En un momento en el que la incertidumbre que generan los constantes rumores sobre las prestaciones de las consolas de nueva generación está en un nuevo momento, la distribución de los kits de desarrollo a algunos estudios está dejando declaraciones interesantes. Declaraciones que exponen una valoración parcial de lo que supondrá la nueva tecnología que implementarán los nuevos hardwares basado en los últimos avances de AMD. Con ello, estamos viendo que hay una gran ilusión, donde no es la primera vez que escuchamos que la próxima generación de consolas supondrá «un gran salto generacional».
Y aunque esto pueda parecer resultado de las nuevas GPU, la realidad es que no se está apuntando tanto al apartado gráfico como a otras cuestiones. En esta ocasión, desde el estudio Tripwire Interactive, responsables de juegos como Killing Floor, Rising Storm o el próximo SharkPG, el CEO John Gibson ha dejado unas declaraciones realmente interesantes. Nuevamente, se intenta exponer que la próxima generación de consolas supondrá «un gran salto generacional». Es decir, que tanto Xbox Series X como Playstation 5, esconden un potencial muy importante para desarrollar nuevas experiencias.
Aprovechar el potencial de Xbox One X ha sido fácil para Killing Floor 2
Y se reincide en tres aspectos como principales promotores de esta revolución. La CPU basada en la tecnología Zen 2 de AMD, la mayor velocidad de lectura de los discos duros SSD NMVe y la nueva memoria GDDR6. Tres aspectos que combinados, permiten ahondar en nuevas posibilidades para cualquier desarrollador, más allá de hablar de TFLOPs, resoluciones o rendimientos. De hecho, el primer factor que asume Gibson, es que «los discos duros de 5200RPM son horribles para los tiempos de carga». Hasta la fecha, y aunque parezca algo del pasado, las consolas montaron discos duros que ofrecían esta característica, que era uno de los límites más relevantes.
En torno a la llegada de discos duros más capaces, gracias a la tecnología NVMe, los juegos de mundo abierto podrán cargar muchos más recursos en mucho menos tiempo. Siendo un aspecto bastante básico, y una tecnología recurrente en los usuarios de PC centrados en el gaming, estos nuevos discos duros permitirán llevar el desarrollo de los juegos un paso más allá. Pero tanto por la velocidad de transferencia que permiten los discos duros, como por las ventajas semejantes que ofrece la nueva memoria GDDR6 con un imponente ancho de banda, y la capacidad de procesamiento de los nuevos procesadores Ryzen basados en Zen 2, lo que se puede llegar a procesar es muy superior.
Se descubre una imagen de la interfaz del kit de desarrollo de Xbox Series X
Desde Tripwire Interactive aseguran que, gracias a todo esto, se pueden crear mundos abiertos mucho más diversos, eliminando esos problemas que las actuales consolas ofrecen por culpa de lo que se tarda en transmitir la información. No es la primera vez que escuchamos este argumento, incluso esta conclusión. Es más, en todo momento se ignora el potencial que puede ofrecer la GPU, apuntando a que lo que motivará que la próxima generación de consolas supondrá «un gran salto generacional», sean otros elementos ajenos a lo que viene asignándose a la calidad visual.
Y es que, además, a día de hoy, la GPU de las consolas de nueva generación es lo que más discordancia está generando en torno a las filtraciones de las especificaciones. Aunque originalmente se apuntó a una Navi 10 Lite para Xbox Series X y Playstation 5, la tendencia de las filtraciones ha mostrado que Microsoft parece querer desmarcarse con su hardware al usar una GPU más potente, abriendo la puerta a la opción de los dos hardwares para la próxima generación.