Gracias a Xbox Scarlett y Project xCloud, Microsoft se encuentra en una posición bastante segura de cara al futuro de las consolas. El medio Giantbomb ha analizado los principales anuncios que ha dejado la pasada Games Developers Conference, entre los que destaca Google Stadia. El servicio de streaming de Google se presentó como gran bombazo del evento. Pero, por el momento, parece ser que no está generando el impacto que buscaba. Según afirman los periodistas que participan en el podcast, las reacciones de los desarrolladores han sido mixtas. Principalmente por no saber a ciencia cierta hacia dónde se dirige el mercado de consolas. Algo que favorece la posición de Microsoft gracias a Xbox Scarlett (que seguiría el modelo clásico de consolas) y Project xCloud (que seguiría la misma línea que Google Stadia).
«Si es cierto que Microsoft va a seguir con ese enfoque híbrido, ofreciendo una consola tradicional y un servicio de streaming, estará en la posición más segura. Si el modelo de streaming no funciona, estarán preparados. Y, si no funciona, estarán igualmente listos. Incluso si el mercado acaba permitiendo que ambos modelos coexistan, Microsoft estará contenta generando dinero de todos lados».
Precisamente la Xbox One sin lector, Xbox One S All Digital, es perfecta para tantear la idea del streaming de cara al futuro. Phil Spencer ha comentado, en varias ocasiones, que Microsoft quiere llegar a todos en todos lados. Así que abarcar tanto el terreno del streaming, compitiendo con Google Stadia, como el terreno de las consolas clásicas, ofreciendo lo mejor en cada uno, puede darle una gran ventaja de cara a la próxima generación de consolas.