El año 2024 comenzó de la peor forma posible para muchos estudios de la industria del videojuego. Deck Nine Games fue uno de ellos, anunciando el despido del 20% de la plantilla de los actuales responsables de la saga Life is Strange. Sin embargo, en las últimas fechas han salido a la luz informaciones que apuntan a que esto no es lo peor que está ocurriendo en la compañía afincada en Boulder, Colorado.
¿Qué está pasando en Deck Nine Games, te estarás preguntando? El portal IGN ha realizado un profundo artículo de investigación en el que ha contado con el testimonio anónimo de algunos trabajadores y extrabajadores del estudio y ha puesto luz sobre un tema muy grave y que comenzó al localizarse simbología nazi en la nueva entrega de la saga, que se encuentra actualmente en desarrollo.
¿Qué está pasando en Deck Nine Games, el estudio responsables de la saga Life is Strange?
Como bien explica IGN, algunos desarrolladores de Deck Nine localizaron referencias nazis como el número 88, la runa Hagall o memes racistas. Al principio se pensó que era una coincidencia o equivocación, pero poco a poco se descubrieron muchas más. El equipo lo hizo saber a la dirección del estudio, pero con el paso de las semanas no recibieron ninguna respuesta al respecto, lo que dejó con la mosca detrás de la oreja a los empleados. Según cuentan las fuentes anónimas al mencionado sitio web, esta no era la primera vez que la dirección de Deck Nine hacía sentirse desprotegidas a las personas más vulnerables, especialmente hiriente en una compañía que trabaja en juegos reconocidos y premiados por su representación de colectivos vulnerables.
Tras terminar la colaboración entre Don’t Nod (creadores originales de Life is Strange) y Square Enix (editora y propietaria de los derechos de la saga), Deck Nine se hizo cargo de la franquicia tras haber tenido ya experiencia en el pasado con Life is Strange: Before the Storm. De ahí surgió True Colors, la primera entrega principal de la serie a cargo de Deck Nine. Los empleados entrevistados por IGN hacen referencia a periodos de trabajo intensivos (crunch) con horarios muy extensos durante épocas concretas del desarrollo. Algunos hablan de Square Enix London como “matones” que ejercían mucha presión sobre el equipo de desarrollo. De hecho, explican, desde la editora hablaban de que no querían que se conociera a la saga Life is Strange como “el juego gay”, en claro tono despectivo, nuevamente muy hiriente sabiendo que la franquicia es un referente para el colectivo LGTB. A Deck Nine, según comentan estas fuentes, se le prohibió promocionar el juego haciendo saber que Alex Chen, la protagonista, era un personaje bisexual.

A pesar de la tensa relación con Square Enix, los entrevistados culpan a la dirección de Deck Nine de estos periodos de crunch y de permitir ciertos comportamientos que han llevado a generar un clima tóxico en la compañía. Más allá, las fuentes anónimas hablan de casos de acoso sexual y transfobia en el estudio que permanecieron sin abordar durante meses en Deck Nine pese a estar ya en conocimiento de la dirigencia. Todas las mujeres entrevistadas en el artículo de IGN tenían al menos una historia de acoso o comportamiento tóxico dentro de la compañía.