Hace 17 años que Rare dio a la luz Perfect Dark. Un magnífico shooter que, diez años más tarde, recuperaba Microsoft para Xbox 360 con una estupenda remasterización que solventaba los principales problemas de su versión original. Como os acabamos de contar, no hace demasiado tiempo que Microsoft ha registrado como propias algunas marcas de Rare como Battletoads, Jet Force Gemini, o el mencionada Perfect Dark. Esto, a priori, no quiere decir que la compañía norteamericana esté pensando en traernos una nueva entrega, ya que podría achacarse a cuestiones legales. Pero la noticia nos ha servido para acordarnos (si es que alguna vez se ha olvidado) del mítico Perfect Dark, una de las mejores obras de los británicos, que aprovechamos ahora para rememorar con vosotros.
Microsoft registra la propiedad de Perfect Dark y más marcas de Rare
Perfect Dark es un shooter de corte futurista con una intrincada trama que mezclaba casi de todo lo que podáis imaginar: espionaje, conspiraciones gubernamentales, alienígenas… Por suerte, para hacer frente al reto que se presentaba ante nosotros, contábamos con las habilidades de Joanna Dark, tan letal como atractiva. Vale que igual aquello no era lo más original y sorprendente, pero para la época, contar con una historia de ciencia-ficción elaborada era una aspiración a la que pocos juegos podían optar. Mientras que la ambientación, a pesar del inestable framerate, era insuperable; con sus momentos de mayor acción, de infiltración o unos geniales efectos de iluminación…
Pero donde realmente está la marca Rare, y lo que a día de hoy seguimos recordando con cariño, es en la jugabilidad. Y es que a pesar del control más tosco y las posibilidades, extrañas, que ofrecía el mando de Nintendo 64, jugar a Perfect Dark era una de las mejores experiencias que ofrecía entonces la máquina de Nintendo. En primer lugar, porque contábamos con ayudas para apuntar que hacían que aquello no se convirtiese en un suplicio. Pero también porque Perfect Dark era mucho más que un shooter que se limitase únicamente a los tiros. Había mucho más, y superar los niveles requería de cierta habilidad de resolución por nuestra parte y no solo de reflejos; algo de lo que no pueden presumir la gran mayoría de juegos de acción hoy en día. A esto debemos sumarle un magistral diseño de niveles por parte de Rare, para provocar determinadas acciones durante la partida sin hacerla injugable y logrando una amplia variedad de situaciones. Perfect Dark tenía algunos fallos, sí; pero es una joya atemporal por muchas razones.
Rare nunca se ha prodigado demasiado en los shooters en primera persona. Sin embargo, los británicos han influido enormemente en el género, habiendo creado dos de los shooters más importantes de la historia en su época de Nintendo 64: Goldeneye 007 y, unos años más tarde, Perfect Dark. Y por suerte, actualmente contamos con la posibilidad de jugar en Xbox One a una de estas joyas con una gloriosa remasterización que reproduce el juego original a 60 fps, con texturas en HD y algún remozado gráfico en los modelados. Además de las mejoras en el control gracias al mando de Xbox. Perfect Dark se encuentra disponible en Xbox Live por 9,49 €. Un precio irrisorio para un título tan importante, que podéis jugar ahora en las mejores condiciones en vuestra Xbox One gracias a la retrocompatibilidad. También, por supuesto, lo tenéis disponible dentro de la colección Rare Replay, totalmente imprescindible.