Mario Kart siempre ha sido el gran dominador del género de las carreras arcade sobre karts, pero hubo un tiempo en que la competencia para el fontanero italiano fue más que real. Concretamente fue hace veinte años cuando Naughty Dog dio vida a uno de los mejores juegos de karts de todos los tiempos. Su nombre era Crash Team Racing y ahora, dos décadas después, está de vuelta de la mano de Activision y Beenox con mejor apariencia que nunca, sí, pero también con multitud de nuevas modalidades de juego y con todo tipo de mejoras que le convierten en un auténtico imprescindible para este verano. Te dejamos con nuestro completo análisis.
Fórmula intacta
La jugabilidad del original se ha mantenido intacta para una experiencia fantástica
Si algo hace que Crash Team Racing Nitro-Fueled, por encima de todos sus nuevos modos de juego y opciones, sea un videojuego fabuloso es haber mantenido la fórmula y la esencia de la entrega original desarrollada por Naughty Dog. Y es que esto es algo de lo que uno se da cuenta nada más iniciar la primera de las carreras. A pesar del renovado aspecto que hace lucir algunos de los circuitos casi como pistas completamente nuevas, lo que más llama la atención es que a nivel jugable todo se siente como lo hacía hace veinte años. Y eso es tremendamente positivo.
Lo es porque el Crash Team Racing original sigue siendo perfectamente jugable y disfrutable a día de hoy gracias a una jugabilidad pulida y divertidísima. La clave es su sencillez y accesibilidad, aunque para ser siempre los vencedores deberemos dominar los aspectos más complejos del juego. Nos referimos a la superaceleración en la salida pulsando el botón de acelerar justo en el momento en que se enciende el último semáforo, a conocer la ubicación de los atajos que nos otorgan ventajas fundamentales, al correcto uso del derrape, que nos permite obtener tres pequeños turbos en cada curva y también a los saltos (cuanto más alto lleguemos más velocidad extra conseguiremos al aterrizar).
Todas ellas son mecánicas del juego original que se han respetado en Nitro-Fueled y que hacen, por lo tanto, que la jugabilidad de esta revisión de Crash Team Racing sea tan perfecta como ya lo era hace veinte años. No había que modificar nada en este sentido y Beenox ha acertado. En cuanto al gameplay también cabe tener en cuenta que como en cualquier juego de karts que se precie, Nitro-Fueled cuenta con ítems que podemos lanzar a nuestros oponentes durante las carreras. También los objetos han sido respetados y no se ha optado por añadir nuevos ítems que varíen la fórmula del juego original, lo que desde nuestro punto de vista es un acierto.
Más Crash que nunca
Online, multijugador local, carreras, peleas. CTR tiene para todos los gustos
Más allá del tino que ha demostrado Beenox conservando los puntos fuertes del Crash Team Racing original, Nitro-Fueled cuenta con un contenido muy superior en cantidad y calidad con respecto a la obra de Naughty Dog, por lo que estamos ante otro aspecto a celebrar. El Modo Aventura se ha mantenido esencialmente como el visto en 1999, con todo tipo de carreras y pruebas de estilos muy diversos que nos mantendrán ocupado una decena de horas y que nos permitirán desbloquear a muchos de los personajes que después podremos escoger en el resto de modalidades de juego. La trama de este modo cumple con su cometido: tras haber derrotado a N. Cortex, Crash se está relajando, pero un extraterrestre llamado Nitros Oxide aparece en la Tierra para demostrar que es el más rápido de toda la galaxia. Si le ganamos se marchará para siempre, pero si caemos derrotados todos los seres del planeta se verán obligados a ser sus esclavos.
Ripper Roo, Papu Papu, Pinstripe o el propio Oxide son algunos de los personajes que podemos desbloquear mediante el Modo Aventura, tal y como ocurría en la obra original (en la que, por cierto, Nitros Oxide nunca fue un personaje jugable). Sin embargo, las verdaderas novedades llegan en el resto de modalidades de juego. Y es que en el apartado de juego local (que sigue permitiendo la pantalla partida para hasta cuatro jugadores) se han incorporado todo tipo de añadidos y mejoras. Además de las carreras rápidas y el modo contrarreloj, ahora tenemos las carreras en las que hemos de ganar además de conseguir cristales, insignias y todo tipo de extras que pondrán todavía más desafío a cada prueba.
Los modos más clásicos y queridos, no obstante, son el modo torneo y el modo pelea. El modo torneo nos permite jugar a packs de cuatro circuitos en los que vamos acumulando puntos dependiendo de nuestra clasificación en las carreras, mientras que en el modo pelea podemos optar por diferentes modalidades como lanzarnos ítems hasta que perdamos todas las vidas, capturar la bandera u otras modalidades. Ambas son opciones perfectas para jugar en cooperativo local con amigos y echar un buen rato. Lo mejor de ello es que a los circuitos y pistas clásicas de ambos modos se han añadido otros tantos de Crash Nitro Kart, la secuela de Crash Team Racing.
Así las cosas, si en el CTR original contábamos con cuatro torneos con cuatro circuitos cada uno, en Nitro-Fueled se han añadido otros tres con otros cuatro circuitos. Lo mismo ocurre con el modo pelea, de modo que Activision y Beenox prácticamente han doblado el contenido. El roster de personajes seleccionables ha sufrido un aumento similar al de las pistas, pero con la diferencia de que la mayoría de los personajes han de desbloquearse. Además de los desbloqueables a través del modo aventura, tenemos otros tantos con los que deberemos hacernos a través de Boxes, un nuevo apartado del título que pasaremos a explicar más adelante. Finalmente también tenemos a Penta Penguin, que puede desbloquearse haciendo uso del mismo truco con el que se tenía acceso a él en el videojuego original.
Novedades en el asfalto
La personalización de los personajes y los karts es otra de las novedades del juego
Las mayores novedades de Crash Team Racing Nitro-Fueled, sin embargo, todavía no han sido comentadas. La más relevante es la inclusión de un modo multijugador online que nos permite hacer lo mismo que podemos hacer con amigos en nuestra casa pero con usuarios de todo el mundo. No es ninguna revolución dentro del género, pero sí es un paso estratosférico para un videojuego que data de hace dos décadas y que por fin permite disputar carreras entre jugadores de todo el globo. La experiencia de jugar a Crash Team Racing online es única y nosotros ya estamos deseando que se unan muchos más usuarios para que todo sea incluso más fluido y divertido. Por ahora podemos crear nuestra propia sesión privada para jugar con amigos online o unirnos a carreras con otros usuarios. Sin embargo, al menos por ahora, la opción de poder disputar torneos enteros deberá esperar. Ojalá Beenox apueste por introducir una característica así en el futuro próximo.
Otra de las grandes aportaciones que han hecho Activision y Beenox a la obra original de Naughty Dog es la sección Boxes. En ella podemos conseguir personajes jugables, skins para los corredores y también karts, stickers y decoraciones para los vehículos. La particularidad de esta modalidad es que todo ello se desbloquea con monedas Wumpa, el crédito del juego que conseguimos al hacernos con victorias en los distintos modos de juego o al completar objetivos en el modo aventura. Cada determinado periodo de tiempo cambian los contenidos disponibles para dotar al apartado Boxes de un incentivo de urgencia y temporalidad muy interesante.
El resto de skins de los personajes se desbloquean de una forma diferente: a base de victorias. Así las cosas, consiguiendo una, cinco y veinticinco victorias respectivamente, conseguiremos apariencias alternativas para Crash, Coco, Polar y el resto de personajes del videojuego. Antes de comenzar cada carrera, en este sentido, no solo podremos seleccionar al personaje que más nos guste, sino que también tendremos la posibilidad de elegir skin, kart y de decorar el vehículo como prefiramos. Se trata tan solo de modificaciones estéticas, pero no deja de ser un añadido que aporta profundidad.
Al tratarse de un remake, el cambio más importante de Crash Team Racing Nitro-Fueled, no obstante, es el experimentado a nivel visual. Los modelados de los personajes han sido mejorados de una forma indescriptible, así como el nivel de detalle de los circuitos. Algunos de ellos son casi irreconocibles de la enorme mejora que han sufrido. Tampoco se queda atrás un cuidado redoblaje al castellano (con algunas de las voces que ya disfrutamos en Crash Bandicoot N. Sane Trilogy) y una fabulosa remasterización de la banda sonora del título, que acompaña a la perfección y que tiene temas icónicos de la franquicia del marsupial.
Crash Team Racing Nitro-Fueled es todo lo que podíamos pedir de una versión mejorada del videojuego de karts que llegó originalmente en 1999. La obra de Naughty Dog era casi perfecta ya cuando se lanzó a finales del pasado siglo, pero Beenox y Activision han conseguido traerla a los tiempos actuales respetando todas sus señas de identidad y añadiendo el contenido y los modos de juego justos y necesarios para hacer de esta obra de carreras arcade un título absolutamente imprescindible, y no solo para los fans del género o el personaje. Nitro-Fueled tiene tantas cosas que hacer que no nos aburriremos de él ni aunque le dediquemos un centenar de horas, pues cuando terminemos el modo aventura y desbloqueemos a todos los personajes seguiremos teniendo la opción de jugar con amigos en nuestra propia casa o con usuarios de todo el mundo gracias al online.
