Como todos ya sabemos, los videojuegos son un arte. Para muchos es incluso el arte más completo, por todo lo que llega a englobar: cine, música, argumento, ingeniería, informática, publicidad, etc. Y por supuesto, también la moda. Por eso hoy os hablaremos de moda y videojuegos: dos aficiones condenadas a entenderse.
Tal vez a muchos os parezca un tema poco interesante, pero lo cierto es que la moda juega un papel tan importante en el desarrollo de los videojuegos como cualquier programa informático. Después de todo, es fundamental que un videojuego llame la atención visualmente para que nos interesemos por él.
La moda y los videojuegos han estado unidos desde casi desde el principio, aunque es ahora cuando más se nota esa relación. Y por eso hoy os traigo este artículo, para que conozcáis mejor el papel tan importante que desempeña la moda en los videojuegos y hasta qué punto llega su influencia. Espero que lo disfrutéis.
Creando un personaje a través de sus colores
Teniendo en cuenta que un juego tarda años en hacerse, está claro que elegir el vestuario de un personaje no es algo casual. Todo está especialmente diseñado; desde el color de los ojos de un personaje hasta el color de sus zapatos. Y los personajes no «son» de un color por pura casualidad.
Tal vez los colores más significativos y comunes de los videojuegos sean el blanco y el rojo. El primero simboliza la pureza y la inocencia y el segundo las pasiones, la energía y la determinación. Seguro que ya se os han ocurrido unos cuantos personajes vestidos de sendos colores y os aseguro que no por casualidad. Pero al margen de estos ejemplos tan típicos, también hay otros menos conocidos. Como es el caso del color marrón. El marrón se asocia a la fuerza, la confianza y el crecimiento. No es de extrañar pues que Lara Croft, Fiona (Tales from the Borderlands) o Cole Phelps (L.A. Noire) lleven ese color.

La tristeza del gris es clave para Adam Jensen (Deus Ex), Sam Fisher (Splinter Cell)y Max Payne.
Vayamos a uno de los colores más comunes: el negro. El negro simboliza el misterio, lo oculto y generalmente la muerte. No es casual por lo tanto que personajes como el Agente 47, Faith (Mirror’s Edge) o incluso Albert Wesker (saga Resident Evil) vistan con ese color. Todos ellos viven situaciones difíciles; generalmente habitan en un mundo dominado por organismos muy poderosos y la muerte es su menú diario habitual. El color gris, símbolo de la transición y la indecisión está presente en personajes como Max Payne, Sam Fisher (saga Splinter Cell) o Adam Jensen (saga Deus Ex). Este color también simboliza la pérdida, la depresión y el arrepentimiento. Podemos ver cómo claramente el color gris cuenta la historia de estos dos personajes.
Frente a esa oscuridad muchos personajes visten con colores más llamativos, normalmente acorde a su mundo o personalidad. El rosa siempre está relacionado con el amor y la feminidad, como se puede observar en personajes como Juliet Starling (Lollipop Chainsaw) o Lightning (Final Fantasy XIII). En algunas ocasiones puede asociarse estrechamente con el sexo, como vemos en el juego Catherine. Algunos personajes con una importante carga femenina, como Alisa Bosknovitch (Tekken 6) o Poison (Street Fighter) también están fuertemente influenciados por el rosa. Este color además simboliza la diversidad sexual en los videojuegos, como podemos comprobar en la propia Poison, uno de los personajes transexuales más representativos del mundillo. Zarya (Overwatch) también comparte su pelo rosa con algunos personajes.

Poison (Street Fighter), Alisa (Tekken) y Zayra (Overwatch) nos ofrecen diferentes tipos de feminidad a través de su rosa.
El azul de Jill Valentine (saga Resident Evil), Cortana (saga HALO) o Garrus (saga Mass Effect) transmiten paz y confianza, aunque a veces también tristeza. El morado se asocia a la magia, al esoterismo y al poder, por lo que suele ser propio de personajes raros. Algunos ejemplos como Ivy (Soul Calibur IV) o Pagan Min (Far Cry 4) encajan en esta descripción. Quizá el ejemplo más llamativo sea Violet (saga Tekken), que no solo viste de violeta sino que toma su nombre del color o el excéntrico Joker (saga Arkham).
Por su parte, el amarillo representa muy bien las sensaciones de frustración y rabia en casos como Chuck Greene (Dead Rising 2) o Krieg (Borderlands), aunque en ocasiones puede ser totalmente lo contrario y darnos una imagen más cálida y amistosa, como Maya (Borderlands 2).

Thane (Mass Effect), Quiet (MGS V) y Jade (Beyond Good and Evil) son tres personajes verdes muy unidos a la naturaleza.
El verde es un color muy interesante, porque puede transmitir la paz que vemos en el Jefe Maestro (saga HALO) o el egocentrismo y el rejuvenecimiento, algo que da muchas pistas de personajes como James Sunderland (Silent Hill 2). Aunque también se asocia con la naturaleza, algo que podemos comprobar en Jade (Beyond Good and Evil), Thane (saga Mass Effect) y Quiet (Metal Gear Solid V), cuya pasión por el agua es uno de los grandes puntos fuertes del juego.
Como podéis ver, los colores tienen mil y un significados y cada personaje tiene su porqué al vestir de uno u otro. Dime de qué color vistes y te diré cómo eres.
Hay que vestirse acorde a los peligros
Si los colores que llevan los personajes no son casuales, tampoco lo es su ropa. No es lo mismo tener que salvar un mundo de fantasía que tener que acabar con nuestro objetivo de la forma más sigilosa posible. La ropa que visten los personajes puede darnos muchas pistas de cómo son y de cómo es el juego en el que se encuentran.
Pongamos un ejemplo práctico: un personaje vive en el mundo real, pero de la noche a la mañana descubre que algo raro está ocurriendo a su alrededor y tiene que desentrañar el misterio. ¿Cómo os imagináis vestido a ese personaje? ¿Con ropa normal y callejera o con una armadura ostentosa y armas gigantes? Exacto.
Generalmente cuando nos encontramos en un ambiente realista y ocurre algo que destroza la normalidad en la que vivía el protagonista, los personajes de esa historia van vestidos de una forma muy casual: vaqueros, zapatos o playeros, sudadera. Personajes como Max Caulfield (Life is Strange), Alan Wake, Aiden Pierce (Watch Dogs) o Heather Mason (Silent Hill 3) encajan en este perfil. Se trata de personajes normales que de pronto se ven arrastrados a situaciones límite por motivos ajenos a ellos. Protagonistas normales y corrientes, que nos tienen que transmitir ciertas sensaciones: inoportunidad, tensión, angustia. Nos tenemos que creer que son personajes callejeros a los que les ocurren cosas sin que se lo esperen, pero a la vez tenemos que tener cierto miedo por ellos porque van a enfrentarse a situaciones límite sin estar lo bastante preparados.

Pese a los eventos de Life is Strange, el vestuario de Max nos dice que es una chica normal y corriente.
Pero los juegos de acción también pueden ofrecer otro tipo de protagonista. Puede que ejemplos como Mondo Zappa (Killer is Dead), el Agente 47 (Hitman) o Max Payne (Max Payne 3) os den una idea de a qué me refiero. Se trata de personajes que, como los anteriores, tienen que hacerle frente a las adversidades pero transmiten un aura de confianza al jugador. No sentimos miedo por que a Max Payne le vaya a ocurrir algo, sino que tenemos ganas de que algo le ocurra y se defienda. Porque sabemos que lo va a conseguir. Y esa seguridad se transmite a través de su ropa. Muchos de ellos llevan traje, lo que da una sensación de confianza y seriedad y llevan armas ocultas, aumentando esa sensación de seguridad. Podemos temer por un pobre preso que llegue sin querer al pueblo de Silent Hill (Silent Hill Downpour), pero no por un asesino a sueldo ni aunque esté frente a una horda de enemigos.
Los humanos villanos, sin embargo, se llevan el premio a la sobriedad y la elegancia. Desde Joker hasta Makarov (Call of Duty: Modern Warfare 2), pasando por Bloody Mary (The Wolf Among Us), la Comandante Steele (Borderlands) o Hazama (BlazBlue) podemos comprobar que se trata de personajes imponentes y sobrios, cuyo estilo es suficiente para que nos entren los siete males al verlos. No les hacen falta grandes armas ni ejércitos, porque con un traje sencillo pueden llegar a causar verdadero pavor. Y solo en esos casos sabremos que nos encontramos ante un villano duro de roer.

Que no os engañe su aspecto frágil: el traje y los colores de Mondo Zappa nos dicen otra cosa (Killer is Dead).
La estructura física de los personajes suele ser acorde a lo que los videojuegos nos quieran ofrecer y suele estar muy unida a su vestimenta. Por ejemplo, el Jefe Maestro o Marcus Fenix son personajes completamente militarizados y nos tienen que transmitir esa sensación de poder armamentístico con su aspecto. No es casualidad por lo tanto que tengan esa envergadura y que las armaduras den la sensación de ser tan pesadas. Guantes, cascos, botas, todo es masivo. De nuevo el vestuario nos está dando muchas pistas sobre los juegos, porque sabemos a simple vista que ni Marcus ni el Jefe Maestro van a ser los protagonistas de una aventura gráfica. Sabemos que tanta arma y tanto equipo van a ser necesarios para lo que se nos viene encima: acción y muertes sin parar contra criaturas inmensas.
Algo diferente ocurre con los personajes que nos quieren transmitir una sensación de ligereza. Faith (Mirror’s Edge) o los protagonistas de Sunset Overdrive son unos ejemplos claros: los personajes van vestidos con ropa cómida, adaptada al parkour de sus respectivos juegos. Rechinaría bastante jugar a algo de este estilo y encontrarnos con un personaje vestido como Shepard (Mass Effect) o que pareciera sacado de Skyrim. La ropa ondeante también nos transmite una sensación de ligereza, como ocurre con Corvo Attano (Dishonored) o Dante (Devil May Cry).

El estilo de Brink nos lo dice todo del juego: anarquía, rebeldía, locura, adrenalina.
Si la ropa nos cuenta muchas cosas sobre un personaje, la desnudez no iba a ser menos. Generalmente se asocia la desnudez parcial con personajes gamberros, independientes y con grandes problemas contra la autoridad. Algunos ejemplos claros son Garcia Hotspur (Shadows of the Damned), Duke (Duke Nukem Forever) o Chloe (Life is Strange). Si además esa desnudez está acompañada por tatuajes, es probable que el personaje sea mucho más transgresor, como Wei Shen (Sleeping Dogs). Los tatuajes también están muy presentes en la customización de nuestro protagonista de Brink, juego anárquico donde los haya.
Antes de cerrar este punto, quiero mencionaros el juego que recoge mejor que ninguno la diferencia de caracteres de los personajes según su forma de vestir: GTA V. Os recomiendo que os fijéis bien en los estilos tan diferentes del trío de protagonistas y cómo la elegancia de Michael, la ligereza y juventud de Franklin y la absoluta dejadez de Trevor nos cuentan muchas cosas de cómo son.
La Alta Costura se abre paso en los videojuegos
A lo largo de estos últimos años hemos podido comprobar cómo los videojuegos se han ido acercando a un mayor público. Poco a poco nuestra afición está dejando de ser algo «de frikis» y se está empezando a normalizar. La industria de los videojuegos crece a pasos agigantados y los diseñadores están empezando a considerar este medio como una magnífica plataforma de promoción e inspiración.
Tal vez el ejemplo más sonado de los últimos años sea el de Lightning convertida en modelo de alta costura. Nicolas Ghesquière, diseñador de Louis Vuitton, buscó en ella inspiración para la nueva colección y dijo abiertamente que Lightning había sido su musa. Prada también se unió a la fiesta, creando diseños específicos para su Colección de Verano de 2012. Para ello contó con personajes como Lightning, Snow o Noel como modelos.

Prada o Louis Vuitton: las grandes firmas se rifan a Lightning (Final Fantasy XIII).
Pero no no todo son casas de Alta Costura. Sunset Overdrive nos maravilló a muchos por su estética tan llamativa y gamberra, con unos personajes que llevaban ropa que nosotros nos pondríamos tranquilamente para salir a la calle. Como muchos ya sabréis, VANS contribuyó al exclusivo de Microsoft con algunos de sus diseños. No es de estrañar que muchos disfrutásemos customizando nuestro personaje con Sunset Overdrive más que con ningún otro juego.
Aunque Japón sea el país referente en cuanto a estética y diseño, Occidente se le va acercando a pasos agigantados. Una de las grandes sagas influenciadas por la alta costura es Deus Ex. Al jugar a Deus Ex: Human Revolution y Deus Ex: Mankind Divided enseguida nos damos cuenta de que los desarrolladores han sido muy detallistas a la hora de crear el vestuario de sus personajes.

Ojalá tuviésemos un armario como el de los protagonistas de Sunset Overdrive.
«Para favorecer la experiencia, la moda tiene que ser creíble. Y una de las estrategias que seguimos para lograrlo fue enseñar cómo estaba hecha. La ropa que lleva cada personaje parece realista, con sus cremalleras y costuras«. Diseñadores como Alexander McQueen, Gareth Pugh o Iris Van Herpen han sido grandes musas para esta saga.
No solo los diseñadores influyen cada vez más en los videojuegos, sino que los propios videojuegos son a veces las inspiraciones de muchas colecciones. La marca Musterbrand tiene en su web colecciones inspiradas en muchísimos videojuegos de lo más variados. Podemos encontrarnos colecciones basadas en Dragon Age, Street Fighter o Assassin’s Creed, entre otras.

Parte de la preciosa colección de Musterband está inspirada en Assassin’s Creed.
La firma Frank & Oak creó una colección de doce piezas basada en Watch Dogs. La diseñadora Kunihiko Morinaga se inspiró en los juegos de 8 bits para su colección de 2011 presentada en la Tokyo Fashion Week. Incluso el diseñador Karl Lagerfeld hizo un cameo en GTA IV, en el papel de un locutor de radio. Eso por no hablar de los cascos que usará Drew en Scalebound y que Platinum Games tiene pensado lanzar al mercado.
Los videojuegos están dejando de ser una afición marginal para convertirse poco a poco en el mercado de los grandes y pequeños diseñadores. Sin duda el glamour ha descubierto un mundo nuevo.
La magia del cosplay
Si existe algo que nos haga fijarnos detenidamente en el vestuario de un personaje es el cosplay. El cosplay (de «costume» que significa traje y «play», jugar) es la afición que comparten miles de fans a lo largo de todo el mundo de vestirse de sus personajes de ficción favoritos. Desde grupos de música hasta videojuegos, el cosplay es una actividad universal que cada vez acapara más focos.
El cosplay ha evolucionado muy rápidamente en muy poco tiempo. En apenas unos años ha pasado de ser un estigma «de frikis» a ser todo un arte que puede incluso llegar a abrir puertas en el mundo laboral. Y si no que se lo digan a Anna Moleva, conocida como Omeli. Puede que el nombre no os suene de mucho, pero si os digo que es la chica que contrató Irrational Games como modelo de Elizabeth para BioShock Infinite entonces seguro que sabréis de quién os hablo.

Gracias a su increíble trabajo, Anna «Omeli» Moleva se convirtió en la modelo oficial de Elizabeth (BioShock Infinite).
Pero Moleva no es la única que ha conseguido oportunidades laborales gracias a sus diseños. Jessica Nigri es una modelo ampliamente conocida en el mundillo. Jessica es youtuber, modelo y cosplayer profesional. Trabajó en la promoción de Gears of War 3 como modelo de Anya Stroud y su cosplay de Juliet Starling (Lollipop Chainsaw) le ha llevado por todo el mundo.
La industria del cosplay puede llegar a mover cifras escandalosas. Don McCaskill, fotógrafo de cosplayers, estima que un cosplayer puede llegar a conseguir 125.000 dólares al año, aunque esto solo le ocurre a una minoría. Lindsay Elyse se encuentra entre esos siete u ocho privilegiados a nivel mundial. Esta chica es cosplayer profesional a tiempo completo y su cuenta bancaria crece día a día. No solo cobra por sus apariciones en eventos, sino que también es modelo y recibe beneficios de las ventas de sus productos.

La cosplayer Soratane ofreció el- para muchos- mejor cosplay de Lara Croft (Tomb Raider).
Es cierto que el mundo de la moda y por extensión del cosplay se fija más en las modelos femeninas que masculinos. Pero no os engañéis: el cosplay no es solo cosa de chicas. Steven K. Smith Props se gana la vida como cosplayer y sus obras dejan claro que no se equivocó de camino. Ya sea como el Inquisidor (Dragon Age Inquisition) o como Isaac Clarke (saga Dead Space), Steven realiza unos diseños increíbles.
El cosplayer Xailas se volvió internacionalmente conocido por su cosplay de Raiden (Metal Gear Solid). Sin embargo, uno de los casos más llamativos es el del cosplayer GNefilim, cuyo cosplay de Dante (DmC) resulta increíble no solo por el trabajo que hay detrás, sino por su parecido físico con el personaje.

El cosplay de Raiden que catapultó a Xailas a la fama.
Como podéis ver, el cosplay se está convirtiendo en una enorme puerta a oportunidades laborales. Las marcas se rifan a los cosplayers y las ofertas como modelo o imagen de marca cada vez son más frecuentes en este mundillo. Y es una gran noticia, porque después de todo el trabajo, esfuerzo y dinero que hay que invertir para hacer un traje en condiciones, ya es hora de que esta afición empiece a reconocerse.
Los mejor y peor vestidos de los videojuegos
Evidentemente el hecho de que la moda cobre cada vez más importancia en los videojuegos ha llevado a que revistas tan importantes como Complex o Esquire analicen el estilo de muchos personajes. Y por eso no es raro encontrarse con una de las cosas que más nos gustan del mundillo: los rankings. Aunque los rankings de los personajes mejor vestidos sean bastante variados, hay algunos nombres que no dejamos de ver.
El Agente 47 ocupa puestos muy altos en muchos de dichos tops, además de otros como John Marshton (Red Dead Redemption) o Cole Phelps (L.A. Noire). Max Payne, Leon S. Kennedy o Sam Fisher suelen ser habituales, junto a otros más variados como Vincent Brooks (Catherine), Travis Touchdown (No More Heroes) o incluso el Jefe Maestro. Las chicas no se quedan atrás y nombres como Faith (Mirror’s Edge), Lara Croft, Elizabeth (BioShock Infinite) o Ada Wong (Resident Evil 4) suelen ser muy comunes, reflejando una gran variedad de estilos y géneros.

No es de extrañar que Cole Phelps (L.A. Noire) se encuentre siempre en las listas de los más elegantes.
Pero no todo es belleza y detalles en los videojuegos. Bueno, detalles puede, pero detalles malos. Los videojuegos también están plagados de personajes cuyo gusto por la moda es inexistente. Y no me refiero a monstruos, demonios o a seres de otras dimensiones. No, incluso ellos visten mejor. Me refiero a personajes humanizados que parece que hayan perdido una apuesta o que estén recién sacados del vertedero.
Pigsy, de Enslaved, es uno de los habituales en esas listas, algo normal con ese atuendo tan indescriptible. Bibi Love (Dead Rising 2) nos hipnotiza y aterra a la vez, con ese estilo que mezcla country setentero con fetichismo sadomasoquista. Roman Bellic (GTA IV) nos produce ataques epilépticos cada vez que le vemos con ese estampado verdoso y Balder (Bayonetta) tiene un estilo bastante peculiar, que podríamos denominar como «híbrido entre proxeneta de los ochenta y pavo real en celo». Un deleite para todos los sentidos.

Balder. Enemigo de Bayonetta de día, maniquí de los chinos de mi barrio de noche.
Pero sin duda el que se lleva la palma en cuanto a moda horripilante es nuestro amigo Barry Wheeler (Alan Wake). Con su anorak rojo, su camisa de flores, sus pantalones pirata y sus botas de montaña, el agente literario de Alan Wake está más que preparado para hacerle frente a los peligros de la oscuridad y del buen gusto. Y ya cuando decide completar su modelito con las luces navideñas y la linterna pegada a la frente, el resultado no puede ser más espectacularmente… espectacular. Realmente muchos no entendemos el porqué de esas luces, porque con ese abrigo rojo desprende tal luz que sería un imán para los enemigos de Dying Light. Pero aunque Barry parezca un árbol de Navidad andante, lo cierto es que se hace querer.

No nos engañemos. A la oscuridad no le asusta la luz, le asusta el modelito de Barry (Alan Wake).
Como véis, moda y videojuegos mantienen una estrecha relación que ha ido afianzándose con el paso de los años. Para bien o para mal. Yo personalmente me alegro de que este mundillo empiece a tomarse cada vez más en serio y sea un enorme escaparate para los grandes y pequeños diseñadores. Como dije al principio del artículo, los videojuegos son para muchos el arte de las artes y la moda es una de las mejores muestras de eso.