Desde hace unos días, donde se podía atender un spot publicitario en el que se repetía que «no necesitas una Xbox para jugar a Xbox», hay indicios claros de que algo ha cambiado. De hecho, según apuntan algunos, la promoción de las consolas Xbox podría «haber terminado» en algunos territorios, como podría ser Europa, Oriente Medio y África. En cierto modo, se podría atender que es algo que pretende ensalzar, o dar más valor, a otras iniciativas.
El periodista, Tom Warren, ha dejado constancia de las pruebas con las que quiere afianzar esta teoría. Con un lema claro, que recuerda aquel plan de Phil Spencer de hacer llegar Xbox a cualquier pantalla, se han separado de lo que tradicionalmente se entiende que debe promocionarse en estos casos. La consola.
La promoción de las consolas Xbox podría «haber terminado» en algunos territorios centrándose en los servicios y accesorios para jugar
Lo más llamativo es que esta teoría, que podría ser puntual y anticipar la posible comercialización de Xbox Cloud Gaming como un servicio independiente, se interpreta como un paso para renunciar a la comercialización de las consolas en ciertos mercados. La promoción de Xbox tendría como foco central, en un futuro inmediato, en servicios como Xbox Game Pass, los juegos de PC y accesorios como los mandos, para países de Europa, Oriente Medio y África.
Ahondando en el motivo que puede llevar a Microsoft a cambiar su planteamiento de marketing en estos territorios puede ser precisamente las dificultades que parece tener para vender consolas en esos territorios. Y por eso, se ahonda en la posibilidad de que este lema, pueda haber supuesto que la promoción de las consolas Xbox podría «haber terminado» en esos mercados, centrándose en otras prioridades. Cierto que el impacto que supuso ese anuncio es enorme, pero no se llegaría a entender la premura a la hora de sacar semejante conclusión.
La cuestión es que, Tom Warren, habría analizado algo más que una tendencia, cuando asegura que la situación requiere de una corrección que llevaría a una posible reducción del stock asignado a estas áreas. De hecho, lo que falta a esta publicación son indicios o pruebas más allá de esa campaña de marketing que aseguraba que «no hace falta una Xbox, para jugar a Xbox», y que las estadísticas reflejan que en el mismo periodo ha vendido un 13% menos que Xbox One.
Como hemos sugerido, estos indicios pueden servir para intentar reducir los costes de producción a corto plazo y rentabilizar el coste en determinados mercados. Con ello, se pretende dar un valor extra a algunas opciones que, quizás, requieren de más atención para expandir su cuota de mercado más allá del propio hardware, aunque también parecía haber planes de hacer su propio hardware para el Cloud Gaming. Pero resulta demasiado drástico que llegue a plantearse una teoría tan radical que señalaría el abandono del mercado de consolas en algunos países.