Lejos ha quedado ya aquel 21 de mayo de 2013 en el que Microsoft nos anunció su nueva consola de sobremesa. En aquella fecha, los de Redmond nos presentaban a su vez Project Spark como parte del catálogo para su nueva y flamante Xbox One, un título exclusivo poco convencional, algo que apenas puede llamarse un juego, sino más bien una herramienta con la que crear (y jugar) miles de juegos. Año y medio después, y tras una larga fase beta que se ha prolongado desde principios de 2014 hasta unos pocos días antes de su lanzamiento, Project Spark por fin ha llegado a las tres plataformas actuales de Microsoft: Xbox One, Xbox 360 y Windows 8.
Es importante saber que Project Spark no sólo es compatible con las tres plataformas, sino que todo el contenido creado en una de ellas puede ser jugado o editado en las otras dos, de manera que nuestros amigos no necesitarán tener la misma plataforma que nosotros para jugar a nuestras creaciones, o para echarnos una mano en mejorar nuestros juegos.
Obviamente, debido a sus características, Project Spark es un título que se compone de dos grandes secciones. Una de ellas, a priori la más interesante, es la de creación, dejando el otro hueco a la parte en la que podremos jugar tanto a nuestros juegos como a los creados por otras personas. Esto convierte a Project Spark en una suerte de motor para juegos y a su vez en una colección casi infinita de juegos.
Spark, ponme eso aquí
Aunque podamos jugar a innumerables juegos (una cantidad limitada sólo por la imaginación de los jugadores), donde de verdad se aprecia la jugabilidad de Project Spark es en la parte de creación de juegos, más que nada porque los juegos creados por los usuarios tienen cada uno su propia jugabilidad.
Y sin duda es el apartado más complejo del título.
Por suerte el modo creación cuenta con un tutorial básico (y se supone que hay tutoriales más avanzados en camino) que nos muestra las bases del creador, y entre enseñarnos a colocar objetos, editar el terreno y crear cerebros, vamos conociendo las bases del control. Desgraciadamente éstos pueden ser poco intuitivos y, por lo menos al principio, es bastante normal realizar acciones por error debido al poco acierto a la hora de elegir algunas acciones para determinados botones.
Aun así, una vez uno se medio-acostumbra a la extrañeza de los controles, editar el terreno resulta bastante sencillo. Disponemos de varias herramientas para crear terreno y podemos seleccionar la altura, tamaño, forma e intensidad de la herramienta. RT nos servirá para añadir, mientras que RB hará la función contraria, así que resulta bastante sencillo. Poder ajustar el tamaño de la herramienta de edición de terreno nos permite crear grandes superficies en poco tiempo o modelarlas con precisión. Sin embargo no es oro todo lo que reluce. El editor de terrenos tiene algunos defectos, como que la herramienta para crear ríos únicamente es capaz de crearlos al nivel del mar, por lo que si queremos crear un río en un terreno elevado, sencillamente no podremos.
El terreno no es lo único editable. De hecho es sólo la punta del iceberg. Project Spark cuenta con un amplio surtido de elementos que podemos añadir a nuestra creación, tanto como simple atrezo (incluso elementos del paisaje como rocas y plantas) o en forma de personajes, ya sean los personajes de los jugadores, enemigos o habitantes del mundo que estemos creando.
Todos estos elementos son editables en mayor o menor medida, pasando por distintas opciones en la ropa que llevan los personajes, a simplemente algunos cambios de color en piezas como las armas o elementos de decoración. Desgraciadamente, en el caso de las prendas de ropa para los personajes, buena parte de estas opciones viene bloqueadas y bien o hay que comprarlas (recordemos que se trata de un juego free to play) o tendremos que desbloquearlas subiendo de nivel al personaje en la campaña pregenerada que trae Project Spark. Y obviamente esto lastra bastante las opciones de creación. Además de editar los elementos podemos combinarlos como si fuesen piezas de LEGO, y así crear elementos que no estén entre las opciones. ¿Qué no tienes un avión disponible? Pues en cuestión de minutos te montas uno con cuatro piezas y algo de imaginación.
¡Cereeebrooos!
Pero Project Spark no sólo nos permite editar visualmente los elementos que coloquemos en pantalla. También podemos editar los cerebros de todo lo que pongamos, y aquí es donde el juego se vuelve enorme. Gracias a la creación de cerebros podemos elegir cómo controlar a nuestro personaje, cómo reaccionarán los enemigos, qué ocurrirá al llegar a determinado lugar, etc. Las opciones son casi infinitas, y más cuando además de dejarte editar los cerebros, Project Spark te permite editar parámetros de los objetos tales como las físicas, el daño que hacen, su resistencia, etc. Eso sí, todo esto no es algo que se pueda hacer a la ligera. Conseguir crear el cerebro deseado para que lleve a cabo las acciones necesarias puede ser ardua tarea, sobre todo para aquellos que no tengan ni idea de programación. Todo consiste en crear diferentes combinaciones con las opciones de los cerebros e ir probando para ver si se consigue el efecto deseado. Cuando consigues que el juego haga lo que quieres, la sensación es muy gratificante. Pero cuando pruebas una y otra vez, y no das con la manera de hacerlo, la cosa puede parecer muy frustrante. Por suerte hay una galería bastante completa de cerebros pregenerados.
Además de la galería de cerebros previamente creados por el equipo de desarrollo y de la galería de elementos disponible, existe la posibilidad de tomar prestadas las creaciones de otros usuarios. Gracias a la opción remezclar juego podemos coger conjuntos de elementos o cerebros que hayan creado otros jugadores, y aplicarlos directamente en nuestro juego o incluso editarlos a nuestro gusto. ¿Qué te gusta todo el cerebro del personaje principal pero en vez de en tercera persona quieres que sea en primera persona? Pues editas sólo la parte que hace referencia a la cámara y listo. Lo único difícil en esto es encontrar a alguien que lo haya hecho antes que tú.
Otro punto muy interesante de Project Spark es la utilización de Kinect. Y no hablamos de la posibilidad de controlar el cursor con las manos. Hablamos de algo mucho más interesante como convertir el periférico en una especie de sistema de motion capture. Gracias a Kinect podemos capturar nuestros movimientos y aplicárselos a un personaje, de manera que este imitará nuestra forma de movernos. ¿Necesitas que el protagonista salte como un mono? Pues haz un poco el tonto delante de Kinect y ya sólo queda aplicárselo al personaje. Y no sólo tenemos la opción de hacer captura de movimiento. También podemos grabar nuestra voz, o la de cualquiera, para crear diálogos. Como si estuviésemos en un estudio profesional de videojuegos.
Sin embargo se echa de menos algún sistema para importar texturas, algo que resultaría fácil de usar ahora que Xbox One ya tiene Media Player e importar imágenes a la consola no debería ser muy difícil. Por lo tanto el juego sigue dependiendo de las texturas ya existentes, igual que con los modelados. Aunque por suerte esta carencia se puede suplir más o menos gracias a la posibilidad de unir elementos antes mencionada.
A pesar de todas las bondades de su jugabilidad, y por encima de los defectillos y carencias del título, hay un aspecto que ensombrece mucho lo fantástico que es Project Spark. Como ya hemos dicho se trata de un título free to play, pero la parte gratuita viene a ser bastante escasa, incluso si tienes la versión física con el Starter Pack. Prácticamente cualquier elemento interesante para colocar tiene que ser comprado previamente, y los precios tampoco son baratos. Obviamente esto lastra muchísimo las opciones de creación, algo que no le hace ningún favor al juego.
¡Que todo brille!
Project Spark corre a los ansiados 1080p, pero a unos 30 cuadros por segundo bastante poco estables. Es más, dependiendo del tipo de cámara que se elija para los juegos, esta inestabilidad en el ratio de cuadros por segundo se hace más o menos evidente, llegando a pegar tirones bastante serios. Y no sólo los cuadros por segundo son inestables, sino que el propio juego es muy inestable, siendo bastante habitual que el juego se cuelgue y nos devuelva a Inicio, o que directamente tengamos que reiniciar la consola.
Y aun con todo, Project Spark es un título que entra por los ojos. Visualmente llama mucho la atención, sobre todo porque puede llegar a ser muy colorido. Además tiene un estilo gráfico muy característico, demasiado incluso. A la hora de crear juegos nos encontramos con que la mayor parte de los elementos disponibles están enfocados a la creación de juegos de fantasía. Es cierto que hay elementos de ciencia ficción, pero no están disponibles de manera gratuita y comparados con los demás son realmente escasos. Y ya no hablemos de crear juegos ambientados en una época actual, para la cual las opciones son totalmente inexistentes. Además se trata de un estilo poco realista, lo cual imposibilita la creación de juegos de corte más serio.
Realmente el diseño es atractivo, pero encorseta mucho la capacidad artística del jugador, y más (tal y como hemos mencionado antes) cuando no hay posibilidad alguna de crear modelados desde cero.
Suena como a chispitas
Al igual que con el resto del juego, Project Spark nos ofrece muchas opciones en cuanto al sonido se refiere. Disponemos de una gran cantidad de efectos sonoros y diferentes pistas de música para añadir al juego. La pega, una vez más, es el enfoque hacia la fantasía que tiene Project Spark.
Sin embargo, aunque la calidad del audio puede que no resulte muy buena, gracias a la opción de grabar diálogos, en teoría, podría ser posible introducir nuevas pistas de música y nuevos efectos sonoros al juego, lo cual convertiría al apartado sonoro en el único que permitiría crear cosas desde cero al 100%.
Un mundo de juegos
Pero el creador de juegos no es lo único que ofrece Project Spark. Faltaría más. Jugar a las creaciones de otros usuarios puede ser aliciente suficiente para descargar Project Spark, sobre todo para aquellos que se vean incapaces de llegar a manejarse minimamente en el editor de juegos.
Ya hay auténticas maravillas, como la réplica de Limbo, el comienzo de Skyrim o incluso el teaser jugable de Silent Hills, ese que sólo está disponible para la competencia. ¿Qué no tienes una PlayStation 4? Project Spark es la solución. ¡Y eso cuando el juego lleva sólo dos semanas en el mercado! Esperad a ver qué hace la gente con tiempo y dedicación (y una buna cantidad de dinero gastada en elementos).
Definitivamente, determinar si Project Spark merece la pena o no depende mucho del uso que se le vaya a dar al juego, de si quieres jugar o crear, y en caso de que seas de estos últimos dependerá de la paciencia y la maña que tengas, y del tamaño de tu cartera.
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Lo bueno
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- Total libertad para crear
- El sistema de cerebros
- Jugar a las creaciones de otros
- Se puede colaborar online con amigos
- Captura de movimiento con Kinect
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Lo malo
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- El sistema free to play
- El juego es muy inestable
- El diseño artístico encorseta mucho
- Es muy difícil lograr buenos resultados
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