido desplacemos la ruleta, más rápido bajaremos en la pestaña que tengamos abierta.
Razer ha solventado el mayor problema del Basilisk V3 Pro
Si leísteis el análisis del Basilisk V3 Pro, sabréis que comenté que la autonomía era el principal talón de Aquiles del dispositivo. No porque fuera mala, sino porque palidecía frente a otras opciones de la competencia, que dependiendo del uso podía llegar incluso a duplicar el número de horas que podíamos usar el ratón sin la necesidad de pasar por el cable de carga. No obstante, el Razer Basilisk V3 Pro 35K tiene mejor autonomía que su predecesor.
Según Razer, el ratón es capaz de ofrecer hasta 210 horas en su modo bluetooth, superando en 60 horas el tiempo que ofrecía el anterior modelo. Y una cosa parecida ocurre con el modo hyperspeed, logrando hasta 140 horas por las 110 horas que veíamos en la generación pasada. Aunque no he medido en tiempo cuanto he tenido que esperar para cargarlo, lo cierto es que la sensación es de que la batería es considerablemente mejor.
Además, el ratón es compatible con el sistema de carga inalámbrica de la Razer Hyperflux V2, que también he tenido la oportunidad de probar y de la cuál os hablaré en las próximas horas. Pero a riesgo de cometer un pequeño spoiler, lo cierto es que son una pareja fantástica, ya que el poder olvidarte por completo de tener que cargar el ratón es un plus fantástico, especialmente si buscas un escritorio «sin cables».
Conclusiones – Análisis del Razer Basilisk V3 Pro 35K
En la anterior generación podía haber alguna duda, pero Razer las ha despejado todas. El Razer Basilisk V3 Pro 35K es el mejor ratón que he probado. No solo ofrece una precisión de cirujano gracias a la posibilidad de modificar los PPP de manera individual, sino también por el extraordinario número que alcanza su nuevo sensor (hasta 35.000 PPP); sino también porque han logrado solventar su mayor punto débil, que no era otro que la autonomía.
Si a lo anterior le sumamos que el modelo original ya era prácticamente perfecto, con los pequeños ajustes que se han realizado y los añadidos nos encontramos con un ratón a cuyo rendimiento no se le puede poner una sola coma. Y si encima puede combinarlo junto a la alfombrilla Hyperflux V2, es uno de los mejores combos en periféricos gaming del mercado.