Las mejoras más obvias de la nueva Xbox One X frente a los anteriores modelos de Xbox One son las visuales, para las que la máquina ha sido especialmente concebida. Claro que luego tenemos las mejoras en cuanto a rendimiento o framerate, también muy importantes para algunos usuarios y en especial para determinados juegos. Pero las posibilidades técnicas de Xbox One X no quedan ahí, e incorpora algunas otras mejoras que, aunque no son tan llamativas, también suponen un salto sustancial respecto a Xbox One S: hablamos ahora de los tiempos de carga de los juegos. En WindowsCentral han llevado a cabo una nueva comparativa entre varios de los últimos títulos lanzados en la que podemos ver claramente como estos molestos momentos muertos se ven reducidos en la mayoría de los casos de forma considerable.
En el portal han realizado la comparativa mediante varios juegos, en los que han intentado recrear unas condiciones similares en ambos modelos de consola (Xbox One X y Xbox One S) para llevar a cabo la comparativa. Como first-party han empleado Forza Motorsport 7, en el que de un tiempo de carga medio de 61,2 segundos en Xbox One S, pasamos a 46 en Xbox One X.
Curiosamente las diferencias en los juegos third party no son tan palpables, aunque están ahí y son especialmente relevantes en alguna excepción, suponemos que Forma Motorsport 7 haya sido ideado por completo con la tecnología de Xbox One X en mente ayuda a sacarle el máximo provecho en cada ámbito. Los juegos empleado en este caso han sido Assassin’s Creed Origins, en el que pasamos de 48,7 a 43,6. Call of Duty WWII, de 32,6 a 25,8. Y Star Wars Battlefront II, en el que pasamos de 62,3 a 55,1. La excepción de la que hablábamos en este caso de GTA V, que reduce el tiempo medio de carga a la mitad, pasando de 102.3 a 54,4 segundos al momento de cargar la partida.
Por último, curiosamente en el caso de los juegos retrocompatible sucede lo contrario, y es en Xbox One X donde encontramos unos tiempos de carga superiores. Por ejemplo en Halo 3 pasamos de 40,6 en Xbox One S a 44,3 en Xbox One X. Claro que, las importantes mejoras incluidas en los juegos retrocompatibles en Xbox One X tienen que ver en este sentido, y esa pequeña diferencia merece mucho la pena en este caso y queda justificada.