Microsoft ha tenido que hacer frente a diversos organismos de competencia en los últimos meses. Una vez que parece que los de Redmond han solventado sus diferencias con la CMA y con la Comisión Europea, todavía queda el escollo de hacer entrar en razón a la FTC, a la que ahora podría sumársele un nuevo «aliado». Los últimos reportes señalan que Alemania podría demandar a Microsoft por prácticas monopolísticas, después de que la FCO, el organismo de competencia del país germano, haya iniciado un procedimiento de investigación.
Así lo han señalado desde techrunch, que han informado sobre un comunicado emitido por el presidente de la FCO, Andreas Mundt, en el que aseguran que están empezando a investigar la posibilidad de que se estén llevando a cabo prácticas que abusan contra la competencia, debido al amplio ecosistema digital que posee Microsoft, el cual afecta a mercados como el de los sistemas operativos y software de oficina, la computación en la nube, videojuegos, creación de redes, búsqueda en internet y las aplicaciones de Inteligencia Artificial.
Alemania podría demandar a Microsoft por monopolio
Es importante señalar que este caso no guarda relación directa con la compra de Activision Blizzard. Las razones por las que Alemania podría demandar a Microsoft abarcan un espectro mucho más general que el que actualmente están investigando la FTC, la CMA o la CE. En este concreto caso, el organismo alemán está llevando a cabo la investigación de todas las prácticas de los de Redmond en su conjunto, ante las cuales podría aplicar sus propias medidas, gracias a la regulación que se hace en el país bávaro.
Con Windows y sus productos Office, Microsoft ocupa desde hace tiempo una posición muy sólida en el ámbito de los sistemas operativos y el software ofimático. Sobre esta base, la empresa ha ampliado continuamente su gama de productos tanto para clientes empresariales como para consumidores.
Más recientemente, hemos asistido a un fuerte aumento de la importancia de los servicios en la nube Azure y OneDrive, que a menudo están vinculados a otras aplicaciones de Microsoft, y al rotundo éxito de Teams, un software para videoconferencias y trabajo colaborativo. Además, Microsoft también es activa en otras áreas, como los juegos con su Xbox, las redes profesionales con su servicio LinkedIn o la búsqueda en Internet con su motor de búsqueda Bing.
Más recientemente, la empresa ha llamado la atención con la integración de aplicaciones de IA. A la luz de todo ello, hay buenas razones para examinar si Microsoft tiene una importancia capital para la competencia en todos los mercados. Tal conclusión permitiría actuar en una fase temprana y prohibir posibles prácticas contrarias a la competencia.
Aunque la FCO ya tiene varios procedimientos similares abiertos contra compañías como Apple o Google, lo cierto es que destacan que lo de Microsoft «todavía» no significa que vayan a tomar medidas formales contra los de Redmond. Simplemente se trata de un estudio previo para ver si las prácticas que están realizando los de Redmond son contrarias al interés de los usuarios, ante lo cual Alemania podría demandar a Microsoft.
Sin embargo, el organismo sí hace una clara advertencia, al señalar que «Si las quejas u otra información sugieren que hay indicios de que Microsoft está involucrado en prácticas potencialmente anticompetitivas, se tendrá que emitir una decisión separada en este asunto, también en consulta con la Comisión Europea y posiblemente otras autoridades de competencia». Por tanto, los de Redmond deberán estar preparados para hacer frente a otra posible demanda, en el caso de que la FCO encuentre algo que no sea de su agrado.