Están siendo tiempos difíciles para Netflix. La pérdida de usuarios, el tibio recibimiento al plan con anuncios y la marcha de Henry Cavill de The Witcher se suman a la inminente finalización de la compartición de cuentas. Por si todo eso no fuera suficiente, ahora hemos sabido que The Witcher: Blood Origin ya es la serie peor valorada por los usuarios en la historia de Netflix. Así lo ha dado a conocer el portal Forbes, que señala que el spin-off precuela de una de las grandes licencias de la plataforma ha obtenido tan solo un 8% de la audiencia en el portal Rotten Tomatoes, que mide el porcentaje de recomendación de la gente.
Según este medio, esta puntuación en Rotten Tomatoes convierte e The Witcher: Blood Origin en lo peor que Netflix ha hecho nunca, al menos en opinión de los usuarios. La nota de la crítica especializada, no obstante, tampoco es muy superior: un 38%. Entre los motivos del desprecio a esta miniserie encontramos algunos muy claros. El desencanto del fandom tras el adiós de Cavill es uno muy importante, pero también el creciente desapego al universo The Witcher que ha creado Netflix por alejarse cada vez más del material original de Andrzej Sapkowski. A nivel puramente televisivo, la serie de cuatro episodios ha resultado poco interesante y con poco o nada que ver con el mundo de Geralt de Rivia.
Con sus más y sus menos, las dos primeras temporadas de la serie principal habían sido bien acogidas, mientras que la película anime spin-off The Witcher: La pesadilla del lobo fue estupendamente recibida por la crítica y el público. Blood Origin también se ha llevado un 47 en Metacritic, un 4,2 en FilmAffinity o un 4 en IMDb, entre otras plataformas especializadas. Recuerda que la miniserie ya está disponible al completo en Netflix y que sirve como historia de orígenes que conecta con la tercera temporada de la serie principal, que llegará en verano de 2023.