Xbox Game Pass está siendo protagonista importante estos días. Los rumores no han dejado de desatarse en torno al servicio de Microsoft; desde la llegada de nuevos juegos y la cuenta oficial de Twitter hasta la posibilidad de suscripciones distintas a las que hemos conocido hasta la fecha. Sea como sea, todo apunta a que durante la Gamescom de Colonia conoceremos más detalles del servicio. Lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿qué papel puede jugar Xbox Game Pass en el futuro de Microsoft? A juzgar por lo que estamos viendo y lo que se está filtrando estos días, puede que uno más importante del que pensemos.
Los usuarios quieren más de Xbox Game Pass
Phil Spencer ya lo ha repetido en más de una ocasión: el mundillo de los videojuegos, tal y como lo conocemos hasta ahora, cambiará. Se acabó el modelo clásico de rivalidades y exclusivos. El futuro de los videojuegos no se va a centrar en lo que nos diferencia, sino en lo que tenemos en común. Y Microsoft parece completamente orientada a seguir esa línea natural que parece estar marcando el mercado y a enfatizar el papel de las comunidades, los streamings y los servicios de cara al futuro. Algo que ya ha comenzado a hacer con Xbox Game Pass.
Hace un año aproximadamente, Microsoft lanzó este servicio. Desde entonces, Xbox Game Pass nos permite disfrutar de un amplio catálogo de videojuegos a un módico precio mensual. El servicio ha sido todo un éxito. Aunque ciertos sectores lo vieran con reticencia al anunciarse, los resultados económicos han apoyado la decisión de Microsoft. Títulos como Fallout 4 o The Elder Scrolls: Oblivion, anunciados en el pasado E3, lo demuestran. Pero, como no podía ser menos, el público quiere más.
Ya sabemos que los títulos exclusivos de Microsoft llegarán a Xbox Game Pass simultáneamente a su lanzamiento. Pero tanto nosotros, como probablemente Microsoft, tenemos las miras puestas más lejos.

Hitman y Ryse ya están en Game Pass.
Nuevo modelo para los desarrolladores third-parties
Ahora mismo las reglas del mercado han cambiado. La base para que un producto triunfe es publicitarlo y ofrecerlo a un coste muy reducido (o incluso gratis) al público. Fortnite es prueba de ello. Pese a ser free-to-play, el juego de Fortnite es, con diferencia, el título que más beneficios está generando ahora mismo. Lo que demuestra que ahora no es tan importante lanzar un juego a 60€ como lograr que ese juego llegue al mayor público posible.
Y Xbox Game Pass puede jugar un papel muy importante en esto, sobre todo en relación con los desarrolladores independientes. Phil Spencer ha afirmado que, en ocasiones, Xbox Game Pass es un medio para un fin. Un medio para que los jugadores lleguen y conozcan juegos a los que, puestos a la venta de forma individual, no accederían.
“Ahora mismo los juegos tienen modelos de negocio dentro de ellos mismos. Así que lograr que se distribuyan, a través de Xbox Game Pass, no supone que el desarrollador deje de generar dinero con ese juego. Estamos descubriendo que, con Xbox Game Pass, la gente juega a más juegos. Y que está probando franquicias nuevas. Aunque se trate de juegos que cuesten 30$ o 60$, es mucho más fácil para esos usuarios pagar 10$ al mes”.
El cross-play multiplataforma puede ser el principio de esta expansión. A partir del juego cruzado, Microsoft podría aprovechar para incluir esos juegos con cross-play en Xbox One con Xbox Game Pass. Esto cuadraría con su idea de centrarse en los juegos, servicios y comunidades, de cara al futuro.

El éxito de Fortnite demuestra que el mercado está cambiando.
Esta idea podría no limitarse a desarrolladores independientes, sino también a juegos AAA. No sería nada raro que Microsoft ya hubiera pensado en llegar a acuerdos con terceros y lanzar los juegos en exclusiva en la plataforma de Microsoft. Tanto Xbox Game Pass como otros servicios, como la retrocompatibilidad, han demostrado que hacer llegar juegos a los usuarios, sin coste alguno, solo se traduce en beneficios.
Más modelos de suscripción y más dispositivos
Si algo nos ha dejado claro el pasado E3, es que Microsoft quiere llegar a más. Quiere expandirse, llegar a más consumidores, aprovechar el mercado y potenciar las nuevas posibilidades que puedan aparecer. Xbox Game Pass puede ser un instrumento clave en esta expansión al llegar a más dispositivos de los que ahora conocemos.
Xbox Scarlett también parece ir orientada en esa dirección. Por lo que sabemos, la idea de Xbox de cara al futuro es llegar crear un bloque de dispositivos, no uno solo. Así conseguiría llegar a un mercado mayor y más variado. Así que e de esperar que Game Pass llegue a estar integrado en todos ellos y que Microsoft exprima su servicio al máximo. Una gran idea para conseguirlo sería mantener títulos de forma permanente; no solo de Microsoft, sino también de third-parties. Ahora mismo el sistema es rotatorio y los juegos pueden desaparecer, pero una buena medida sería mantener un bloque de juegos permanentes.
Pero tal vez esto no quede aquí y Microsoft tenga las miras puestas más altas, llegando incluso a dispositivos de la competencia. Aunque esto sea complicado, si el mercado se orienta a esa idea de comunidad y unión entre jugadores, puede que los límites entre la competencia sean más difusos de lo que creemos.

La suscripción conjunta de Game Pass y Live Gold es de lo más esperado.
La compañía también debería ofrecernos, finalmente, algo que muchos usuarios llevan tiempo pidiendo: la suscripción conjunta de Xbox Game Pass y Xbox Live Gold. La posibilidad de hacernos con ambos servicios de forma anual sería un gran acierto para todos. O incluso de poder elegir entre varios modelos de suscripciones. Al fin y al cabo, si Microsoft está centrada en esa idea de expansión, tendrá que hacer frente a demandas de usuarios muy diferentes. Y nada mejor para eso que ofrecernos distintos modelos de suscripción, para que podamos optar entre los que más nos convengan.
¿Dónde quedan los jugadores clásicos?
A pesar de los cambios que puedan venir de cara al futuro, no parece probable que Microsoft se olvide del jugador “clásico y hardcore”. Ese jugador que en su momento apostó por la compañía y sus exclusivos y que ha continuado apoyándola todos estos años.
Todo apunta a que la compañía quiera llegar a cuantos más jugadores posible. Algo que, en el fondo, está en la idea de cualquier empresa de cualquier sector. Pero para llegar a esa cantidad mayor de público, no se puede descuidar a unos en favor de otros, sino tratarlos a todos por igual.
Por ello, aunque Xbox Game Pass y los servicios de Microsoft amplíen su público, es poco probable que Microsoft se olvide de este sector más purista. Phil Spencer es consciente de los éxitos de las exclusivas de la competencia y Microsoft querrá potenciar esos juegos para sí misma. A juzgar por la línea que podemos intuir seguirá Xbox Scarlett, es probable que los servicios se expandan a más dispositivos. Pero siempre bajo el amparo de Microsoft y sin olvidar de aquellos jugadores que la han convertido en lo que es.