Por fin ha llegado a nuestras manos Ripples, el esperado tercer episodio de The Council. En esta ocasión Big Bad Wolf da un gran salto en la trama, presentándonos nuevas y complicadas situaciones. Con Ripples, el estudio nos sumerge en el verdadero entramado de The Council, donde las corrupciones, los intereses políticos y personales y el “leitmotiv” del juego comienzan a asomar.
2018, el año de Focus Home Interactive
Según avanzan los episodios de The Council, nos vamos dando cuenta de que 2018 está siendo uno de los grandes años para Focus Home Interactive, su distribuidora. Ya no solo por el título que tenemos entre manos, sino también por los que han llegado. Vampyr llegó en vísperas del E3, convirtiéndose en un juego muy bien valorado por la crítica. El público también decidió apoyarlo, tal y como muestran las cifras que ha desvelado Focus Home Interactive. Pero este no será el único gran juego del año para la distribuidora francesa. Porque Call of Cthulhu por fin cuenta con fecha de lanzamiento definitiva.
El E3 2018 nos dejó además interesantes sensaciones respecto a los juegos venideros. Uno de ellos es A Plague Tale: Innocence, juego desarrollado por Spiders que nos llevará a la Francia medieval. Allí los hermanos Amicia y Hugo tendrán que sobrevivir al drama del momento, valiéndose de unos interesantes personajes: las ratas. Greedfall es otro juego al que conviene seguir la pista. En este caso la historia nos llevará al colonialismo del siglo XVII, donde el realismo y la fantasía feérica se mezclarán en un vistoso RPG.
El thriller y los puzzles vuelven por todo lo alto con Ripples
Ripples comienza justo donde acabó Hide and Seek. Después de descubrir el secreto que marcó el final del episodio anterior, Louis de Richet se verá obligando a atender la conferencia y cuyas consecuencias prometen cambiar el mundo entero. Pero los frentes no dejarán de abrirse para el joven miembro de La Orden Dorada; no solo deberá asistir al concilio, sino también averiguar más secretos de Lord Mortimer, el enigmático anfitrión, y de los demás personajes. Ni la vida de Louis ni la del resto de invitados a la mansión serán lo mismo después de este capítulo.
Este Episodio 3 sigue la senda de los anteriores. Se trata de una aventura conversacional con importantes elementos RPG. El núcleo de nuestra historia serán las conversaciones que tengamos con los demás personajes y cómo enfocarlas, para poder obtener según qué informaciones y conseguir llevarlos a nuestro terreno.
El gran punto a favor que presenta The Council, y que lo diferencia de otros juegos del género, es el árbol de habilidades que nos presenta. Podremos hacer que Louis pertenezca a una de las tres clases que os propone Big Bad Wolf (Detective, Ocultista o Diplomático), cada una con sus habilidades particulares. Sin embargo, aunque escojamos una clase, podremos mejorar las restantes igualmente.
Ripples sigue la línea de los anteriores episodios en cuanto a jugabilidad. Nuestra historia se irá dibujando a medida que vayamos hablando con los demás personajes, encontremos pistas y resolvamos puzzles. Algunas de estas conversaciones serán más triviales, pero otras serán Confrontaciones. Estas últimas se caracterizarán por tener mayor importancia de cara a la historia y consecuencias irreversibles. Porque si fallamos una Confrontación, no podremos volver atrás y rehacerla.
Con este Episodio Big Bad Wolf ha conseguido superarse. Para empezar, las Confrontaciones son bastante más difíciles de lo que hemos podido ver en episodios anteriores y las consecuencias son más graves. Por ejemplo, puede ocurrir que Louis se encuentre con cuatro respuestas iguales, en las que solo varíe la habilidad potenciada en cada una de ellas. Además el número de traspiés se nos reducirán a dos y en ocasiones a uno solo, así que tendremos que ser mucho más cuidadosos que antes. Respecto a las consecuencias, en Ripples descubriremos cuán irreversibles pueden llegar a ser nuestras decisiones y la importancia de los detalles para escoger la más adecuada.
Los puzzles también serán más complicados que antes. Y es de agradecer que Big Bad Wolf haya seguido la línea del Episodio 2, proponiéndonos unos retos y una dificultad cada vez mayores. No bastará con recurrir solo a la lógica, como en puzzles de los dos episodios anteriores, porque serán mucho más enrevesados y largos. Merece mencionar especialmente el último que tengamos que superar, que nos supondrá todo un reto como jugadores.
Por otro lado, los objetos no variarán respecto a los capítulos anteriores. Podremos seguir ayudándonos de Jalea (que restaura puntos de esfuerzo), Abrojo (permite revelar temporalmente inmunidades e invulnerabilidades), Agua del carmen (elimina el coste de la próxima habilidad que usemos) y Elixir dorado (cura las alteraciones negativas que puedan dificultarnos las confrontaciones). Sin embargo, sí notaremos que la Jalea y el Elixir, objetos que más usaremos en nuestra aventura, escasean respecto a episodios anteriores. Así que no solo tendremos que tener cuidado con las opciones que escojamos en las conversaciones y Confrontaciones por las consecuencias, sino también por la escasez de objetos.
Una historia más intensa, profunda y cuidada
Este episodio también aumenta la complejidad desde el punto de vista argumental. La corrupción, el poder, los intereses personales y la política cobran más importancia que antes. Además de los nuevos secretos que descubramos de los personajes, que abrirán más posibilidades de cara al futuro. Pero igual que nos propone más retos como jugador, en Ripples las consecuencias de nuestros actos serán más duras y la carga argumental superará la de los dos anteriores.
Como ocurre con los juegos de Focus Home Interactive en general y The Council en particular, Ripples cuida magistralmente los detalles históricos y culturales del momento. Este capítulo se centra en la situación política y social de España, Estados Unidos y Francia, recogidas y detalladas de una forma verídica, realista y cuidada. Con Ripples conoceréis el contexto histórico del juego de modo ameno e interesante. Algo que no solo os será útil como personas, sino también de cara al juego y a las decisiones que tomar.
Por otro lado, los personajes cada vez van adquiriendo más personalidad y fuerza. George Washington y Manuel De Godoy serán piezas clave en este episodio, que nos permitirá entender mejor sus motivaciones. Sin embargo, Jacques Péru y Lady Hillsborrow merecen mención especial. De Jacques Péru sabíamos más bien poco hasta ahora, pero este episodio conseguirá que cambiemos de opinión sobre él. Y, aunque echásemos de menos a Lady Hillsborrow en el segundo episodio, en este cobrará bastante importancia y nos regalará unas escenas cargadas de tensión.
Técnicamente no mejora
La gran pega de The Council sigue siendo su apartado técnico. Algo que Big Bad Wolf sigue sin mejorar. Ripples mantiene los tirones, la baja resolución y las ralentizaciones de los episodios pasados. Aunque ya estemos acostumbrados, por mantener la misma línea de The Mad Ones y Hide and Seek, en este caso los fallos parecen más habituales y pueden llegar a ser bastante molestos.
Por el contrario, el diseño y la música mantienen el nivel. El apartado artístico de Ripples consigue brillar, ofreciéndonos nuevas zonas tan cuidadas y detalladas como las que ya conocíamos. A pesar de las voces en inglés, seguiremos contando con subtítulos en español. No obstante, en este episodio nos encontraremos con algunos fallos de traducción, con frases en francés no traducidas. Por último cabe destacar que Ripples es bastante más largo que Hide and Seek, aunque esté dividido en tres partes. Algo que es de agradecer, porque el segundo capítulo resultó corto en comparación con el primero.
Conclusión: más dificultad y más carga argumental
Con Ripples, Big Bad Wolf nos adentra de lleno en el mundo de las corruptelas y luchas de poder que quiere ofrecernos con The Council. Los puzzles y las Confrontaciones se vuelven más intensos y complicados, con unas consecuencias más graves que en los episodios anteriores. Técnicamente el juego sigue presentando importantes fallos. Pese a esto, Ripples nos ofrecerá mayores retos y una historia que sigue yendo cuesta arriba.
