Los videojuegos son un bien universal, cada vez más. Antaño Estados Unidos y Japón dominaban (en parte lo siguen haciendo) la producción de videojuegos, pero el sector se ha ido ampliando y dando oportunidades a desarrolladores de todos los rincones del mundo. Es así como podemos experimentar historias que parten de mentes y culturas muy distintas a las nuestras, lo que nos enriquece como jugadores y como personas. El título que hoy nos ocupa se enmarca dentro de este grupo.
Hablamos de The Star Named EOS, lo nuevo de Silver Lining Studio, una compañía de desarrollo taiwanesa especializada en las experiencias narrativas de puzles y que ya causó una fantástica sensación con su primera obra, Behind the Frame. Esta se centraba en la pintura y su nuevo trabajo lo hace en la fotografía. Te contamos qué nos ha parecido en nuestro análisis de The Star Named EOS, que muestra el mundo a través de una cámara de fotos y que es todo un soplo de aire fresco para los amantes de los acertijos y los rompecabezas.
El presente reflejado en el pasado
Como ya hemos dicho, The Star Named EOS es un juego de puzles, pero debemos profundizar algo más en su experiencia de juego para que sepas exactamente de qué tipo. La jugabilidad es de corte aventura gráfica clásica point and click. Nuestro personaje, el joven Dei, ve el mundo en primera persona y se encuentra en escenarios en tres dimensiones, pero no tiene libertad de movimiento como en otro tipo de videojuegos. La obra de Silver Lining, por su parte, solo nos permite rotar alrededor del eje del personaje para observar con más atención, detenimiento y cercanía zonas concretas del escenario.
Así es como descubrimos nuevos puzles, objetos para resolverlos y lugares en los que tomar una instantánea, que es una de las mecánicas clave del videojuego. De hecho, Dei tiene una conexión muy especial con su madre, de quien va recuperando cartas y fotografías que trata de emular en su propio presente. Aunque la idea narrativamente funciona bien, la recreación de estas fotografías es increíblemente frustrante. Es difícil saber cuándo vas a cumplir los requisitos de similitud con la original. En nuestro caso, algunas de las recreaciones nos han llevado varios minutos, muchos intentos y su consecuente pérdida de paciencia.
Sin embargo, la inmensa mayoría de puzles son muy interesantes. No son demasiado complejos y te permiten ir avanzando con paso firme al mismo tiempo que tienes que pensar un poco para resolver la situación o investigar un poco más para descubrir la pista que te faltaba. En conjunto, el juego cuenta con un buen ritmo intercalando secciones de puzles y otras narrativas y cinemáticas de corte anime dibujado a mano.
Una historia maternofilial
Desde Playism, editora de The Star Named EOS, han hecho mucho hincapié en que no desvelemos más detalles argumentales de la cuenta para mantener las sorpresas intactas para los jugadores. Obviamente así lo haremos, pero sí es necesario ponerte un poco en contexto de la historia del videojuego para que sepas qué es lo que te espera, pues al fin y al cabo es una de las tres patas fundamentales sobre las que se erige la obra de Silver Lining Studio, acompañando a los puzles y el estilo artístico.
Como comentábamos anteriormente, The Star Named EOS nos pone en la piel de Dei, un joven aspirante fotógrafo cuyo gran referente es su propia madre, que ha dedicado su vida a este arte. De niño, Dei recibía cartas de su madre durante sus viajes y estas siempre iban acompañadas de fotografías que realizaba en los mismos. Ahora, con ella ausente, Dei revive esos momentos tratando de recrear esas fotografías. Pero no todo es paz y harmonía, pues un día Dei nota que algo extraño en las imágenes amenaza con desmoronar todo en lo que siempre había creído. Con la voz de su madre como guía, el joven emprende su propio viaje para descubrir la verdad sobre la historia de la desaparición de su madre.
Como puedes ver, una historia cargada de tintes emotivos y acompañada de una gran voz de doblaje para la ocasión. Para la versión en inglés (también se puede jugar con voz en japonés o chino) The Star Named EOS cuenta con Suzie Yeung, una prolífica actriz de doblaje que cuenta con créditos en videojuegos muy reconocidos y papeles importantes, como Yuffie Kisaragi en Final Fantasy VII Rebirth o Fuuka Yamagishi en Persona 3 Reload.
Un apartado artístico que lo es todo
Ya hemos hablado de la narrativa y de cómo se juega a The Star Named EOS, pero el videojuego de Silver Lining no tendría sentido sin su apartado visual. Especialmente destacables son las cinemáticas y paisajes dibujados a mano y con un componente anime delicado que le sienta de lujo a la propuesta. En las partes más jugables contamos con entornos en 3D cercanos a ese estilo artístico y que complementan a la perfección este apartado.
Sonoramente el videojuego no se queda atrás. Ya hemos puesto en valor el trabajo de Suzie Yeung, pero la obra también hace gala de bonitas piezas musicales para acompañar al ya de por sí preciosista apartado visual. En conjunto, dos elementos que solo hacen que sumar a un juego de puzles muy redondo.
Conclusiones
El género de puzles nunca ha sido un superventas ni extremadamente popular. Las aventuras gráficas sí tuvieron un pico de éxito a finales del anterior siglo y The Star Named EOS trata de moverse un poco en ese terreno. La nueva obra de Silver Lining Studio, también creadores de Behind the Frame, toma la fotografía como punto de partida para dar vida a una emotiva historia maternofilial cargada de giros argumentales sorprendentes y de puzles ingeniosos y que te invitan a estar siempre alerta.
Aunque la recreación de fotografías es demasiado puntillosa, casi todo en The Star Named EOS funciona a las mil maravillas y, sin duda, es un juego indispensable para los amantes de los puzles y las buenas historias. Aquí, ambos elementos se dan de la mano y caminan al mismo ritmo.