Samsung quiere recuperar su presencia en el mercado gaming, presentando una nueva gama de monitores curvos en el CES 2020 que dará comienzo el 7 de enero. A través de una nota de prensa, Samsung presenta un anticipo de la gama de monitores curvos The Odyssey, con la que buscan una pequeña revolución innovadora en su gama. Para ello se abarcan diferentes tamaños de dispositivos que presentan características muy interesantes para los gamers.
La punta de lanza de la gama de monitores curvos The Odyssey es el G9, el primer monitor Dual Quad High-Definition. Se trata de un panel curvo de 49″ ultrawide (32:9), con una resolución de 5120×1440, 240Hz de tasa de refresco y HDR1000. Son las principales características de un dispositivo que busca ser uno de los referentes del próximo evento que tendrá lugar en Las Vegas, y en uno de los objetos de deseo de los gamers para este año 2020.
Pero además, de este panel de 49″ con curvatura 1000R, se ha presentado otra gama, la G7. Los monitores de la gama G7 abarcan tamaños de 27 y 32 pulgadas, donde también se busca ser el referente de rendimiento. Optando por una resolución de 2560×1440 con una relación de aspecto algo más normal de 16:9. En esta ocasión, el panel busca ofrecer un producto más accesible, con compatibilidad a HDR600, 240Hz, en un panel QLED y Quantum dot, para garantizar un buen contraste y brillo.
En todos estos casos, tanto por el G9 como por el G7, se confirmaría la compatibilidad con el Nvidia G-Sync y el FreeSync, que viene siendo necesario para poder abarcar esa tasa de refresco y confirman el siguiente paso en los monitores que dan soporte a ambas tecnologías sin priorizar ninguna. En el ámbito del diseño, se ha buscado un cambio radical, donde ahora ambas gamas gozan de un nuevo estilo marcado por una luz lez en la zona de anclaje del monitor con la peana, configurable con 52 colores y cinco efectos de iluminación..
Habrá que esperar al CES 2020 para conocer nuevos detalles de su lanzamiento, empezando por la fecha y seguido del precio.