Los coches siempre ha sido una pasión que muchas personas no pueden disfrutar plenamente, si bien, las leyes de tráfico están para evitar desgracias y comprarse esos coches de ensueño resulta inviable. Fabricantes como Ferrari, Aston Martin o Pagani presentan coches que, con mucha suerte, llegaremos a ver en la calle, pero que siempre serán protagonistas de esos sueños en los que nos vemos pilotando una de estas joyas de la ingeniería. Tampoco hay que irse tan lejos, pues son muchos los coches que pueden gustar y pocos los que se pueden tener, siendo los principales argumentos que estos juegos suelen aportar.
Pero lejos de ser algo tan mundano, ser parte de una competición de élite también es parte del sueño de muchas personas. Emular a iconos del automovilismo, tanto de la historia como del presente, enfrentándose a ellos en las carreras más apasionantes en los vehículos más rápidos a través de los circuitos más técnicos y exigentes. Un mundo de iconos y leyendas, donde muchos desearían plasmar su nombre, si bien, el mero hecho de participar podría ser una recompensa suficiente.
El olor a goma quemada, el rugir de los motores y tener un catálogo de vehículos extenso y diverso, son aspectos que muchos desearían tener a su disposición y para ello estos juegos nos traen experiencias de todo tipo, ligadas al mundo del motor. Desde correr por las calles desafiando a la policía, a competir codo con codo con Fernando Alonso, si bien, los monoplazas no acaparan todo el protagonismo, en esta ocasión. Competir y triunfar, coleccionar y compartir, los juegos de conducción son una pasión llevada al consumidor.
Los candidatos al mejor juego de conducción del año son:
Forza Motorsport 6
Un año más llega una nueva entrega de Forza, siendo el turno de la propuesta original de Turn10 en un título que da la sensación de hacer honor a lo que debía haber sido su precedente. Un catálogo de vehículos extenso, variado y de una belleza incomparable, que permite llevar estas piezas de ingeniería a través de todo el mundo, en el mayor catálogo de circuitos visto en la saga.
Y es que son un buen número de entornos en los que se desempeñarán carreras con el mayor catálogo de vehículos de esta generación. Más de 400 vehículos serán protagonistas de carreras que incluyen hasta 24 competidores, con nuevas iniciativas, como las ligas, que sacarán la vena competitiva de los jugadores. Colecciona, diseña y pon a punto tu máquina, el mundo y la comunidad son tus rivales.
Además, manteniendo los 1080p y 60fps, Turn10 ha conseguido complacer a aquellos que buscaban nuevos desafíos, desafíos donde la lluvia ensalza la habilidad y pone a prueba los reflejos, si bien, la noche es parte de este espectáculo en algunas de las carreras de competiciones de resistencia más exigentes. Es precisamente por esto, por cumplir con las sugerencias comunitarias en un producto que mantiene su caracter ganador, con unas físicas y sensaciones realistas en una conducción permisiva, Forza Motorsport 6 es un candidato para ser el mejor juego de conducción de 2015.
Project CARS
Mucho tiempo se ha hecho esperar, uno de los proyectos más ambiciosos del género que partía de una propuesta autofinanciada por una comunidad de jugadores que ha llevado la competición hasta los hogares. Una propuesta muy diferente a lo que se suele entregar en otros juegos del género, la competición es el centro de una propuesta que aboga por un realismo mayor de lo convencional, incluyéndose entre los simuladores más exigentes y realistas del mercado, sobre todo, en consolas.
Aborda un modo carrera que nos sumergirá en la vida profesional de un piloto, desde los karts hasta la más alta competición, pasar por todas las disciplinas y ser reconocido como el mejor piloto de la historia. No es una propuesta para un fin de semana, es una larga carrera que nos llevará por un buen número de circuitos, en toda clase de condiciones metereológicas y horarios, exigiendo de cada uno la precisión que permitirá consagrarse como el mejor.
Técnicamente muy exigente, espectacular y completo, una propuesta que aboga por explotar un concepto que en consola es imposible de encontrar. Simulación, competición, espectacularidad y profundidad, un título que explota conceptos que otros títulos han obviado. Precisamente por este aspecto, Project CARS merece estar entre los candidatos a mejor juego de conducción.
F1 2015
No podía faltar a la cita el título procedente de la licencia de la competición más glamourosa y elitista, la Formula 1. Tras una larga espera por ver el primer título de la nueva generación, Codemasters ha puesto un título que, pese a que tiene carencias importantes, parece una sobresaliente aportación a la experiencia de conducir un monoplaza en la competición más famosa del mundo de la competición.
Si bien la pega que ofrece la ausencia de carrera es importante, Codemasters ha sabido trabajar en un título que aporta sensaciones muy interesantes, así como opciones ingeniosas, como es la inclusión de la radio para comunicarse con el muro y poder establecer cambios en la estrategia y estar debidamente informado. No obstante, todo esto no dejaría de ser algo secundario ante lo que es realmente importante, las sensaciones de estar dentro de ese monoplaza y llevarlo al límite.
F1 2015 es un título que ha conseguido esa sensación, en la que la conducción de ese monoplaza llega a un nivel de exigencia tal que incluso se ha dedicado un modo de juego en exclusiva a una visión realista de la competición. Un reto que pocos superarán con éxito, pues carente de ayudas y de ayudas visuales, desde la cámara del casco, nos traslada a las mismas sensaciones que los pilotos de Formula 1 tienen cada fin de semana que corren. Por esta propuesta que evoca un futuro prometedor, F1 2015 merece estar entre los candidatos a mejor juego de conducción.
MotoGP 15
Claro que no podemos olvidarnos de la otra competición por antonomasia, la que suprime dos ruedas y nos lleva a competir en las motos más rápidas del planeta. Claro que, en esta ocasión, MotoGP 15 no solo nos pone en la piel de un piloto que busca un lugar en la parrilla para demostrar su valía, también permite dar el salto a la gestión de una escudería que busca el mismo propósito, convertirse en un equipo campeón en la categoría reina, MotoGP.
Una propuesta interesante que apuesta por la diversidad, si bien, los clásicos modos de juego no desaparecen, se puede optar por encarnar a una de las estrellas como a nuestro propio piloto, conduciendo las motos de las diferentes categorías y fabricantes, atendiendo a una experiencia que puede requerir de gran cantidad de concentración para llevar bien la moto y evitar caernos.
Claro que, MotoGP 15 es el primero de la licencia en llegar a Xbox One, y con ello, en explotar este nuevo hardware dando un aspecto más elaborado a un producto que, en vista al futuro, progresa de forma muy adecuada, si bien, lo más importante es lo que aporta como juego. Por sus importantes novedades, como la inclusión de ese modo de juego que permite gestionar nuestro equipo, dando profundidad a la experiencia, MotoGP 15 también requiere nuestra atención como posible mejor juego de conducción del año.
Need for Speed
Una licencia como Need for Speed tiene siempre la atención del mercado, si bien, desde los años 90 ha mantenido una dinámica que solamente se ha visto truncada en los últimos años. Tras una pausa, la nueva propuesta de Ghost Games tira del pasado para tomar referencias que muchos añoran, como los Underground o el primer Most Wanted, creando una aventura mezclada con escenas cinematográficas que ambientan la propuesta.
Claro que este aspecto es la base de uno de los elementos más espectaculares que se han visto este año, su apartado técnico luce de forma efectiva y espectacular intentando evitar transiciones entre secuencias de video real con el gameplay. El regreso del tunning y las tramas conspiratorias parece ser la base de un título que podría alcanzar un éxito casi inesperado, si bien, lo que más importa en Need for Speed es demostrar que somos los más hábiles al volante, tanto por la velocidad como por los derrapes.
Ni Ken Block, ni la policía, ni ningún rival de la comunidad de jugadores podrá detenernos en Need for Speed. Una propuesta que intenta ensalzar una licencia venida a menos con gran cantidad de aciertos, aunque sobre todo, porque se mantiene como única novedad en el género de conducción arcade. Por plantear una idea que retoma el interés del jugador, incluso puede llegar a engancharlo por días, Need for Speed recupera su posición como candidato a mejor juego de conducción.
De este modo, tanto dentro como fuera de los circuitos, este año ha tenido grandes exponentes del género de la conducción, si bien, parece que los arcade han lucido por su ausencia. Un año repleto de competición, exigiendo lo mejor de cada uno para llegar al éxito, esperando que la fórmula permita a estos candidatos hacerse con el preciado galardón de ser el “Mejor Juego de Conducción” de 2015 para Xbox One.