La industria de los videojuegos es un hervidero constante de rumores, pero pocas filtraciones generan tanto eco como aquellas que desentierran proyectos perdidos. Recientemente, la luz ha iluminado más detalles del título cancelado de Batman Arkham, conocido internamente como «Proyecto Sabbath». Este ambicioso juego, desarrollado en la sombra por Warner Bros. Montreal, pretendía ser nada menos que la quinta entrega del aclamado Arkhamverse, situándose una década después de los eventos de Batman: Arkham Knight. Su premisa central era audaz: Damian Wayne, el hijo biológico de Bruce, asumiendo el manto del Caballero Oscuro.
El corazón de estas nuevas revelaciones late en el arte conceptual compartido por Rodrigue Pralier, exartista principal del estudio. Sus imágenes, cargadas de narrativa visual, presentan a un Damian Wayne con la capucha, mostrando rasgos más afilados y una actitud desafiante que refleja su herencia Al Ghul. Junto a él, un Bruce Wayne visiblemente envejecido, observando el legado que ahora recae sobre hombros más jóvenes. Igualmente, impactantes son los diseños de personajes como Killer Croc, reinventado con una estética más monstruosa y primitiva, y una Huntress que adopta un estilo visual marcadamente distinto al visto previamente en la serie Arkham.
Se desvelan más detalles del título cancelado de Batman
La trama de «Proyecto Sabbath» prometía explorar una Gotham City transformada tras la desaparición de Batman. Damian, criado como asesino por la Liga de las Sombras, enfrentaría el desafío único de honrar el código de su padre mientras lucha contra su propia naturaleza violenta. La dinámica entre el nuevo Batman y el anciano Bruce, actuando como mentor desde las sombras, habría sido un pilar emocional. El concepto evocaba claramente el espíritu de Batman Beyond, pero con el giro único de utilizar al hijo conflictivo de Bruce en lugar de Terry McGinnis, prometiendo una tensión narrativa cargada de legado y redención.

Aunque nunca recibió un anuncio oficial, la existencia del proyecto se filtró años atrás, generando expectación entre los seguidores. Su cancelación, silenciosa pero definitiva, se une a otras decisiones recientes de Warner Bros. Games, como la abrupta cancelación del juego de Wonder Woman. «Sabbath» representaba una apuesta arriesgada: alejarse del Batman clásico para explorar un futuro incierto dentro del mismo universo narrativo. Los activos desarrollados y la visión artística, ahora expuestos, muestran un mundo gótico en evolución, más vertical y tecnológicamente avanzado, pero igualmente corrupto.