Parece que en Motiga tienen problemas, en cierto modo, porque acaban de anunciar en un comunicado vía web, que la empresa se enfrenta a una situación delicada y se han visto obligados a recortar su plantilla de forma significativa. Estos despidos están sujetos a la falta de inversión y la necesidad de seguir haciendo sostenible la empresa y el desarrollo de su juego, Gigantic, que llegará a Windows 10 y Xbox One próximamente.
Gigantic se encuentra en fase beta actualmente, y tras su retraso, la inversión para permitir seguir desarrollando el juego parece no ser suficiente para mantener toda la estructura de la empresa. Aludiendo a la transparencia que define la empresa, han tomado la decisión de reflejar su situación y comunicar sus decisiones de forma pública, si bien, aseguran que en este momento la comunidad de testers son los que están determinando el progreso en la experiencia de juego, y la interacción con los community managers es lo que más recursos debe consumir.
Tal como explican, lo que menos desean es ver comprometido el capital necesario para el lanzamiento del juego, de modo que se ha tomado la decisión de rescindir ciertos contratos, aunque en el futuro próximo ven necesario discutir como proceder a la obtención de más ingresos.
Teniendo en cuenta que es un juego que verá la luz en exclusiva para plataformas de Microsoft, Xbox One y Windows 10, es posible que Microsoft deba tomar cartas en el asunto. No parece que el juego corra peligro por ahora, pero esto debe solucionarse de algún modo. Estaremos atentos a nuevas informaciones.