No es nuevo que series, películas y cada vez más videojuegos nos pongan los pelos de punta con lo que podría ocurrir si alguien manejara las nuevas tecnologías a su antojo. Cada vez más, sistemas, vehículos e infraestructuras dependen de una red informática, que aunque hasta el creador piense que es infranqueable, tarde o temprano se acaba vulnerando su seguridad.
Just do it
Ubisoft nos trae esta historia, pero desde una perspectiva diferente. Ahora nosotros (sin ser los únicos) seremos capaces, y de hecho deberemos de hacerlo, a través de nuestro protagonista, Aiden Pierce, de acceder a cualquier sistema que se nos ocurra con tal de frenar a nuestro enemigo, Control Total.
En este peculiar Chicago que nos muestra Watch Dogs, controlado casi por completo por Sistema de Operaciones Central (en adelante ctOS), hemos de ser la llave maestra para poder abrir todas las cerraduras que necesitemos. Y nuestro móvil será nuestra herramienta más preciada.
Todo está conectado
Partiendo de su género sandbox, Watch Dogs pone a nuestra disposición una amplia ciudad llena de vida para explorarla, podemos usar vehículos como coches, motos, coger el tren, robar una embarcación o recorrerla a pie.
Las novedades jugables que lo diferencian del resto se basan principalmente en nuestra habilidad de hackeo casi ilimitada gracias a nuestro teléfono móvil, herramienta imprescindible de nuestro protagonista y que otorga al juego una variedad única en su género, desde él, podemos investigar a los transeúntes de chicago, descubrir sus secretos más oscuros, o vaciar sus cuentas bancarias; también podemos cambiar los semáforos, subir pivotes de la carretera para escabullirnos de las distintas persecuciones, elevar puentes, parar trenes, interceptar llamadas a la policía, introducirnos en las cámaras de seguridad de la ciudad, apagar alarmas, controlar sistemas a control remoto y una gran cantidad de novedades a nivel jugable que amplían la vida del título y ofrece libertad a la hora de afrontar las distintas misiones.
La ciudad de Chicago es grande y ofrece muchos desafíos para el jugador de todo tipo, hay muchísimas secundarias y minijuegos, cosa que se agradece bastante a la hora de multiplicar la duración del juego, pero algunos desentonan muchísimo con la dinámica general, ofreciendo diversión y locura a partes iguales al más puro estilo Saint´s Row.
Contamos también con un árbol de habilidades que le da ese toque “rolero”, al ir avanzando en el juego, que si bien es escaso en opciones ofrece versatilidad a la hora de personalizar nuestra experiencia, existen 4 tipos: hackear, combate, creador de objetos y conducir.
Su mecánicas jugables desprenden el aroma de otros grandes de ubi y en muchos de sus apartados bebe directamente de juegos como Assassin’s Creed, Splinter Cell o incluso Driver, algo que no tiene por qué ser malo siempre y cuando, como en la mayoría de elementos en este juego, estén bien implementados.
Watch Dogs también cuenta con un apartado multijugador perfectamente integrado con la campaña. Los jugadores pueden hackearte, buscando la manera de librarte de ellos, hay misiones de versus y hasta podemos dejar regalos en diferentes lugares para que sean recogidos. ¿Se podía haber hecho algo más? Pues claro, como en todos.
Ahora bien, pensamos que todas esas novedades que ofrece en el apartado jugable se pueden explotar muchísimo más, al final tanto el hacking como los distintos tipos de misiones secundarias se tornan algo repetitivas, y caen en cierta monotonía, dejando un sabor bastante agruidulce.
La trama cumple sin alardes, es correcta pero ni de lejos es algo excesivamente elaborado, ni sorprendente, sin contar con que nuestro protagonista no tiene el carisma de otras producciones de Ubisoft. En este punto hemos de tener en cuenta el hype generado desde hace ya dos años y sobre todo estos meses atrás. Viendo el juego tal y como nos lo habían pintado, se echan en falta más elementos. En cambio viendo el juego como tal, sí, tiene mucha chicha a la que hicarle el diente. Nosotros siempre intentamos verlo desde esta perspectiva y por ello lo estamos disfrutando.
¿De verdad viene con un colirio de regalo con Watch Dogs?
Es cierto, esta entrega ha sido hateada hasta saciar, por eso es normal que muchos jugones vayan predispuestos a ver cosas malas en él. Y en el apartado gráfico es donde más podría recibir. Pues bien, es cierto que hay elementos que no nos han gustado, véase Aiden corriendo, los pobres interiores, ese «humo» que nos nubla la vista cuando vamos conduciendo o alguna que otra animación que, bueno, podría haberse mejorado (máxime cuando en Assassin’s Creed ya lo habían medio conseguido).
Pero no todo es eso en el juego, por lo menos en el apartado gráfico, y es que, como en el título anteriormente mencionado, los efectos de luz son muy muy buenos, de la misma manera el agua en sus diferentes formas está muy conseguida (recordemos ACIV para esta generación, que está muy bien).
Por otro lado, mucha parte del juego está ambientada de noche y, sinceramente, los escenarios nocturnos son fabulosos. Si añadimos la mencionada iluminación que tiene el juego en sí, aplicada a este tipo de escenarios, está bastante bien. ¿Qué tiene fallos con las sombras y demás? Pues lo dicho, es bastante mejorable pero no significa que sea un horror en este apartado.
No todo se basa en los gráficos
El juego cuenta con un completo doblaje al castellano de gran calidad, tal y como nos tiene acostumbrados Ubisoft, con voces de actores profesionales y populares de series de televisión, como Lorenzo Beteta o Cecilia Santiago.
En cuanto a la banda sonora, destaca una gran variedad de canciones que podremos escuchar en los vehículos a los que subamos, e ir desbloqueando a lo largo del juego. De la misma manera que ya han hecho otras superproducciones como GTA, nos encontramos con un tracklist de una calidad sublime.
Un par de ejemplos que nos harán sacar una sonrisa:
¿En qué quedamos?
Pues quedamos en que es un gran título, ¿no nos compramos los juegos para divertirnos? Watch Dogs cumple con creces, tiene un apartado jugable sobresaliente, aunque la historia no sea nada nuevo, sí introduce elementos que nos van a enamorar. Respecto al tema gráfico, cierto, tiene varios fallos, pero en mayor o menor medida esto ocurre en todos los títulos, no hay ninguno perfecto y este o iba a ser menos.
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Lo bueno
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- Un Sandbox, que ya iba tocando, y con todo lo que ello conlleva.
- Banda sonora de escándalo.
- Una trama bastante bien hilada.
- Sistema de pirateo fabuloso.
- Diferentes maneras de realizar ciertas misiones.
- Calidad en el doblaje.
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Lo malo
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- Unos gráficos finales que dejan que desear para la next gen y para lo que se había enseñado previamente.
- Una ciudad algo pequeña, a veces se nos hacen los sitios repetitivos.
- Puede hacerse pesado y repetitivo lo fácil que son muchas misiones, no todas.
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