Hace tan solo un par de días que Dead by Daylight lanzó al mercado Tools of Torment, su nuevo DLC con asesina, dos supervivientes y mapa. Sin embargo, el número de jugadores no ha crecido a raíz de este estreno y eso no hace más que ratificar el problema de Dead by Daylight: sus nuevos contenidos no generan interés. Es una tendencia que viene creciendo en los últimos tiempos y que ha quedado más patente que nunca con el lanzamiento de La comerciante de calaveras, la nueva y tecnológica asesina del juego que es capaz de desplegar drones por el mapa para localizar y hacer vulnerables a los supervivientes.
En nuestra experiencia personal podemos darte un alarmante dato. Hemos jugado a Dead by Daylight los tres últimos días, desde el día de estreno del DLC, y aún no nos hemos cruzado con La comerciante de calaveras en ninguna partida. Esto habla muy a las claras de que la comunidad no tiene interés en el killer, algo que viene ocurriendo con los últimos DLCs excepto cuando se trata de personajes de licencias muy importantes como puede ser Resident Evil. Anteriormente, cuando un asesino nuevo salía a la venta, lo normal era encontrárselo durante los primeros días en multitud de ocasiones, pero eso ya no ocurre. Para su fortuna, el título de Behaviour Interactive cuenta con una fiel y dedicada base de jugadores muy amplia, por lo que no se resiente tanto de un mal lanzamiento de DLC.
Sin embargo, si miramos atentamente las cifras del portal SteamCharts veremos cómo el incremento y pérdida de usuarios es cíclica últimamente y que siempre se repite, independientemente de que haya un DLC de por medio. En resumidas cuentas, el estreno de nuevos contenidos no altera la tendencia de jugadores simultáneos de Dead by Daylight, lo cual quiere decir que el título siempre tiene el mismo número de usuarios haya o no nuevos asesinos. Los que siempre están lo siguen estando; y los que no juegan, no recuperan interés con los DLCs.