Fortnite Capítulo 2 dio comienzo después de una de las maniobras de marketing más locas que recordamos. El juego desapareció de la faz de la Tierra dejando solamente un agujero negro que estuvo presente durante dos días hasta que Fortnite volvió anunciando su Capítulo 2. El problema fue que durante ese transcurso de tiempo se filtró su existencia, el mapa e incluso gran parte de las novedades que contendría. La culpa de ello es de Ronald Sykes, un tester que compartió con el mundo una información que se encontraba bajo un acuerdo de confidencialidad (NDA), por eso ahora Epic Games le ha interpuesto una demanda.
La demanda dijo que Sykes rompió un acuerdo de no divulgación al revelar información que aprendió como tester de la experiencia del usuario. «Lo hizo a expensas de Epic y de los miembros de la comunidad de Fortnite que esperaban con ganas la nueva temporada de Fortnite sólo para tener algunas de las sorpresas planeadas de Epic arruinadas por las filtraciones de Sykes», escribieron los abogados en la demanda.
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Según la demanda, Sykes jugó el nuevo contenido de Fortnite a finales de septiembre – y tres días después tweeteó a otro usuario de Twitter que había jugado la S11 y podía contarle las novedades. Más tarde volvió a twittear desde otra cuenta y reveló que en Fortnite Capítulo 2 los jugadores serían capaces de nadar. Sykes continuó filtrando los secretos de Fortnite, incluyendo una imagen del nuevo mapa, en el período previo al evento
«Como resultado directo del incumplimiento de Sykes de sus obligaciones contractuales bajo su NDA, Epic ha sufrido y continuará sufriendo daños en una cantidad que se determinará», dijo Epic en la demanda. Por lo que Sykes puede esperar que se le apliquen medidas cautelares por daños y prejuicios debido a dicho incumplimiento. Veremos en qué queda.
