En plena era de juegos como servicio, pases de temporada y tiendas integradas, Ken Levine ha dejado claro que Judas irá por otro camino. El creador de BioShock ha confirmado que su nuevo título será una experiencia puramente clásica, sin añadidos, sin componentes online y —sobre todo— sin microtransacciones de ningún tipo. «Compras el juego, y tienes todo. Así de simple», ha declarado en una entrevista reciente.
Estas declaraciones llegan en un momento en el que el modelo de monetización se ha convertido en un tema central dentro del desarrollo de videojuegos. Levine no critica a los estudios que siguen ese modelo —»los juegos son caros de hacer», reconocía—, pero sí reivindica un enfoque más tradicional centrado únicamente en contar una buena historia. Judas, el primer proyecto de Ghost Story Games, promete devolvernos esa esencia que tanto se echa en falta en la industria en los últimos años.
Judas no tendrá contenido online ni micropagos
En una conversación con el canal de YouTube de Nightdive Studios, Ken Levine fue tajante: Judas será un juego narrativo para un jugador, sin contenidos adicionales de pago. El estudio apuesta por una experiencia cerrada, completa desde el primer momento, y alejada de cualquier estructura de monetización recurrente.
“Judas es un juego muy old-school. Lo compras y recibes todo el contenido. No hay modo online, ni servicios en vivo, porque todo lo que hacemos está pensado para servir a la historia y transportar al jugador.”
Palabras que suenan casi extrañas en un mercado saturado de actualizaciones, eventos por tiempo limitado y pases de expansión. Sin embargo, Levine cree que el público sigue valorando este tipo de propuestas, como ha sucedido con títulos como The Witcher 3, Baldur’s Gate 3 o Kingdom Come: Deliverance 2.

Una apuesta por el juego tradicional para un jugador
La visión de Levine encaja con una corriente que muchos jugadores defienden: el regreso del juego de autor, cerrado, completo y sin distracciones. Aunque Judas estaba previsto para llegar en algún momento de 2025, todo apunta a que su lanzamiento se retrasará al próximo año. Aun así, la expectación no ha dejado de crecer, especialmente por la ausencia del también nuevo Bioshock.
Mientras tanto, el debate sigue abierto: ¿preferimos juegos con mundos en constante evolución y monetización prolongada, o experiencias más contenidas, diseñadas para disfrutarse de principio a fin sin sobresaltos?
Lo que está claro es que Judas será un proyecto diferente, y eso, viniendo del creador de Rapture y Columbia, ya es motivo suficiente para tenerlo en el radar.