Lanzado originalmente en 2017 para teléfonos móviles y Steam, Simulacra llega este tres de diciembre a Xbox One, Nintendo Switch y PS4. Desarrollado por Kaigan Games, Simulacra es un juego atípico en consolas, creado como una aventura conversacional con toques de terror, en la que encontramos el teléfono móvil de Anna, la cual ha desaparecido. Nuestro objetivo será encontrarla indagando a través de las conversaciones y aplicaciones que encontramos en su teléfono móvil.
La verdad es que cuando me puse analizar este juego mis expectativas eran de lo más bajas, nunca había jugado nada por el estilo y la premisa no me llamaba demasiado porque, sinceramente huyo de los juegos de móvil, pero la verdad es que Simulacra ha sido un descubrimiento muy agradable.
Antes de continuar con el análisis quiero hacer una parada para recomendar que, a pesar de que este análisis se ha hecho en Xbox One, este juego está pensado para funcionar de la manera más inmersiva en un teléfono móvil. Las versiones que nos llegan hoy a consolas son ports de esta versión y, aunque consiguen una inmersión bastante buena en la aventura, la sensación de estar ante un móvil real es algo que añade un punto al juego, así que si os gusta lo que os voy a contar en esta reseña, probadlo en vuestros teléfonos como primera opción.
En Simulacra deberemos de seguir las pistas de la misteriosa desaparición de Anna, la dueña de teléfono móvil que ha llegado a nuestras manos, para conocer más detalles de la joven dispondremos de la pantalla del teléfono la cual está repleta de aplicaciones que, con otros nombres, hacen las veces de Tinder, Facebook, Bloggr, Whatsapp, Gmail, etc… . Además, tenemos acceso a la galería de fotos y vídeos que tiene en su móvil.
En base a toda la información que tenemos en el teléfono, si lo piensas, probablemente si cogemos tu móvil tengamos dentro de él suficiente información para conocerte mejor que tus propios padres, tendremos que ir uniendo cabos, realizando algunos puzles para desencriptar imágenes y conversaciones y, sobretodo, hablar con otros personajes involucrados en la trama a través de las distintas aplicaciones.
Realmente, la magia de Simulacra es que las personas con las que hablamos a través del teléfono móvil en esas conversaciones de Whatsapp y Tinder llegan a parecer del todo reales, con un ritmo natural y varias selecciones de respuesta en cada uno de los casos, Simulacra nos va conduciendo a través de su oscura trama de una forma suave y sin encorsetarnos demasiado a pesar de las limitaciones en cuanto a respuestas.
Simulacra cuenta con diversos finales y caminos a lo largo del juego que se irán dando en función de nuestras elecciones, decidir a quién creer, discernir si lo que vemos es real o ficticio y hacer las veces de detective para llegar descubrir la verdad que se esconde tras las letras que vemos en pantalla, es un ejercicio muy atractivo e innovador y que, como digo, sorprende siendo un aire nuevo dentro de los juegos que tenemos hoy en día además de ser un título que es, hijo de su tiempo.
El guión del juego está realmente bien escrito, y trata temas de rotunda actualidad como las redes sociales, el mundo de lo digital por encima de lo físico y la dualidad de las personas en su vida diaria y la que tienen en la red. Con un final que deja un poso de reflexión, el juego no va a durar más de cuatro horas en ningún caso, aunque sí que es cierto que tenemos la posibilidad de rejugarlo una vez lo acabamos para ver sus distintas vertientes y finales. Además, este modo nos permite acelerar la velocidad de los textos para ir al grano.
Gráficamente Simulacra consigue emular de una forma muy realista la pantalla de un teléfono móvil, con todas sus aplicaciones muy cuidadas y repletas de detalles ningún usuario de iOS o Android va a sentirse en ningún momento perdido dentro del juego. Además, Simulacra hace un uso excelente del sonido, cada aplicación tiene su propio tono que, al poco de jugar identificarás sin ningún problema, dilucidando rápidamente de donde viene la siguiente información. El juego hace uso de un sonido envolvente que, junto con algunos sustos, nos va a hacer vivir la angustia de Simulacra de forma mucho más real. Se recomienda jugarlo con cascos para una mejor experiencia.
El único punto negativo es que el juego esta íntegramente en inglés, y desafortunadamente, este no es el caso de juego que se puede salvar, porque Simulacra por su propio género de aventura conversacional lo basa todo en sus diálogos teniendo, incluso, puzles en los que será necesario tener un nivel de inglés aceptable para poder progresar en la aventura.
En definitiva, Simulacra es un título sorpresivo, totalmente inquietante de principio a fin, consigue mantenerte pendiente de su trama en todo momento, con un gran trabajo de guión y ambientación consigue ser una de las experiencias más innovadoras que he probado. Los temas que trata consiguen hacer reflexionar al jugador, traspasando las horas de juego y dejando mucho poso. Recomendado para todo aquel que se maneje con la lengua de Shakespeare.
