Tras ciertas polémicas alrededor de Activision Blizzard -en concreto la del jugador profesional de Hearthstone que fue expulsado al colocarse una máscara de gas como símbolo de apoyo a las protestas en Hong Kong-, la creadora del universo Warcraft ha querido dejar clara su posición en cuanto a temas políticos tanto dentro de los videojuegos como en la propia comunidad.
Tal y como ha comentado el propio consejero delegado de la compañía Bobby Kotick, ser desarrolladores de videojuegos no nos da libre albedrío para transmitir en nuestros juegos nuestras propias ideas políticas o sociales, es más, recalca que tanto estudios como editoras deberían suprimir todo aquel elemento que esté relacionado, pues no son ‘los presidentes del mundo’:
«Mi responsabilidad es asegurarme de que nuestras comunidades se sientan seguras, cómodas, satisfechas y entretenidas y, por lo tanto, no creo que eso no me conceda el derecho a tener una plataforma en la que ofrecer tantos puntos de vista políticos como necesite, la verdad. Creo que mi obligación es la de satisfacer a nuestro público y a nuestras partes interesadas, como nuestros empleados y nuestros accionistas.»
Continua afirmando que son varias las compañías con un claro pensamiento político y que con sus juegos intentan transmitir estas ideas a los jugadores, algo que le parece estar totalmente fuera de lugar:
«La verdad, no somos ni los gestores, ni los alcaldes, ni los presidentes del mundo. Nosotros únicamente nos responsabilizamos y gestionamos aquellas comunidades que buscan disfrutar y divertirse a través del uso de los videojuegos. Mezclar política con estos es una mala decisión.»
¿Vosotros qué opináis al respecto? Personalmente, creo que los videojuegos son para eso, disfrutar y desconectar de todo lo demás, incluido la política, que no debería ver la luz en este mundillo.
