Ni Xbox One ni PS4 son competidoras directas de Nintendo Switch. Eso afirma Reggie Fils-Aimé, Director de Nintendo America. En su opinión, Nintendo está orientada a una mayor variedad de usuarios. Es cierto que las consolas de Nintendo siempre han tenido un público distinto al de Xbox One y PS4. Su catálogo y servicios cuentan con un ecosistema propio, distinto al que pueden ofrecer Microsoft o Sony. Pero también lo es que el mercado de consumidores de videojuegos cada vez está más orientado a lo común que a las diferencias. El cross-play entre Minecraft o Fortnite lo ha demostrado, como hemos podido comprobar.
«Dejando de lado el tiempo que los consumidores pasan comiendo, durmiendo, trabajando o yendo al colegio, el resto del tiempo es para entretenimiento. Eso es por lo que compito minuto a minuto. Ese tiempo que pasan navegando en Internet o viendo una película. Ese es el tiempo de entretenimiento por el que estamos compitiendo. Mi espectro es mucho más grande que el de mis competidores, Sony y Microsoft. Yo compito por tiempo. Cuando lo hago, tengo que ser creativo e innovador para ganar esa batalla».
Por lo que podemos deducir, Nintendo está más centrada en atraer a su propio público que en competir con las demás compañías. Estrategia opuesta a la que quiere seguir Phil Spencer, directivo de Microsoft. Según ha comentado en más de una ocasión, la compañía quiere asentar su posición en todos los ámbitos. No solo busca atraer al mayor número de consumidores, sino ofrecerle los servicios y plataformas más cómodos. Prueba de ello son Xbox Scarlet, los nuevos estudios de la compañía y por supuesto el cross-play.
