La UFC es la mayor empresa en lo que a artes marciales mixtas se refiere, un campeonato que mueve miles de millones de dólares cada año y que no para de crecer en todo el mundo. Electronic Arts lo sabe y, tras la debacle de THQ, se hizo con la licencia oficial.
EA Sports UFC tenía todas las papeletas de ser el juego de artes marciales mixtas definitivo, contaba con un estudio nuevo para aportarle aire fresco y una nueva generación de consolas con potencia suficiente para hacer un octógono hiperrealista. El resultado no alcanza a lo esperado, aunque estamos sin duda ante un buen producto con un gran potencial para el futuro.
COMO PANES
El Ignite Engine que presentó hace ya más de un año EA está dando unos resultados francamente espectaculares. Los modelados de los más de un centenar de luchadores –repartidos por categorías de peso- son sensacionales, desde la musculatura hasta el sudor que recorre su cuerpo durante el combate y salta con cada golpe. También están presentes los moratones y heridas, que se producirán al encajar varios golpes en la misma zona según avance el combate.
Como ya viene siendo habitual en los juegos de lucha, los cuatro botones frontales del mando controlan las cuatro extremidades de nuestro personaje, además de contar con la posibilidad de esquivar y bloquear en los gatillos. El surtido de tortas que tenemos a nuestra disposición es razonable teniendo en cuenta que se trata de un deporte real con golpes ya definidos. Además de los golpes básicos apretando el botón, podemos realizar variaciones según la dirección del stick y realizar golpes técnicos con los modificadores. Estos serán mucho más duros y vistosos, pero también más predecibles por nuestros rivales.
Se trata de un sistema relativamente técnico, en el que un paso en falso puede suponer que caigas a la lona inconsciente. Un buen ejemplo de ello es el sistema de bloqueo. Manteniendo el RT bloquearás los golpes al cuerpo y a la cabeza, pero no absorberás la totalidad del daño. En cambio, si al mismo tiempo presionas uno de los dos puñetazos o una de las dos patadas, cubrirás la cabeza o el torso respectivamente. Así podemos evitar sufrir daño alguno, con el riesgo de equivocarnos y dejar una parte del cuerpo completamente desprotegida, abierta de par en par para recibir un directo. Pero la cosa se complica más aún si introducimos las paradas, que vienen a ser lo mismo que lo anterior pero haciéndolo justo cuando nos llegue el golpe. Desviaremos completamente el golpe y tendremos opción de contratacar, haciendo más daño del habitual.
En general estamos ante un sistema que funciona correctamente, simulando muy bien el contacto entre luchadores –la vibración de los gatillos en One le da un plus de inmersión-. Sin embargo, cuando estamos combatiendo y ambos personajes despliegan una batería de golpes al mismo tiempo, en ocasiones parecen no encajar correctamente y es como si sus puños y patadas resbalaran por el cuerpo del contrario. No es nada escandaloso, pero empaña en cierto modo la rotundidad del deporte.
Finalmente, en cuanto a los cierres, sumisiones y combate en el suelo; hay que indicar que se han simplificado las mecánicas. Un cambio a mejor que es de agradecer. Aún con todo, aprender los controles no será tarea fácil, y más si no eres un aficionado a este deporte. Yo animo a que no os deis por vencidos, puesto que tras unos cuantos combates pillaréis rápidamente el tranquillo a un sistema de combate que sabe recompensar la fidelidad.
CINTURÓN NEGRO
EA Sports UFC cuenta con varios modos de juego en los que zurrar y ser zurrado. Empezaremos por el más típico y el que menos convence de todos, el modo carrera. Nuestro púgil personalizado empezará en el reality “The Ultimate Fighter”, primero tendremos que alzarnos con la victoria y llegar a la UFC. A partir de ahí nuestro único camino es ascender y llegar a ser uno de los mejores en el octógono. Comprar y asignar movimientos, así como subir atributos al personaje y seleccionar habilidades es entretenido y da la sensación de estar mejorando con cada combate.
El problema es que entre combate y combate hay una sección de entrenamiento, consistente en tres pruebas que se hacen cansinas y repetitivas. Lo peor de todo es que no querrás saltártelo, puesto que será una de tus principales fuentes de experiencia. Por tanto, verás el modo carrera como una espiral de combate y entrenamiento que no está a la altura de las expectativas.
Debemos hacer mención a la tecnología Gameface. Con sólo subir una foto de frente y otra de perfil a la página de EA, se creará un personaje a nuestra imagen y semejanza. Todavía tiene que mejorar y podrían haberlo hecho incluso con Kinect, pero es un detalle que se agradece una barbaridad.
Seguimos con el combate rápido, el nombre lo dice todo. Aquí podremos jugar con nuestros amigos o familiares en multijugador local.
En cuanto los modos online, está la partida “rápida” y el modo Campeonato. A la primera la pongo compillas porque es de todo menos rápida. Después de hacer el matchmaking y elegir personaje, nos damos cuenta de que no se pueden echar revanchas. Por lo que toca hacer todo el proceso de nuevo. Es especialmente sangrante en un deporte en el que la partida puede acabar a los diez segundos. El modo campeonato es en esencia el modo temporadas de FIFA adaptado a la UFC. Combatiremos para ganar puntos y subir de división –funciona por cinturones- o tendremos la opción de competir en torneos. Lo curioso es que el proceso de emparejamiento y las esperas son mucho menores que en partida rápida. Por último está Rivalidades, para jugar con nuestros amigos online.
La única pega que se le puede achacar al online es que los luchadores están muy mal balanceados, de tal forma que todo el mundo acaba con los más fuertes. Se entiende que unos sean mejores que otros, pero la brecha es tan grande que no deja lugar a opciones alternativas.
También tenemos otros modos menores como los retos –que bien podrían haber sido incluidos en el modo carrear a modo de verdadero entrenamiento- o el modo Spotlight, donde ver los momentos estelares de la comunidad.
AND IT’S ALL OVER! JUST LIKE THAT.
Todas las voces del título están en perfecto inglés, algo por una parte lógico dado que la mayor parte de audiencia es angloparlante. Me hubiese parecido un crimen doblar a los carismáticos comentaristas originales, ya que hacen una labor brillante. No obstante, la inclusión de subtítulos en las repeticiones –durante el combate entiendo que nadie les va a prestar atención- hubiesen sido bienvenidas para quienes no dominen el idioma. Eso sí, los textos están todos completamente en castellano.
La banda sonora está compuesta por temas de grupos como Imagine Dragons o AFI, y cumple su papel sobradamente.
Como último apunte, quería criticar la política de micropagos que EA ha implementado en este UFC. Ya desde el inicio están disponibles Bruce Lee –precisamente uno de los mayores reclamos- y Royce Gracie, con una estadística de 99 en sumisión, la más alta del juego. Pero lo mejor es que no sólo hay un Bruce Lee, sino uno de peso gallo, pluma, ligero y wélter. Y habrá que pasar por caja por cada uno de ellos.
EA Sports UFC es un título que hará las delicias de los fans de las artes marciales mixtas. Quizás tenga sus fallos, pero no deja de ser un gran juego para disfrutar en solitario o con amigos. La brutalidad de los combates se plasma fielmente a través de un sistema de combate técnico y complejo, que te atrapará muchas horas si quieres ser un verdadero campeón.
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Lo bueno
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- Apartado gráfico realista
- Más de un centenar de luchadores
- Sistema de combate técnico y gratificante
- El uso de Gameface y la evolución del personaje
- El modo Campeonato
- Comentarios carismáticos y banda sonora a la altura
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Lo malo
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- Modo Carrera soporífero
- Personajes desbalanceados
- Ocasiones en las que los golpes no parecen encajar
- Matchmaking y tiempos de espera eternos en «Partida rápida»
- Micropagos
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