El desarrollo independiente no solo es enormemente enriquecedor para el mundo de los videojuegos por traernos todo tipo de propuestas originales e interesantes, sino por habernos llegado a traer auténticas joyas que en muchas ocasiones se encuentran varios escalones por encima de las grandes producciones en cuanto a calidad, y además esto ocurre cada vez de forma más frecuente. Ahora bien, es normal que estas propuestas, que por su propia definición son arriesgadas, no siempre resulten productos redondos. Y del mismo modo es fácil encontrar ese tipo de obras con un encanto especial que, a pesar de tener sus carencias y fallos, son capaces de ganarse un hueco en el corazón de algunos jugadores. Albedo Eyes from Outer Space es uno de esos.
Esencia de serie B
Merge Games, los mismos de Funk of Titans o Gone Home, y Z4G0, nos traen a Xbox One este título después de haber debutado hace ya casi un año en PC. Albedo Eyes from Outer Space es un juego realizado bajo la premisa de combinar puzzles, con disparos y algo terror mezclado con humor. Pero sobre todo un juego basado en la nostalgia causada por las clásicas películas de ciencia ficción de serie B que tuvieron su momento de esplendor durante las décadas de los 50 y 60. Albedo pone empeño en asemejarse a estas estéticamente, pero es, en cierta manera, un juego de serie B (si existiese tal cosa), tanto por dentro como por fuera, ya sea para bien o para mal.
Desde su argumento, Albedo está impregnado de tópicos y clichés de las películas de ciencia ficción y terror de la más baja calaña. Comenzaremos poniéndonos en la piel del vigilante de seguridad de un laboratorio en el que se llevan a cabo estrafalarios experimentos, que nos comenzarán a interesar más a partir de que una aparatosa explosión tenga lugar y nos veamos envueltos en un edificio medio derrumbado en el que estamos atrapados con todo tipo de repulsivos enemigos alienígenas. Sin embargo, argumentalmente termina por no resultar demasiado interesante, quizás sea porque le habría sentado mejor un desarrollo más ágil, más propio de un título de acción que de uno de puzles, sobre todo porque se apoya más en los momentos de tensión y las sorpresas que en el suspense. Eso sí, tendremos alguna que otra sorpresa que hará las delicias de más de uno y que dotan al juego de sus momentos más brillantes.
Donde sí que gana enteros en cambio es en su ambientación perfectamente grotesca, y probablemente uno de los puntos más cuidados de Albedo. Se nota que se ha puesto gran parte del esfuerzo en que el juego presente en todo momento esa estética y que transmita al jugador unas sensaciones lo más parecidas posibles a los film de los que hemos hablado. El diseño de los escenarios está muy conseguido, casi siempre en penumbra y con esa sensación claustrofóbica de estar atrapados entre cuatro paredes, además todo tiene siempre ese aspecto retrofuturista tan característico. Pero lo mejor sin duda son los diseños de los enemigos, con un aspecto totalmente surrealista, y con los ojos como elemento puramente central, incluso obsesivo. El sonido por su parte también acompaña y contribuye correctamente a la ambientación, con los efectos apropiados y una voz en off, la de nuestro protagonista, que nos va a acompañando en todo momento.
Pero como hemos dicho, Albedo es serie B, para lo bueno y para lo malo. Y en su aspecto técnico denota una especie de sensación de dejadez, como de que se podría haber mejorado ciertos elementos, pero se han preferido dejar así. De esta manera, mientras que nos encontramos con ciertas texturas muy buenas, también hay otros elementos que dejan que desear. Los juegos de luces, por ejemplo, pueden resultar molestos, y a veces es innecesariamente complicado distinguir los objetos. Es posible que algunos encuentren encanto en estas sensaciones, pero me parece que se podrían haber buscado de otras formas y evitar esa confusión que en ocasiones podemos tener en pantalla.
Puzles y algunos disparos
La mecánica básica de Albedo será la de ir superando poco a poco cada zona a base de puzles. Para ello nos encontraremos a medio camino entre un point and click clásico que nos obliga a inspeccionar cada detalle de los escenarios, y rompecabezas que en ocasiones habrá que realizar sobre la marcha con los objetos que vayamos encontrando, y en otras serán una especie de minijuego. Por otro lado también contaremos con algunos momentos, pocos, de acción, en los que deberemos disparar o golpear a los alienígenas con alguna de las armas que tengamos disponible, desde un destornillador a una típica escopeta. El problema aquí es que ambas mecánicas no casan demasiado bien, y más aún, no se ha puesto ningún empeño en que así sea. Lo que hace de Albedo una experiencia bastante extraña y particular.
En cualquier caso, ni los puzles ni los disparos se encuentran muy bien implementados. Partiendo de un sistema de control innecesariamente engorroso y nada intuitivo, desde la interactividad con los objetos a la gestión del inventario. Pero además el planteamiento de algunos puzles no es muy inspirado. En ocasiones enrevesados en exceso, otras veces con poco sentido, aunque no todos son malos. Mientras que los momentos de acción son tan anecdóticos que ni siquiera llegan a resultar reconfortantes, más allá de que nos permiten descansar durante algunos momentos de los sesudos puzles.
Por otra parte, tenemos ante nosotros una experiencia exigente, al menos si no lo jugamos en la dificultad más sencilla, en la que se nos dan demasiadas pistas y los enemigos son demasiado inútiles. Con algunos puzles reconfortantes que superar y algún que otro momento de tensión en los que desenvolvernos a tiros. Eso sí, una experiencia que no se nos irá más allá de las 8-10 horas de juego, prácticamente con nula rejugabilidad. Por último, destacar también que aunque al iniciar el juego no aparece en español, podemos seleccionar nuestro idioma a través de las opciones, para poder disfrutar de una traducción y subtítulos muy correctos. Obviamente no está doblado, pero ni falta que hace, la voz en inglés es bastante buena y efectiva.
Conclusión
Son estos graves errores de diseño, los que hacen que las buenas intenciones de Albedo queden en el aire. Tenemos algunas ideas buenas y una muy lograda ambientación, pero algo falla a la hora de implementarlas y crear un conjunto sólido. Claro que, tampoco podemos pedir mucho más de un estudio que está formado por una única persona, Fabrizio Zagaglia. Albedo es justamente eso, una obra de autor. Un título alejado de lo habitual, una especie de experimento que, a pesar de sus defectos, también tiene sus virtudes. Y es que a pesar de todo, como comentaba al principio, Albedo Eyes from Outer Space es uno de esos juegos que guardan en sí mismos ese poquito de encanto y que resultará probablemente justo lo que algunos jugadores podrían ir buscando. Una apuesta sin duda arriesgada, que va dirigida a un jugador muy concreto, y realizada con mucho cariño, pero por desgracia, con unas ideas que no están muy bien llevadas a cabo; más allá de sí saber apelar muy bien a la nostalgia, el mejor acierto junto a su puesta en escena.