Una de las grandes apuestas de AMD para este final de año era la de hacer llegar nuevos drivers a los usuarios de tarjetas gráficas AMD Radeon . Unos drívers que han buscado extraer un rendimiento extra en los juegos para aquellos modelos de gráfica que vayan más apurados. Utilizando una serie de herramientas que intentan regular la calidad visual para asegurar el rendimiento, se ha conseguido obtener un conjunto de opciones que han impulsado el rendimiento de los juegos hasta en un 15%. Eso es lo que confirmaba AMD desde su nota de prensa al publicar estos nuevos drivers, pero ahora es el momento de ver cómo mejora el rendimiento de los juegos los nuevos drivers AMD Adrenalin 2020.
Atendemos a los medios habituales, que han intentado analizar el impacto que ha tenido la llegada de los AMD Adrenalin 2020 y cómo surge efecto en los juegos habituales de hoy día. Para ello, han empleado un equipo que monta un i7-8700K, con una Radeon RX 5700XT y los Radeon Software Adrenalin 2020 Edition 19.12.2 en PUBG.
Principalmente, el efecto de impulso que ofrecen estos nuevos drivers se ha puesto a prueba en juegos como Overwatch, PlayerUnknown’s Battlegrounds, Borderlands 3, Shadow of the Tomb Raider, Destiny 2, Grand Theft Auto V y Call of Duty WW2. Son los principales juegos que han demostrado obtener un efecto importante gracias al uso de estos drivers. Pero se puede observar que en muchas ocasiones el resultado no es el esperado, donde incluso se puede ver que el juego no va mejor.
Y es aquí donde Digital Foundry ha querido analizar mejor el funcionamiento de estos drivers. Y analizando la situación, advierten que el uso de este boost de los AMD Adrenalin 2020 solo debe considerarse en determinadas ocasiones. El Radeon Boost, que es la opción que se despliega para mejorar el rendimiento de los juegos, se describe de la siguiente manera.
Proporciona un mayor rendimiento cuando se detecta movimiento rápido mediante escalado de resolución dinámica con poco o ningún cambio perceptible en la calidad de la imagen.
Ahora es cuando ese término de «ningún cambio perceptible» tiene algo de truco. Desde Digital Foundry lo demuestran, mostrando cómo mejora el rendimiento de los juegos los nuevos drivers AMD Adrenalin 2020 cuando se hace uso de este Boost.
Ahora bien, tras este análisis realizado por el medio, queda claro que el boost solo debe usarse cuando el juego no logra tener ese rendimiento esperado. Si el juego corre de forma adecuada y no recurre a reescalados de resolución ni efectos para mantener esa resolución, es casi mejor no usarlo, porque los efectos «no perceptibles» si se pueden ver.
Al ser un tema de drivers y un trabajo desde el software, AMD tiene la opción de ir corrigiendo y mejorando con futuras actualizaciones. En cierto modo, el trabajo realizado parece ir de la mano de la tecnología empleada por Nvidia, el DLSS, que ya os presentamos tiempo atrás. Aunque Nvidia hace de sus servidores los encargados de ofrecer una serie de parámetros para mejorar el rendimiento, que se aplican posteriormente vía actualización, en el caso de AMD parece intentar usar ajustes preestablecidos para que los juegos se adapten visualmente y ofrezcan mejoras de rendimiento. Si el rendimiento es bueno y se activa esta opción, visualmente el juego deja notar ese bajón y el resultado no será tan satisfactorio.
Al fin y al cabo, este aspecto busca que aquellos hardwares que no logran ese rendimiento óptimo en determinados juegos y acabados, puedan, al menos, ofrecer esas garantías de juego. Quizás no sea algo tan útil en la Radeon RX 5700 como en las RX 5500. Pero había que probarlo ahora que ha visto la luz.
