Atomic Heart es el shooter futurista para Xbox One, que nos llegará en 2019. Un shooter con toques RPG que recuerda enormemente a otros títulos retro-futuristas como BioShock. Ambientado en una Unión Soviética futurista, el título nos presenta un mundo alternativo en el que la revolución tecnológica ya ha ocurrido. Los robots, Internet y hologramas ya se han inventado. Pero todas esas innovaciones se dan en el contexto del comunismo, el imperialismo y la confrontación con Occidente. El protagonista del juego es un soldado del KGB enviado a las Instalaciones 3826 para investigar. El mundo de Atomic Heart está dividido en distintas regiones, cada una con sus biomas definidos.
El combate dependerá de las zonas. En algunas tendremos que recurrir necesariamente a las armas, mientras que en otras tendremos más libertad. Y no será necesario ceñirnos a las armas de fuego. Casi todos nuestros enemigos serán los robots producidos por esas instalaciones. Aunque inicialmente fuesen creados para servir a la Unión Soviética, los robots también cuenta con un programa de combate que se activa en caso de guerra. Algo ha ocurrido en esas instalaciones que ha desencadenado la rebeldía de los robots. Y que nosotros deberemos averiguar.
Los últimos vídeos que ha lanzado Mundfish nos dan una idea del aspecto tan bizarro que tendrá Atomic Heart. En el primero («Zina atrapada en polímeros») podemos ver a una mujer atrapada en un tubo de agua. Y el segundo, que recuerda bastante más a BioShock, se titula «Televisión soviética en la Instalación 3826«. Atomic Heart contará con un apartado visual brillante, como podemos ver. Y también es de agradecer que Mundfish haya conseguido plasmar ese ambiente tan turbio y peligroso en el juego.