Hace 10 años, el lanzamiento de este juego de zombies generaba bastante interés, pero Techland decidió crear una edición coleccionista de Dying Light que nadie se podía imaginar. Hablamos de la edición ‘My Apocalypse Edition’, que venía a ofrecer un montón de contenidos, incluyendo un refugio real o cursos de supervivencia. Valorado en 250.000 libras, o 386.000 dólares, se podía intuir que mucho tenía que interesar para que alguien se animase a comprarlo.
En una entrevista con Paulina Dziedziak, Gerente de Relaciones Públicas en Techland, ha respondido a la gran cuestión que había por el motivo de hacer esta edición. Y tal como ha descubierto, todo era una estrategia de marketing. Era un juego que iba a asentar un estilo que le confirió un gran éxito, pero ante la duda, en plena campaña buscaron que la gente hablaran de él de algún modo.
La edición coleccionista de Dying Light que nadie compró incluía un refugio contra zombies
Pero resulta obvio pensar que un producto como este no va a llamar la atención de un usuario interesado en un juego. Dziedziak comenta que «fue una maniobra de relaciones públicas que obtuvo mucha atención mediática por su naturaleza salvaje y exagerada», la cual buscaba «generar entusiasmo en torno al lanzamiento del juego». De hecho, reconoce que la estrategia funcionó, y se alegra de que nadie cometiese la locura de comprarla.
Obviamente, había muchas cosas de esta edición que no eran lógicas. En cambio otras opciones, como podía ser incluir el rostro en el juego como un NPC, es algo que muchos juegos han usado. El más reciente es el caso de The Elder Scrolls VI, que también requiere de un gran pago, aunque en esta ocasión es por cuestiones solidarias. Lo que más chocaba de la edición coleccionista de Dying Light, sin duda, era la presencia de un refugio contra zombies. Pero sabiendo de algunas personas obsesionadas con estas cosas, puede que hasta resulte raro que no se haya vendido ni una unidad.

Esto ha recordado lo importante que es la publicidad y las campañas de propaganda, donde no hace falta ahondar en las tradiciones de dar información o un tráiler. Hablar del juego, para bien o para mal, es algo que funciona, y se puede ver hoy día con las redes sociales. Dying Light no necesitó de mucho más para convertirse en uno de los grandes juegos de zombies de estos últimos años. Pero, ¿Cuánto aportó esta campaña a su éxito?