En unos días en los que la polémica remasterización de The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition ha dejado unos vídeos comparativos un tanto contradictorios, algunos usuarios que han tenido acceso anticipado al juego de Bethesda han intentado sacar conclusiones mostrando al público lo que se han encontrado. Un trabajo de remasterización que ha ofrecido un resultado por debajo de lo que se esperaba, pero que, no obstante, ha dado cuenta de una labor bastante minuciosa en muchos otros aspectos.
Los principales cambios afectan al entorno, uno de los mapas más bastos que se han visto en un videojuego, donde las texturas y la iluminación han sido los principales factores que han buscado cambiar el aspecto de The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition. El resultado resulta irregular, donde se puede ver como los cambios afectan a nivel de texturas y construcción en muchos aspectos. Ante aquella comparativa entre Xbox 360 y Xbox One, también ha surgido una nueva comparativa que afecta a las consolas de Sony, donde nuevamente se puede observar este mismo resultado contradictorio.
Todo apunta a que, pese a que el juego ha mejorado considerablemente su aspecto en la mayor parte de los elementos, sobre todo del mapa, paisaje y ambientales, la intención de Bethesda de revenderlo en consolas por el mismo precio que si fuese nuevo ha supuesto un incremento de la exigencia de la comunidad. Pero nadie puede negar que para aquellos usuarios que se perdieron la oportunidad de disfrutar de Skyrim en la anterior generación, tienen en The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition, una gran oportunidad de disfrutar de una de las mejores experiencias vividas en aquella generación.
The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition llegará a Xbox One la próxima semana, más concretamente, el próximo 28 de octubre.