Esta semana se ha puesto a la venta uno de los baluartes de los juegos indie con estética retro que están triunfando en los últimos tiempos, y que junto Shovel Knight, llega para hacer las delicias de todos los amantes a juegos como Ghosts’n Goblins o Castlevania. Descubre todo lo que nos va a ofrecer en nuestro Análisis de Rogue Legacy.
Un mundo con infinitas posibilidades
El juego llega con una premisa a simple vista sencilla, explorar y acabar con los jefes de las 4 zonas que componen el mundo de Rogue Legacy. Comenzando en el Castillo Hamson deberemos explorar todas sus salas y avanzar hasta descubrir la Tierra de las Tinieblas, el Bosque de Abkhazia y La Maya. La historia del juego la verdad es que no tiene casi ningún peso, nos pone en la piel de un heredero al trono que quiere convertirse en rey demostrando su valía, a la vez que venga al antiguo monarca.
Un jugador muy hábil seguramente podría pasarse el título en muy poco tiempo, pero la mayoría de los mortales tendremos que dedicar bastantes horas para conseguir completar todas las zonas. Una de las razones es que Rogue Legacy genera todos los escenarios de manera aleatoria cada vez que comenzamos la partida. De este modo nunca sabremos que nos espera en la siguiente sala o donde se encuentran los jefes. Cada vez que nos adentremos en el Castillo de Hamson deberemos empezar a explorar sus docenas de salas, hasta que tarde o temprano descubramos la habitación donde está el jefe. Algo que hará diferente cada partida, no solo por la disposición de las salas sino también por la dificultad, algunas veces nos podemos encontrar con una serie de salas relativamente sencillas, en las que podremos conseguir monedas fácilmente y otras veces moriremos al minuto de haber entrado en el castillo.
Un digno heredero
Como podéis suponer la muerte será una pieza fundamental en Rogue Legacy, ya que muchas veces duraremos menos de 5 minutos en una partida y nos tocará volver a empezar. Y es ahí donde sus creadores han querido añadir un toque diferente, que además da nombre al juego, el Legado. Y es que cuando un personaje muere en el juego lo hace para siempre, será su hereder@ quien tenga que continuar con su lucha por vengar al rey, de este modo el nuevo personaje heredará algunas de las características de su progenitor y tendrá algunas nuevas, ofreciendo tres herederos diferentes cada vez que muramos. Algunas veces tendremos verdaderos herederos que tienen características parecidas a las del anterior personaje, pero otras veces la naturaleza nos jugará una mala pasada al cambiar por completo la línea genética por la que tanto habíamos luchado.
La variedad de características con las que van a contar nuestros personajes es muy grande y no todas ellas serán las clásicas como fuerza o habilidades. Para empezar la figura de nuestro heredero puede cambiar completamente, nos encontraremos desde personajes que sufren enanismo o gigantismo, hasta algunos que parecen un espagueti andante, algo que afectará a la jugabilidad, por ejemplo en el rango de ataque de nuestro héroe. Pero no se queda ahí la cosa, por ejemplo nuestros personajes podrán tener vértigo que hará que veamos todo el mundo al revés, daltonismo con el que veremos un mundo en blanco y negro o una fuerza tan desproporcionada que lance a todos nuestros enemigos a varios metros de distancia cada vez que los golpeamos. Cada una de estas características determinará la forma en la que jugamos las partidas, ya que según las que tenga nuestro personaje deberemos afrontar la acción de una u otra forma.
A parte de esto también podremos heredar ciertas habilidades especiales que se usarán con el botón Y. Estas habilidades pueden ir desde lanzar un grito que aleje a todos los enemigos que tengamos alrededor hasta simplemente usar el escudo para protegerse.
Evolución o muerte
Al principio el juego será extremadamente difícil, después también no os vamos a engañar, aunque es verdad que se suaviza algo. Solo con las habilidades heredadas no podremos hacer nada, para poder conquistar todas las zonas del juego deberemos construir nuestro propio castillo e ir evolucionándolo. Cada vez que morimos lo primero que hacemos es escoger un heredero y lo segundo es ir a nuestro castillo. En el castillo podremos usar las monedas que hemos conseguido en la última incursión en el mundo, para gastarlas en mejorar características del personaje ampliando y mejorando las diferentes partes del castillo. Estas características son las clásicas de un juego de este estilo, podremos mejorar nuestra vitalidad máxima, maná máximo, carga máxima, mejorar el efecto de las pociones o los ataques del personaje. A mayores también podremos desbloquear ciertas clases de personajes como bárbaro o ninja, que ofrecen habilidades únicas y que pasarán a formar parte del extenso abanico de posibilidades que habrá a la hora de generar un heredero.
Además cuando construyamos las diferentes dependencias del castillo contaremos con el herrero, la hechicera y el ingeniero, que estarán en el tercer y último paso antes de aventurarnos de nuevo en el mundo. El herrero nos venderá espadas, petos, guanteletes, botas y capas para nuestro héroe que tendrán diferentes características, mientras que la hechicera nos ofrecerá diferentes tipos de hechizos que nos hagan la vida más fácil. El problema de esto es que no contaremos con ninguna pieza de primeras, tendrá que ser en las innumerables incursiones que hagamos en el mundo del juego, cuando vayamos consiguiendo los planos para poder construir cada pieza. El ingeniero es distinto ya que nos ofrece mantener el mundo igual que la última vez que jugamos, pero a un precio bastante alto, el 40% de las monedas que consigamos. Tendremos que decidir en que ocasiones nos puede merecer la pena mantener todas las salas en el mismo sitio o aventurarnos con una configuración totalmente nueva.
Sorpresa en cada sala
Después de todo esto podremos volver a entrar en el mundo del juego, eso si, el precio será todo nuestro dinero, o una gran parte cuando consigamos la mejora correspondiente, así que aseguraos de gastar todo lo conseguido antes de volver a jugar. Dentro del mundo no solo nos encontraremos con salas aleatorias llenas de enemigos, también habrá ciertas salas especiales como por ejemplo una con un payaso, que nos propondrá un reto que nos reportará grandes beneficios si lo conseguimos hacer. También habrá salas del tesoro, algunas con hechizos sobre ellos que solo nos permitirán abrir el cofre si cumplimos una serie de objetivos, como por ejemplo acabar con todos los enemigos de la sala o llegar hasta el cofre sin sufrir daños. Otra de las salas importantes será la de teletrasporte con la que podremos movernos entre diferentes zonas del mapa.
El combate es muy sencillo ya que básicamente todo se reduce a atacar con la tecla X y a intentar esquivar saltando. Aunque también vamos a contar con una habilidad mágica especial que nos puede servir en ciertos momentos y que ni mucho menos hay que despreciar. La habilidad mágica como todo se hereda, pero a veces la podremos cambiar en unos altares que encontraremos por el juego. Estas habilidades normalmente son de ataque y sirven para lanzar cierto tipo de arma a un enemigo, podría haber algo más de variedad en este apartado ya que las habilidades mágicas, salvo alguna excepción, son bastante parecidas entre si. En definitiva los combates se basan en que seamos capaces de aprender los patrones de ataque de los enemigos, una vez sepamos como actúa cada uno podremos avanzar mucho más en cada incursión que hagamos en las mazmorras.
Apartado técnico
En el apartado técnico poco hay que decir de Rogue Legacy, sus gráficos no dan para mucho pero su toque retro está más que conseguido, aunque si que se echa en falta algo más de inspiración en el diseño del juego, que a la larga puede resultar muy monótono. La banda sonora sigue la estética general del juego cumpliendo con su cometido, así como los efectos sonoros. Los controles funcionan muy bien y responden a la perfección a nuestras acciones, algo muy importante en un título en el que esquivar y saltar con precisión es indispensable para avanzar.
Conclusión
Rogue Legacy ha llegado para convertirse en uno de los mejores indies del catálogo de Xbox One. Una fórmula tan simple como adictiva que nos ofrece horas de diversión y muerte, haciendo que siempre queramos probar una vez más a ver si esa es la definitiva.