Electronic Arts seguirá adelante con las microtransacciones en los juegos, a pesar de las legislaciones en contra. Bélgica y los Países Bajos ya han determinado que los micropagos que contienen juegos como FIFA Ultimate Team equivalen a apuestas y vulneran sus leyes. Sin embargo, la distribuidora de FIFA está determinada a seguir adelante con ellas. De hecho, el modo Ultimate Team que podemos encontrarnos en FIFA, Madden NFL, NHL y NBA Live es su mayor fuente de ingresos online, tanto para PC, como consolas y móviles. Por tanto, es muy poco probable que la empresa vaya a deshacerse de uno de sus mayores pluses económicos, a pesar de lo que determinen las regulaciones legales de algunos países.
«Vamos a seguir adelante con FIFA Ultimate Team. Siempre estamos pensando en nuestros jugadores. Siempre estamos pensando en cómo ofrecer este tipo de experiencias de forma transparente, divertida, justa y equilibrada para todos nuestros jugadores y seguiremos trabajando con esas ideas en mente», comenta Andrew Wilson, director ejecutivo de Electronic Arts.
El problema principal del modo Ultimate Team es que permite que los usuarios disfruten de un paquete de cartas que contiene jugadores mediando pago. Y esta práctica ha sido considerada como apuesta en los países antes mencionados. Por tanto, aunque Electronic Arts siga adelante con sus prácticas, tendrá que adaptarlas a las legislaciones de los países que se hayan manifestado en contra.
El propio Wilson ha aclarado que ya están trabajando en ello y que muchos países no consideran estas políticas como equivalentes a apostar. Sin embargo, Wilson cree que los micropagos no tienen nada que ver con eso.
«Primero, los jugadores siempre reciben un número específico de items en cada paquete. Segundo, no damos ni autorizamos ninguna forma de canjear dinero o items virtuales por dinero real. Y los items de los juegos no tienen ningún valor en la vida real.
Prohibimos que los items y dinero virtual se transfieran fuera de los juegos y también estamos trabajando activamente para eliminar la posibilidad de que acabe en un ambiente ilegal».