TikTok es una de las redes sociales más populares del planeta, aunque la plataforma de vídeos podría sufrir un severo revés en las próximas semanas. Joe Biden, actual presidente de los Estados Unidos, ha hablado en varias ocasiones de prohibir el funcionamiento de la aplicación en territorio americano, debido a la procedencia china de la aplicación, algo que no gusta debido a la ingente cantidad de datos que pueden recopilar de los usuarios que tienen la aplicación instalada.
No obstante, Bobby Kotick, calificado en algunas ocasiones como villano dentro de Activision Blizzard por las prácticas que había venido realizando el estudio antes de su adquisición por Microsoft, podría ser el salvador de la aplicación para los usuarios estadounidense. En las últimas horas, hemos sabido que el empresario quiere comprar TikTok junto a Sam Altman, actual CEO de OpenAI.
Bobby Kotick ha propuesto comprar TikTok a Sam Altman, creador de OpenAI
Así lo han asegurado desde el Wall Street Journal, medio que se ha hecho eco de la información, y que ha sido el primero en informar de las intenciones de Kotick de comprar TikTok. Eso sí, la tarea no sería nada sencilla para el anterior CEO de Activision Blizzard. Según los reportes, para lograr hacerse con la aplicación, el empresario debería pagar una suma de «cientos miles de millones de dólares», algo que no podría hacer solo.
Por esa razón, Bobby Kotick está buscando socios que le ayuden a realizar esta fuerte inversión, y Sam Altman habría sido uno de los elegidos. De acuerdo con la información del prestigioso periódico, el ex de Activision «planteó la idea de asociarse para comprar TikTok a una mesa de personas que incluía al CEO de OpenAi, Sam Altman». Esto significa que, además del creador de ChatGPT, también hay otros cuyo nombre no ha trascendido, pero que habrían sido tanteados por Kotick para llevar a cabo esta importante inversión.
Habrá que ver que termina ocurriendo, pero de no fructificar esta compra, todo parece indicar que TikTok quedará prohibida para el pueblo americano, ya que la legislación propuesta por el gabinete de Biden ya se está tramitando en el Congreso, lo que podría suponer un revés para la aplicación de más de 170 millones de usuarios.